Almas Gemelas 2

Vergüenza no, lo siguiente

El grupo de amigos ya estaba en la puerta del cine mirando la portada de la peli. Todos estaban con muchas ganas de verla menos una persona, Marcos.
-¿Dónde os vais a sentar?- preguntó Lucía desesperada por ver la peli

-Yo en el medio- respondió Marcos rápidamente

En ese momento, Valeria se empezó a partir de la risa y Marcos no entendía porqué.

-¿En serio que quieres sentarte en el medio?- dijo Valeria riéndose- ¿Es que te da miedo o algo?

-¡No, que vaaaaa!

-Entonces, ¿me puedo poner yo en el medio?- dijo Paula- es que a mi si que me da miedo...

-Eeeeeh... ¡Claro! Sin problema...

-Gracias

-Eeeh... de nada

Los chicos pagaron las entradas y tuvieron la suerte de que les tocó en la primera fila. Al entrar al cine compraron las palomitas y entraron directos a su sala. Al final los sitios fueron estos: Lucía la primera, ya que era la más valiente, Ana la segunda para estar junto a David, que era el tercero, Paula la cuarta, porque le daba yuyu, Valeria la quinta, para fastidiar a Marcos, que iba el último de la fila.

-Que rollooo, los anuncioooos, es lo que menos me gusta del cine...- dijo Lucía

-Rt- dijo Valeria

-Bueno, yo mientras voy al baño que los anuncios tardan más o menos media hora...- dijo Lucía- ¿quieres venir conmigo Valeria?

-Vale

Las dos fueron directas al baño y ahí estuvieron hasta que pasó lo que pasó.

-Eeeh... Valeria... no puedo abrir la puerta...- dijo Lucía muy nerviosa

-Anda, déjame a mi- dijo Valeria- pues no, no se puede abrir.

-¿Y q hacemos?- preguntó Lucía intentando buscar una solución

-Pueees esto

En ese momento, Lucía pensaba que iba a hacer algo lógico, pero... no fue así.

-¡¡¡Ayudaaaaa auxilioooo, que viene la niña del exorcistaaaa!!!- dijo gritando Valeria

-¿Pero qué haces?

-Gritar, ¿no lo ves?, ¡ayudaaaaaaaaa!

-Para, para

-¡Se está comiendo mi piernaaaa!

-¡Valeria!

-Ayudaaaaa

Y de repente, vino la señora de la limpieza con un montón de policías.

-¿Hay alguien herido?- preguntó nerviosa la señora de la limpieza

-Eeeeh... no, estamos encerradas, nada más- dijo Lucía

-No, me está mordiendo la otra piernaaa- gritó de nuevo Valeria

-¿En serio que no hay nadie herido?- preguntó el policía

-No, es mi amiga, no le hagáis caso...- dijo Lucía- por cierto... puedes parar ya...- le dijo a Valeria

-Vale, tienes razón, paro ya.

Los policías lograron sacarlas del baño al preguntarles que si tenían el pestillo puesto. Las chicas, avergonzadas, fueron corriendo a su sala para no perderse nada de la peli y le prometieron a los policías que mirarían siempre si tenían el pestillo puesto.

-¿Por qué habéis tardado tanto?- les preguntó Marcos

-Nos... hemos quedado encerradas en el baño. - dijo Lucía

-Bueno, encerrado encerrado... no, teníamos el pestillo puesto y pensábamos que estábamos encerradas- dijo Valeria avergonzada

-Que listas que sois... anda, sentaos a ver la peli que falta poco para que empiece...

Justo cundo las chicas se sentaron, la peli comenzó y el pobre Marcos estaba temblando de miedo, pero a la vez, se hacía el valiente, como siempre.

-Esta peli es para niños de tres años, ¡yo me voy!- dijo Marcos pensando que su plan iba a funcionar

-De eso nada, te vas a quedar aquí y la vas a ver. Te conozco demasiado Marcos, por mucho que digas que es de niños, sé que te da mucho miedo y que eres un cagueta- dijo Valeria riéndose

-¿Y eso como lo sabes?- preguntó Marcos

-¿Pues porque a lo mejor te conozco desde los tres años?

-A lo mejor

En ese momento, la peli empezó y... hubo una chispa entre Valeria y Marcos, cosa que nadie se esperaba.