XLV.

82 9 0
                                    

Y luego de unos días, él accedió.

Si, se lo había pedido a mi jefe.

Ahora, además de preparar café, también lo iba a servir.

¿Sabes cuan alegre me siento de saber que voy a poder acercarme a ti?

becca.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora