Ahí estábamos los cuatro en una gran casa, muchísimo más grande que la de Ten. Mire a Ten y a Taeyong que conversaban animadamente mientras yo y Jaehyun los seguíamos en silencio. Entonces Taeyong se giró
-venga ir a hacernos la cena-
Dijo cogiendo a Ten de la mano y sentando lo en el sofá empezando a hablar de sus cosas de pareja.
-pff... que mal...-
Dijo Jae Hyun apoyándose en la puerta.
-¿pasa algo?-
Le pregunté algo preocupado. El solo me miró y suspiró.
-nada, que ya empieza cuando cuando mi señor se junta con tu amor, empieza a comportarse de una forma más estúpida. Como si intentará darme celos, sabe que yo estoy enamorado de él y le gusta hacerme la vida imposible pero yo no me puedo quejar solo soy un simple esclavo -
Yo le mire sorprendido.
-¿en serio? Bueno... mi amo me trata bien incluso dice que odia tratarme como si fuera su sirviente, según el me trata como un amigo-
-¿como?-
El contrario le miró incrédulo, como si eso no fuera normal, que no lo era yo solo era un esclavo sirviendo a un niño rico. Yo solo asenti.
-¿pero el te ordena cosas? ¿O te obliga a hacer cosas que en realidad tiene que hacer el?
Yo negué con la cabeza.
-solo lo hace cuando hay que hacer algo juntos, como la otra noche que me dijo de beber con él, y acabamos teniendo sex...-
Entonces me callé de repente, Jaehyun me miró con la boca muy abierta abierta y los ojos como platos.
-¿Qué? -
Dijo casi gritando yo enseguida le tape la boca para no alarmarlos y vinieran donde nosotros. Él apartó mis manos de su boca.
-¿pero qué hiciste? ¿Metiste algo en su bebida?
-fue él el que se abalanzó sobre mi y bueno yo también estaba borracho así que mucho no pude resistirme-
Dije recordando aquellos momentos con una sonrisa dibujada en mis labios.
-madre mía... bueno, podremos usar esto a nuestro favor.-
Dijo con cara de malicia, no supe muy bien a que se refiere a pero solo pude asentir entonces entre los dos nos dispusimos a hacer la comida para los cuatro sirviendo todo en vajilla de lujo y poniendo todo en la mesa que usaban para cenar. Una vez estaba todo listo nos acercamos, estaban besándose apasionadamente, estaba notando como mi corazón empezará a romperse poco a poco.
-amos la comida está lista y servida-
Dijo Jae Hyun en tono formal haciendo una reverencia para luego hacerla yo también aunque algo despistado para luego irnos.
-Yuta ¿no comes con nosotros? ¿Ni tu Jae?-
Dijo Ten mirando a Yuta algo apenado pero entonces Taeyong le cogió de la mano llevándola hasta la mesa.
-¿Pero tu estas de broma? Los sirvientes comen alejados de sus amos, que poco glamour puedes llegar tener veces Ten, parece mentira que seas de la familia chittapornkul de verdad...-
Dijo quejándose con un tono molesto, yo al oír las palabras del contrario no puede evitar detenerme pero Jaehyun me empujó hasta la cocina una vez terminaron de hablar sus amos.
-algún día me fugare o algo...-
Renegó Jae, parecía de esas cosas que se dice en serio pero solo cuando se está enfadado y no se piensa de verdad la realidad o las consecuencias. Suspiré y lo abracé para calmarlo, de verdad Jaehyun me había caído bien. El me miro y me sonrió. Nos pusimos lo que había sobrado de la comida para luego cenar en la mesa.
-¿Sabes? en realidad Taeyong es buena persona, solo que delante de las personas finge ser un snob-
Yo asentí, le podía haber contestado algo pero tenía comida en la boca, no podía contestarle.
-Sus padres lo educaron así, el intenta aparentar como de refinado puede ser… –
Añadió pero un tintineo de fondo se escuchaba desde el lugar donde se encontraban, teníamos que dirigirnos para allá.
-Ya hemos terminado recoger todo y limpiarlo-
Ten rodó los ojos ignorando el comportamiento de su novio “el también piensa que es un snob” pensó Yuta acercándose a la mesa para luego llevarse a la cocina gran parte de las cosas.
-Venga Ten cariño, vayamos a beber algo, hace mucho que no nos vemos… -
Se acercó a su oído abrazando al contrario por el cuello susurrando algo seguramente provocativo y le cogió de la mano llevándoselo a la sala de estar. Ten sonrió y Taeyong miro a JaeHyun.
-Jaehyun traemos el mejor vino que haya en la bodega -
Jae solo asintió y fue a la bodega dejando lo que quedaba de mesa por recoger. Yo mire como se iba cada uno a un sitio y suspiré viendo como Ten se iba a la sala de estar. Recogí lo que quedaba y me dirigí a la cocina, una vez terminé me senté en una de las sillas de la cocina y espere a que Jaehyun volviera, observaba la cocina, se notaba que era moderna, aunque obviamente Taeyong era rico era normal que todo en aquella casa fuera moderno.
Al cabo de un rato Jae volvió estaba algo raro, le observé extrañado, él se apoyó sobre la encimera se mojo la cara y suspiró resignado.
-¿Jae que pasa? Hasta donde más de media hora en venir -
Le pregunté preocupado el me miro y se cruzó de brazos, no entendía nada de lo que estaba pasando.
-Esto es de locos…-
Dijo con impotencia, cada vez me preocupaba más, no dejaba de preguntarme qué había pasado ahí afuera.
-Jae ¿que ha pasado ahí afuera?-
-Ha pasado que Taeyong nos obliga a ver como ellos lo hacen, están muy borrachos, Ten también quiere...-
Le miré sorprendido, parecía increíble ¿de verdad íbamos a tener que hacer eso? No quería verlo, si lo veía me pondría a llorar, y parecía que Jae estaba apunto de llorar también. Suspiré y le cogí del brazo para llevarlo allí, no teníamos más remedio que ir y aguantar ver como lo hacían en nuestras narices.
Una vez allí nos sentamos en el sofá de enfrente del cual estaban ellos uno encima del otro metiéndole la lengua hasta la campanilla, me fije en la expresión de Jae, estaba como yo, no le gustaba nada tener que presenciar eso. Eso no era plato de buen gusto.
Narra Taeyong.
Ahí estábamos Ten encima de mí besándome apasionadamente mientras nuestros respectivos esclavos nos observaban, todo aquello era tan excitante para mi. Poco a poco le quite la camiseta al contrario dejando ver su precioso torso, incluso pude ver como Yuta clavaba la mirada en su torso, yo sonreí y comencé a acariciar su torso, mirando de vez en cuando al japonés con una sonrisa de victoria mientras Ten mordía y lamía mi cuello como quería haciéndome sacar algún que otro gemido. Después el me quito la camiseta a mi haciendo mostrar mi blanco torso. Entonces separe a Ten de mis labios y mire a los dos sirvientes con una sonrisa ladina.
-Chicos hacerlo a la vez que nosotros-
Los sirvientes se miraron sorprendido y confundidos.
-Oh sí por favor Yuta hazlo seguro que es genial -
Añadió Ten apoyándome yo sonreí victorioso y les observamos viendo cómo procedían.
Continuará
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El no es mi esclavo. [Yuten]
FanficAño 2031, Japón se adentro en una profunda crisis y muchas yakuzas raptaban a niños y adolescentes para venderlos en otros países, así es como Yuta es obligado a vivir con un adolescente multimillonario llamado Ten. Y por lo visto en Corea del Sur a...