las siete tumbas

3era parte de las 7 tumbas

Se encargo de hablarles a los demás hermanos para que fueran a ver lo ocurrido. Se acerca su esposa y le pregunta:
¿Qué tienes? ¿estás bien?.

-No, no lo estoy...
Mi madre ha muerto y no estuve con ella para lo que necesitaba nunca la apoye, y ahora que se fue ya no puedo hacer nada más que ir a verla a un cajón donde le aventaran tierra en todo su cuerpo, no se merecía esto, nunca estuve ahí para ella debí ir a visitarlos, no conocieron a mis hijos, no saben quien fue mi mamá ni quien fue mi padre...

Pasaron unas horas, en cuanto todos los hermanos supieron fueron a casa de sus padres pero lamentablemente los dos ya se avían ido...
Quebraron llanto al ver a sus padres recostados en el sofá abrazados, fríos y pálidos sabiendo que esta es la última vez que los verían., fue el peor momento de todos los hermanos la hija no podía ni con su alma, se sentía culpable por dejarlos a un lado y no seguir alimentándolos, cuidándolos y estar ahí para apoyarlos sabiendo que este día se caducaría, todo era en vano, sabían que aproximaba este día.

Los gemelos Sebastián y Uriel tenían 12 años, por fin se les cumplió lo que deseaban, vieron a sus abuelitos juntos así como querían, ellos pensaron que estaban dormidos, llego un primito de 17 años, hijo del hermano mayor y les dijo: ellos son y serán nuestros abuelitos así se quedaran dormidos para siempre, ya no abrirán más los ojos...

Uriel y Sebastián asustados se fueron con sus papas y Sebastián le hablo a su mamá y le pregunto: -mamá- ¿esta es la última vez que veremos a mis abuelitos?
Se le hizo un nudo en la garganta y guardo silencio...
-Si mijo, esta es la primera vez que los ves, y será la última vez que los verán. Sebastián comenzó a llorar y se fue corriendo a un parque cercas de ahí, el esposo de la hija la regaño le dijo que para que le decía eso.
Ella contesto - tenian que saber la verdad, ahora mis papas estan en un lugar mejor, porque no merecían estar sufriendo así, ellos me dieron la vida y me sacaron adelante y yo no los valore.

Arreglaron todos los papeles del entierro, tumbaron la casa y vendieron todos los muebles que tenían en la casa. Brais, su esposa y su padre Elian fueron sepultados en ese mismo terreno.

Años después las personas contentas porque al fin se hizo una carretera, ya no complicarían mas la vida cruzando el rio, pero sus almas no estaban en paz porque tumbaron la casa que ellos mismos construyeron desde abajo y toda la vida habían vivido ahí...
Muchas personas dicen que derrepente las almas en pena abundan por ahí, provocaron un choque automovilístico como a los 4 días después, iban tres muchachas de curiosas a ver si era cierto lo que les habían contado.
De la ciudad se dirigían al bosque donde supuestamente se aparecían las almas de esas tres personas que fallecieron, ya que también el papá de Brais no descanso porque quería que la herencia lo recibiera su hijo no sus nietos.
Iban llegando a ese mismo punto y la que iba conduciendo miro el retrovisor y no vio a nadie y cuando devolvió la mirada al frente estaba la esposa del leñador parada en el mero punto de donde antes era su casa, la muchacha le saco la vuelta y se descontrolo el carro, derrapo y del lado contrario venia un tráiler, choco con él, las tres muchachas se mataron junto con el trailero que quedaron sus piernas prensadas al volante y perdió mucha sangre...
Las personas que vieron el choque se acercaron a ayudar, y dijieron que la que iba de copiloto dijo:
-Sus almas siguen aquí...
-Invaden donde antes fue su propiedad...

Desde ese aparatoso accidente clausuraron esa carretera, y dicen que en el bosque se escucha el ruido de la moto cierra del leñador y que ven a una mujer lavando ropa cercas del rio, escuchan risas de mujeres, el ruido de un trailer y el caballo relinchando de Elian.

Todavía siguen vagando por ahí.

Las siete almas aun no descansan en paz.

-Stephanie Saa.