4. Sábado

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Llegó el día que había estado esperando con ansias. Moría por conocer a Agustín. Saber más de él, conversar durante horas fuera de una pantalla. Saber que tan sinceras son cada una de sus palabras, poder mirar sus expresiones ante cada frase.

Estaba a sólo segundos de llegar al lugar del encuentro. Miré mi reloj y tan solo habían pasado dos minutos de la hora establecida. Me detuve, arregle un poco mi ropa y abrí la puerta del lugar. Observe todo el alrededor en busca de Agus. Estaba en una de las últimas mesas junto a la barra. Sonreí y comencé a caminar hacia él, se encontraba de espaldas.

—Hola, Agustín —dije amigable. Él se giró y fijo su mirada en mi. Me observó durante algunos segundos que parecieron horas. Se puso de pie y me regaló una amplia sonrisa.

—Vaya, sos más hermosa de lo que dijo Rugge —dijo sonriendo.

Creo que mi cara se puso como un tomate, o peor, porque la sentía caliente. Esta era como una especie de cita, bueno, solo que vendría siendo de amigos.

—Gracias —dije después de un tiempo.

Nos sentamos y pedimos nuestra orden. Dos helados de chocolate.

—¿Sabes? Es la primera vez que conozco a alguien de esta manera —dijo rompiendo el silencio que se había formado.

—También es mi primera vez. Pero ha de ser algo bueno, ¿no? —dije alzando una ceja. Nos trajeron nuestros enormes helados, se miraban deliciosos.

—Claro, sos una persona muy linda y me gusta mucho hablar con vos, siento que podía confiar plenamente en vos —dijo mirándome con una sonrisa.

Eso estaba haciendo que muriera lentamente, me gustaba en serio Agustín y sus palabras, su forma de mirarme, me estaba haciendo efecto.

—También me agrada que hablemos y más que nos estemos conociendo, siento que hace mucho debió haber sucedido este encuentro —dije comiendo de mi helado.

—Ahora que ya nos conocemos podemos hacer muchas cosas juntos. No se, podemos salir a fiestas o a pasear.

—Me parece una increíble idea —dije con mucho entusiasmo, me golpee mentalmente por mi reacción.

—Presiento que nos volveremos inseparables —dijo comiendo de su helado.

—Cuando no me soportes, solo me dices —dije mientras disfrutaba de mi helado.

—¿Cuenta desde ahorita? —pregunto riendo, lo mire y me encogí de hombres, mientras reía.

Tan sólo llevamos unos minutos y ya lo consideraba de los mejores momentos en mucho tiempo, este se convertiría definitivamente en mi lugar favorito.

—A veces suelo decir cosas que no vienen al caso, o se me escapan algunas palabras de más. No sé, tal vez Rugge te contó —dije mirándolo y ahorita era uno de esos momentos. Pero en mi defensa, estaba en confianza y por eso hablaba y hablaba, quería que Agus me conociera perfectamente.

—Solo dijo que en ocasiones no te aguantaba —dijo restandole importancia.

Lo mire a los ojos esperando que fuera una broma. Rugge no podía decir eso de mi, pasaron los segundos hasta que estalló en una carcajada. Tal parece que le estaba gustando gastarme bromas. Pero ya que, lo acompañe en su momento de risas. Así estuvimos durante un largo rato, entre platicas, bromas y muchas risas.

Estaba pasando una increible tarde a su lado. Terminamos nuestros helados y ahora nos estábamos dirigiendo hacia nuestras casas.

Agus se ofreció a llevarme, a lo que no me negué, era mi oportunidad de conocerlo más, estábamos llegando a su auto. Me abrió la puerta y luego entró él, me coloque el cinturón.

—Dime, ¿que es lo que te gusta hacer? —dije a los segundos de emprender nuestro camino.

—Me gusta mucho cantar —dijo mirándome por unos segundos.

—Eso no me lo habías dicho —dije mirando su perfil. Es tan hermoso, podría estar horas viendo detalladamente cada uno de sus gestos.

—Es que pretendía enseñártelo —nos detuvimos en un semáforo, en lo cual aprovecho y puso rápidamente una canción en el reproductor. —Me gusta esta canción.

—Es muy buena, la escucho seguido —dije tarareándola. Estaba sonando Ya me enteré, el resto del camino lo pasamos cantando, bueno más Agus, quien definitivamente tiene una increíble voz.

Llegamos a casa y hubiera deseado que el camino fuera más largo. Salimos del auto, me acompañó hasta la entrada.

—Me gustó conocerte, la pase muy bien —dije sonriendo.

—Prometo que se repetirá. Te escribiré para ponernos de acuerdo.

—Si. Gracias por traerme.

—No hay de que. Ahora ya se donde vives —dijo riendo.

—Puedes venir cuando quieras. Bueno, nos vemos.

—Te tomo la palabra. Nos vemos —dijo depositando un beso en mi mejilla. Sonreí y me quedé viendo hasta que desapareció de mi vista.

Carolinakopelioff

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Carolinakopelioff Increíble haberte conocido @agusbernasconi07 👌

Ver los 60 comentarios

Michaelronda Me debes una salida.

Valentinazenere Se ven muy lindos. 😏

Agusbernasconi07 Vos sos increíble @carolinakopelioff

Ruggeropasquarelli Soy muy bueno uniendo almas. 💑

Jorgelopez_as Con que Agus.

Hace 2 horas



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Aviso por aqui que no estare activa en la semana. Hasta el fin de semana actualizare todas mis historias.

Tengan una feliz noche y un buen inicio de semana.

L@s quiero.

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