Capitulo 1

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CAPITULO 1

E

l sol brillaba en lo alto del cielo dejando saber que era medio dia, y el calor era extremadamente sofocante. Yo caminaba por la acera hacia la oficina de la doctora Treboun. Era ya algo rutinario. Cada dia 15 de todos los meses tenía que ir a ver a la doctora para saber cómo seguía mi enfermedad nunca antes vista. Mi mama con la cara preocupada que ponía cada dia 15 de todos los meses caminaba a mi lado.

-Te preocupas demasiado mama ya sabes que nunca nos dicen algo diferente. Siempre es lo mismo. Que todavía no saben que es, que todavía no encuentran nada nuevo, que la enfermedad no avanza, que al no conocerla no me pueden dar ningún tipo de tratamiento. No te preocupes no nos dirán nada diferente.- O al menos eso esperaba yo. La verdad era que yo nunca me sentía enferma, aunque si sabía que mi sistema inmunológico era diferente al de todos los demás humanos que habían conocido hasta ahora los doctores del mundo. Bueno a decir verdad toda yo era distinta a todos los humanos. Nadie podía entender por qué tanta diferencia y tanta inmunidad a las enfermedades. Eso era a lo le llamaban mi enfermedad. El ser inmune a todo... incluso a las enfermedades terminales. No sabían si era inmortal o algo así pero todos los meses me revisaban para ver si algo había cambiado. Todos los malditos meses por 16 años había perdido un dia completo de mi vida en este maldito centro de investigaciones con la doctora Treboun. Ella era una mala persona que se hacía pasar por toda una santa frente a mi mama. Ya yo estaba harta de tener que verla con esa cara suya de experimento no completo que tenia cada vez que me veía. Era como si me quisiera crear nuevamente como si quisiera sacarme eso que hacía que no me enfermara para ser como los demás y ponérselo ella. Este era el último dia de mi vida que iba a ese lugar. No por decisión de la doctora ni la de mi mama. Si no por mi decisión propia. Ya no soportaba más los exámenes extraños y las pruebas raras. Mama no me contesto y entramos sin inmutaciones en el tiempo.

La doctora Treboun nos recibió con la cara de siempre y su sonrisa fingida diaria. ¡No podía ser posible que solo yo me diera cuenta! Como odiaba todo esto. La doctora Treboun era una mujer alta, de unos 45. Piel morena, pelo castaño y de ojos negros como los de un cuervo. Mi madre decía que cuando joven la doctora tuvo que haber sido hermosa. Yo no lo pensaba así. No si cuando joven seguía siendo igual de fría y calculadora que ahora.

-Buenos días señora Redgort. Nataly espero que estes lista para nuestros trabajos mensuales linda.

Quería decirle que no fingiera ser buena conmigo delante de mi madre, que yo sabía a la perfección lo calculadora y víbora que era, pero mi madre estaba cerca y solo asentí.

Me llevaron al cuarto habitual que en realidad era una sala de observación y experimentación. Ya todo esto era tan habitual y rutinario para mí que hacía años que no me explicaban lo que tenía que hacer porque ya lo hacía con naturalidad.

-Nataly, hoy el proceso es algo diferente. Resulta que en los últimos exámenes que te hicimos descubrimos la razón por la que no te enfermas y la razón por la cual nunca vas a saber lo que es envejecer. La razón por la que te envidio y te envidiaría cualquier mujer, incluso tu madre.

-Cállate vieja bruja. No hables de mi madre porque no conoces lo bondadosa que es su alma. No como la tuya que esta negra del odio, celos y rencor. Así que no sigas hablando de ellas porque juro que te sacare los ojos.

-Tranquila escuincla, solo sacare parte ya que no la puedo sacar toda porque es una vitamina y fluye con tu cuerpo. Solo sacare la mayor concentración en el área de la pelvis. Y bueno, yo no lo voy a probar en mí todavía, no soy idiota. Lo probare primero en alguien de tu mismo tipo de sangre, o negativo, para haci saber si solo se reproduce entre los del mismo tipo de sangre y después lo probare en mi. Por si le hace daño a los demás aunque sean del mismo tipo de sangre. Digamos que el muchacho que se ha ofrecido a la inmortalidad no sabe que será usado como conejillo de india. Por cierto lo que tienes que todos nosotros no hemos descubierto que es una vitamina descubierta hace mas de mil años. Se llama vitamina z2wx .

Mi inmortalidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora