Oscuridad

III

Hola Trollhunters. Lamento mucho la tardanza, tuve algunos problemitas debido al regreso a clases y seguir sin computadora u.u

En fin...

En esta parte ya regresamos con Jim y su travesía por las Tierras Oscuras e.e

Que lo disfruten.

Disclaimer: Trollhunters y sus personajes son propiedad de Guillermo del Toro, DreamWorks Animation y Netflix.

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Las Tierras Oscuras eran un lugar siniestro, frio y abrumador.

El lugar era iluminado escasamente por una extraña y tenue luz cuya procedencia era desconocida. Montículos de roca era lo único que había; cuevas, acantilados, todos hechos de roca negra y resbaladiza; ¿qué clase de lugar era ese? Ahora entendía porque Gunmar quería escapar de ahí.

Cada grito o gruñido que se escuchaba en la lejanía le provocaba escalofríos y, al mismo tiempo, lo mantenía alerta de cualquier cosa que podía pasar. Porque si bien no se había encontrado con ningún troll, sus gruñidos y gritos eran percibidos por todo el lugar, haciendo eco a causa de las paredes de roca que lo rodeaban.

¿Cómo es que había terminado ahí?

Quizá debió pensarlo un poco más antes de actuar. Pero estaba seguro de que si lo hubiera hecho se habría arrepentido y no estaría ahí en ese momento, algo bueno y malo a la vez.

¿Se arrepentía?

Por supuesto que no.

Sabía que tarde o temprano tendría que entrar a este lugar. Tarde o temprano tendría que enfrentar su destino. Y ese momento había llegado...

No tenía idea de cuánto tiempo había pasado desde que atravesó el portal; minutos, horas, días, no lo sabía y la extraña luz del lugar no le ayudaba a averiguarlo.

Por si fuera poco no se sentía agotado, tal vez era uno de los efectos del nuevo poder de su amuleto, tal vez era la adrenalina que aún no escapaba de su cuerpo; no lo sabía, pero lo agradecía.

En ningún momento guardó su espada y con cada ruido nuevo que escuchaba la empuñaba con mayor fuerza hasta el punto en el cual sus nudillos comenzaron a doler. Estaba seguro de que lo seguían y de que, quien quiera que fuera, lo atacaría en cualquier momento... Y no se equivocaba...

Un silbido.

Eso fue lo único que escuchó y lo único que necesitó para saber lo complicado de la situación en la que ahora se encontraba.

Giró con velocidad para encarar al ser que producía ese desesperante sonido, estaba listo para enfrentarlo y, a diferencia de las veces anteriores, esta vez sería él quien venciera...

— ¡Pero miren nada más!—Exclamó con diversión una voz de entre las sombras—. ¿Qué te trae por aquí Cazatrolls? ¿Acaso me has extrañado?—Continuó mientras salía de su escondite.

Frente a él se encontraba esa troll de ojos verde tóxico y piel purpura; sus garras afiladas aruñaban la pared de roca de la cual había salido con forme se aproximaba al encuentro del joven Cazatrolls.

—Nomura—Gruñó Jim con el ceño fruncido, alzando con rapidez su espada y colocándose en posición defensiva—. No esperaba que tu fueras quien me recibiera—Se encogió de hombros intentando mostrarse relajado—, en realidad esperaba algo mejor; pero bueno, no siempre se tiene lo que se quiere—Se burló causando la molestia de la Cambiante.

— ¡Haré que te arrepientas!—Masculló sacando sus armas, las cuales eran dos espadas curveadas que ardían como el fuego mismo.

No fue necesario ser un adivino para saber lo que ocurriría a continuación.

Antes de que Nomura pudiera evitarlo él ya había saltado hacía un lado para evitar el ataque que la Cambiante estaba por realizar al correr contra él; y con la misma agilidad terminó a sus espaldas golpeándola fuertemente con su espada derribándola al instante.

—Haz mejorado...—Murmuró su enemiga desde el suelo volviendo a tomar sus armas para lanzarse contra él nuevamente—. ¡Pero eso no te será suficiente!—Exclamó furiosa iniciando un nuevo ataque.

Y con cada ataque que el chico esquivaba su ira aumentaba.

No importaba que tan rápida fuera, él la superaba.

— ¿Crees que porque tienes esa nueva armadura podrás vencerme?—Gruñó fastidiada cuando su último ataque volvió a fallar—. ¡Pues te equivocas!

Y tras ese nuevo grito lanzó ambas espadas contra el chico en un intento desesperado por herirlo, una maniobra aparentemente estúpida puesto a que ahora estaba sin armas a merced del joven guerrero.

Pero ambas espadas surtieron efecto, pues ahora el chico también se encontraba desarmado.

—Sin armas—Habló con voz agitada la troll—, una desventaja para ti... no tanto para mí—Dijo con suficiencia creyendo que la victoria era suya pues se preparaba para atacarlo.

—Yo no estaría tan seguro—Mencionó sonriente acercando ambas manos a los costados activando las cuchillas que en su armadura se ocultaban.

— ¿Pero cómo...?—Masculló sorprendida al ver como las cuchillas se materializaban en las manos del chico quien no perdió el tiempo y las fusionó en un boomerang que lanzó contra ella.

El boomerang ahora de un color rojizo como la armadura que portaba, fue lo suficiente como para distraer a su oponente y permitirle así que volviera a crear su espada para lanzarse contra ella y derribarla.

Un golpe bastó para dejarla inconsciente.

Un silbido, ahora proveniente de sus propios labios, fue lo único que se escuchó antes de que el boomerang volviera a su mano y se desvaneciera entre esta.

—Quien silba al último, silba mejor—Dijo divertido y al momento se arrepintió—. Necesito mejorar mis bromas—Se quejó de sí mismo con forme se alejaba del lugar para continuar con su búsqueda.

Una victoria entre muchas que aún faltaban. Al final Nomura le había ayudado a probar la fuerza de su nueva armadura, sin duda ahora era más ágil y fuerte, solo esperaba que eso fuera suficiente para derrotar a Gunmar...

El "silencio" se hizo presente nuevamente, el sentimiento de sentirse observado no se terminaba, más ahora sabía que estaba fuera de peligro... por ahora...

Su primer objetivo era encontrar a los bebés, una vez que se asegurara de ponerlos a salvo continuaría con la siguiente parte: encontrar y derrotar a Gunmar.

Pero, ¿cómo los encontraría?

Los gritos y gruñidos opacaban las risas y llantos de los bebés, el lugar era demasiado grande y prácticamente se encontraba caminando a ciegas.

Necesitaba alguna señal, algo que le ayudara a ubicarse.

Tal vez no debió noquear a Nomura, quizá pudo haberla obligado a llevarlo hasta la guardería, o, cuando mucho, a que le dijera como llegar hasta ella. Pero ya nada conseguía lamentándose, debía encontrar otra forma de dar con los bebés...

Y tal parece que sus deseos fueron escuchados.

Pues el ya conocido "¡Waaka chaka!" comenzó a resonar entre las paredes de roca. Tal vez los Goblins puedan guiarlo hacia los bebés...

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Y eso es todo, tal parece que nada le será fácil a Jim jeje... en lo personal yo moría (muero) de ganas por una revancha contra Nomura, ¡quiero que la venza de una vez por todas! Y pues, ¿qué les pareció? Creo que quedó medio suelto el enfrentamiento u.u pero pues, acabo de escribir esta parte XD y no soy muy buena con las escenas de acción jeje...

En fin...

A todos los que leyeron hoy... GRACIAS