Happy Birthday

Eva Monroe

  —¡Justin! ¡Despierta!—exclamó Pattie.

  Justin abrió sus ojos poco a poco, vio a su madre, junto al rostro de su hermano pequeño Jaxon y no entendió que era lo que había sucedido, otra vez se encontraba en el suelo con un chichón en su rostro. Se sentó y su madre le trajo un vaso de agua, la bebió y se quejó por el dolor en su nariz, la cuál estaba casi morada por el golpe. Se levantó y su tía le ofreció hielo, el cuál depositó en su nariz y terminó por saludar  a todos con una enorme sonrisa.

  —¡Bien! ¡Ahora podemos buscar el banquete de comida!—exclamó un hambriento Jeremy.

  —¡No! ¡Espera! ¡Aún no la conoció!—gritó desesperada Jazzy.

  —¿Conocer? ¿A quién?—preguntó el rubio curioso.

  —¡La nueva integrante de la familia!—exclamó Jazzy.

  —¡OH POR FAVOR! ¡Madre dime que no estás embarazada!—dijo Justin a su madre ye ella rió mientras se abrazaba a su novio.

  —¡Ven Eva! No seas tímida...—dijo Jaxon a una puerta.

  Justin no entendía que lo que sucedía hasta que vio una mano sostener la mano de Jaxon y de a poco observó salir a una joven, de piel blanca, ojos marrones y tierna sonrisa. Llevaba un short de jean, junto a una camisa de seda, su pelo suelto y con ondas, lo tenía casi por los hombros, ella lo vio y no aguantó el llanto, la observó extrañado hasta que entendió. Se acercó a ella y la abrazó, ella hizo lo mismo y lloró en su hombro, la miró a los ojos y ella sonrió.

  —Disculpa,no era la impresión que quería darte...—rió.

  —¡No te preocupes! ¿Eres belieber?—preguntó y ella asintió. —¡Oh! ¡Por eso dijeron que eras de la familia! ¡Se referían al fandom!—dijo totalmente seguro, pero ella rió a carcajadas.

  —No no era por eso...—susurró Eva.

  —¿Y como te llamas preciosa?—exclamó Justin mientras la tomaba de los hombros y la conducía al comedor para cenar. Ella no tardó en sonrojarse.

  —Eva Monroe...—se presentó la joven.

  El resto de la noche Eva y Justin hablaron muy animadamente y rieron, ella le comentó que era de España y había hecho un intercambio, por lo que se quedaría un mes en la casa de Jeremy junto a su familia, hablaron de diversos temas y Justin comenzaba a sentirse muy cómodo con ella, y eso puso en alerta a sus amigos, era su cumpleaños y temían que Eva lo lastimara. Pero lo que ellos no sabían era que Eva, no pertenecía a esa clase de chicas, a Eva le encantaban los chicos como Justin y creían que eran únicos.

  Eva adoraba leer, adoraba la música y por sobre todo adoraba escucharlo cantar, agradecía al tiempo por haberle dado semejante regalo de poder tocar el piano mientras Justin cantaba a su lado. Y fue ahí cuando Justin se enamoró, de como sus manos bailaban en el piano, como sus sueños volaban en su mente y como sus ojos lo observaban.