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CAPÍTULO 2: ¿UN CABALLERO DE ARMADURA?
- ¡¡Peyton!! - gritaron las dos a la vez, ahora entiendo el porque gritaron.
Creo que el hueco de mi cabeza creció más, el dolor de mi cabeza era punzante.
- ¿Estas bien? - la voz preocupada de Laly se escuchó por todo el lugar.
- ¿Ustedes que creen? - pregunté poniendo mi mano en mi cabeza.
- Lo siento mucho, no tuvimos mucho control de la pelota. ¿Estas bien? - pregunto un chico que acababa de llegar corriendo.
Por su uniforme se que es del equipo de baseball.
- Si estoy bien, solo no me esperaba un pelotazo en mi frente - intente bromear, pero el chico estaba demasiado preocupado.
- ¿Cómo puedo ayudar? - preguntó
- Solo dale una lección de mi parte al que hizo ese lanzamiento.
- Vamos a la enfermería, esto es demasiado por un día - ordenó Canela.
- Aunque creo que no se va sorprende mucho la enfermera - dijo Laly mientras me agarraba del brazo para que me apoye en ellas.
Cuando llegamos la enfermera solo sonrió y prosiguió con ver si no tenía que ir de urgencias al hospital.
Felizmente todo estaba bien, me dijo que no creía que me muera por el par de golpes que me di.
Me pare con ayuda de mis amigas ya que ellas tenían miedo de que me cayera de cara, pero a los pocos segundos me sentía un poco mareada, no hice caso a mi cuerpo y solo seguí caminando mientras Laly y Canela comentaron el nuevo chisme que escucharon en la noche, pero me sentí peor y todo se oscureció.
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- Peyton - escuche la voz de un ángel, creo que ya llegó mi hora de morir.
Viví bien durante estos 20 años, aunque moriré sin haber hecho nada de lo que quería. ¿Acaso fuí lujuriosa en mi anterior vida que en esta moriré siendo virgen de todos lados de mi cuerpo?
- Dios ¿Eres tu? Si me escuchas quiero pedirte un favor, quiero vengarme y hacerle un chichón a mi perro, por su culpa me duele la cabeza - aunque si iba a morir debería pedir a un hombre bien dotado que me haga ver estrellas como dice Laly.
Escuche muchas risas así que me decidí abrir los ojos. Habían 4 personas a mi alrededor riéndose, vi a la enfermera, a mis amigas y a un chico. Solo conozco a tres de ellas ¿Quién demonios es él?
- Peyton, eres una mala persona por querer vengarte de tu perro - habló canela con una sonrisa burlona.
- Es porque tu no tienes que escuchar los gritos de tu madre ¿Qué pasó?
- Solo caíste en brazos de alguien - Dijo Laly.
¿Caer? ¿Brazos? ¿Qué?
- Si querías que te cargara solo debías decirmelo, no asustarme mientras caias rendida en mis brazos - hablo en chico con un sonrisa burlona.
¿Quien rayos es él? ¿Por que no pude morir de una vez?
- Debo anotar ese método de seducción - comentó Laly
- Deja de decir estupide... - al intentar sentarme tuve otro mareo, pero el chico me agarró antes de que pueda caer al suelo.
- Peyton, dijiste que te golpeaste la cabeza ¿verdad? - preguntó la enfermera
- Si, mi perro fue responsable de que me cayera un árbol encima.
- Exagerada - expresó Canela.
- Quiero conocer a tu perro - comentó el chico.
- Entonces fue por eso que te desmayaste, te revisare mejor - habló la enfermera mientras se levantaba e iba a uno de sus cajones - Creo que deberías agradecerle a tu caballero de brillante armadura que te trajo hasta aquí envés de dejarte tirada en el pasillo.
- Si se hubiera echado a la fuga lo hubiéramos golpeado - comentó laly.
- Gracias por no dejarme tirada en el suelo - hable antes de que Laly diga algo más.
- Mi nombre es daniel, pero puedes decirme Dan y al parecer soy tu caballero de brillante armadura - habló mirándome con una sonrisa.
Dios, soy yo otra vez. Creo que me mandaste a la dimensión equivocada, estoy viendo a un ángel.
- Soy peyton, disculpa por caer en tus brazos.
- Fue un placer que cayeras en mis brazos, Peyton.
Nota: Sin comentarios de mi parte ¿Que hay de ustedes?
