26.

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Nina cerró la puerta detrás de ella con un brazo, el otro estaba doblado en una posición para entrar en la manga de la chaqueta gris. El traje que usaba Illusion era lo suficientemente cómodo, pero se sentía mucho mejor en su propia ropa diaria. Sus pasos eran lentos, no tenía presión por llegar al córtex, Barry estaba en buenas manos. Pero más que eso, pensaba en lo que sucedió temprano. Barry no había logrado sacar del camino a un guardia a tiempo, y eso significó la muerte del hombre. No era la primera persona que veía morir frente a él—probablemente esa era una mala elección de palabras—pero lo afectaba. No estaba solo, sin embargo, ella lo comprendía. Nina se atormentaba desde aquello, pensando que si hubiera podido simplemente acercarse a la puerta un segundo antes, podría haberlo salvado con sus habilidades. Y ninguno se estaría sintiendo de la manera en que lo hacían. Era inevitable sentir el peso de que solo unos milisegundos habrían sido toda la diferencia para el destino de ese hombre, pero a veces ni siquiera con poderes se puede salvar a una persona.

En su cabeza había muchas cosas distrayéndola, pero sus pies sabían de memoria por donde tenían que ir como para que no se tropezara. Su celular vibró en alguno de los bolsillos, y ella se detuvo para leer lo que era un mensaje de Iris. Si ya estaba confundida intentando entender lo que decía, sus cejas se arrugaron más al oír la voz de Barry hasta el pasillo como un eco. No alcanzó a escuchar la primera parte, pero por la manera en que terminó no se podía confundir con alegría. No pasó mucho para que él apareciera frente a ella. Nina vio que los músculos de su mejor amigo se destensaron un poco, nada más. Su celular vibró otra vez, pero solo le dio un pequeño vistazo y lo guardó. Una sola mirada entre ambos bastó. Caminaron hacia el elevador hasta estar fuera del alcance del oído de cualquiera.

"Hace mucho no te escuchaba gritar así."

"Ni siquiera noté que lo hice," él hizo una pequeña pausa. "Cisco hizo el arma." Barry le contó con resentimiento. Nina abrió su boca. "La hizo para detenerme."

"¿Para detenerte a ti?" Ese no suena como el Cisco que conocemos, quiso agregar. Sonó tan confundida, incluso sobre lo que se quedó solo en su cabeza.

"Creyó que yo iba a ser alguna clase de psicópata." Continuó Barry frunciendo el entrecejo. "Y nunca dijo una sola palabra... creí que confiaba en mí."

"¿Qué?" Todo lo que tuvo lugar en su mente fue empujado hacia un lado, dando espacio para que sospechas se formaran sobre si Cisco tendría algo preparado para ella también si fuera lo opuesto a quien es. Una parte suya no pudo evitar considerar que había una posibilidad de que él no confiara en ella como ella confiaba en él. "Nunca creí que él... no sé qué decir..."

Nina tomó un profundo respiro, su mano buscó la de Barry para darle un apretón. Él soltó un suspiro, claramente decepcionado. Ella estaba muy cerca de estarlo también.

"Sé que es un mal momento, ¿pero puedo preguntarte algo?" Nina asintió. "¿Te gusta Cisco?"

Ella lo miró totalmente incrédula, soltando su mano al segundo.

"¿Por qué en el mundo pensarías eso?" Preguntó como si la respuesta fuera tan clara como puede ser.

"Oh, vamos." Barry se cruzó de brazos, volteándose para verla de frente. "¿Qué hay del vestido y todo eso? Si recuerdo bien lo dijiste tú misma, solo usas eso cuando el tipo es especial. Admítelo."

En los ojos de la chica brilló una chispa de diversión cuando él le mencionó lo anterior.

"Bueno, ¿te gusta Felicity?" Contraatacó.

Él entrecerró sus párpados continuamente llevándolos arriba hacia el techo. Cuando volvieron con los de ella, su voz salió sin duda alguna.

"Es mi amiga."

Here I'll Stay [Barry Allen] #WATAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora