Causa y Efecto

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Estaba extrañamente ansioso, y lo encontraba algo ilógico porque simplemente era un almuerzo con Steve. Pero no dejaba de ponerse nervioso.

-Por favor amigo, ya te has probado más de 20 atuendos. Y debo decir que con todos te ves genial. Así que ya escoge uno.- Quill miraba a su amigo con diversión, le parecía un poco adorable las acciones del castaño.

-Pero...

-Relájate de todas maneras a tu novio le gustaras.

-¡¿Qué?! –dejo de buscar ropa al escuchar las palabras de su amigo, y se alteró levemente. – Steve no es mi novio.

-¿De verdad? Creí que si, por todo lo que me ha contado Loki.

-Ignora a la diva, solo anda inventando chismes porque no dejo de fastidiarlo con lo de Thor.

Peter quiso responderle a su amigo pero simplemente negó con la cabeza, en verdad que su amigo podía ser un genio, pero en cuestión de sentimientos era un poco lento.

El sonido de un celular rompió el cómodo silencio de la habitación, Peter tomo el celular de su amigo.

-Tony, tienes un mensaje.

-Léelo por favor.- contesto, mientras terminaba de vestirse, al parecer ya tenía la ropa definitiva.

-Tony cambio de planes ¿podemos vernos en mi casa? Atentamente Steve.- termino de leer el mensaje.- Vaya parece que avanzan muy rápido.

-No digas tonterías.

-Relájate es broma, pero tengo curiosidad de conocer al famoso Steve.- contesto un tanto ausente.

-¿Dijiste algo?

-Ya lo decidí, te acompañare hasta su casa.

-¿Eh? Claro que no.

-Vamos solo lo veré de vista, y después me marchare. Además tú sabes qué sino es por las buenas, será por las malas.

-Está bien.

-Excelente, entonces apresúrate que tu galán nos espera.

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

Estaba sentado en la sala viendo caricaturas pero mostraba una expresión ausente.

-¿Qué sucede campeón?

-Tío Bucky tengo un mal presentimiento.

James miraba al niño, sabía que Peter no decía las cosas sin ninguna razón y por algún motivo le preocupo que la "no cita" como le llamaba Steve a la comida con Tony, sufriera algún problema.

-Tranquilo, ya verás que todo estará bien.- deseo de corazón que nada malo pasara.

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

Después de casi una hora y media discutiendo por el atuendo y otras cosas Tony junto a Peter habían llegado a la casa de Steve. El castaño salió del coche bajo la atenta mirada de su amigo, toco la puerta de la casa, pasaron un par de minutos para que esta se abriera, pero todo rastro de alegría y felicidad se borró.

-¿Hola?

Frente a él estaba una linda mujer rubia, quien curiosamente solo llevaba puesto una enorme playera, que sino mal recordaba le pertenecía a Steve.

-¿Se encuentra Steve?

-¿Quién lo busca?

-Me llamo Tony Stark.

-Oh. Mucho gusto soy la novia de Steve me llamo Sharon.- la chica sonrió con amabilidad.

Las palabras de la chica le provocaron cierto malestar que pudo disimular.

-Eh, parece que vine en mal momento.

-De hecho Steve se metió a la ducha, me dijo que tenía un compromiso. Si quieres puedes esperarlo.

-No hace falta.- sonrió de la manera más creíble posible. – De hecho venía a avisarle que el compromiso se canceló.

-Entiendo.

-Es mejor que me vaya. Un placer conocerla.

-Igualmente.

Sharon cerró la puerta y Tony salió caminando rápidamente del lugar, subiéndose al coche donde su amigo lo esperaba.

-¿Qué paso?

-Por favor sácame de aquí.- trataba de reprimir las inmensas ganas de llorar, y no entendía el porqué.

Quill no dudo en obedecer a la petición del millonario, quería preguntarle pero veía que su amigo se encontraba muy mal. Era mejor hacer las preguntas después.

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

Después de cerrar la puerta Sharon suspiro de alivio, camino hasta cierta habitación donde se veía a un Steve profundamente dormido. Se había enterado que el rubio estaba empezando a interesarse por alguien, cuál era su sorpresa al darse cuenta que se trataba de un hombre. Pero no permitiría tal cosa. Así que fue a su casa, con la excusa de disculparse nuevamente por lo sucedido, y de alguna manera logro poner somníferos en la bebida del soldado.

Solo fue cuestión de minutos para que estos hicieran efectos, se puso una de sus camisas y solo tuvo que fingir. Debía eliminar a la competencia, esta vez ella se quedaría con Steve.

Se dirigió al baño para ponerse su ropa nuevamente, y dirigirse a la cocina para prepararle algo de comer al rubio para cuando despertara. Disfrutaría ese día estando junto a él.

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

Clint miraba con cautela al trio de mujeres que estaban frente a él. Trataba de mantenerse sereno pero la mirada y la fuerte tensión que había en la habitación era demasiado asfixiante incluso para él.

-Parece que alguien no aprecia su vida.- Natasha estaba muy molesta.

-Creo que deberíamos enseñarle una lección.- secundo Pepper ante el comentario de la pelirroja.

-Una lección que jamás olvidara.- dijo Gamora.

Natasha había recibido una llamada de Barnes diciéndolo que podrían haber complicaciones en la "cita no oficial" por lo que la rusa envió a su amigo Clint a que los vigilara (el rubio no podía negarse, su vida estaba en juego) al cabo de un par de horas recibió una llamada de su amigo con malas noticias.

Clint simplemente miraba con algo de temor al trio que tenía enfrente, sabía que cada una era peligrosa pero juntas eran mortales. Sentía cierta lastima por Carter, pero debía admitir que eso le pasaba por interferir en la relación de aquellos dos. Por alguna extraña razón se imaginó a la rubia siendo perseguida por una horda de mujeres furiosas, tratando de matarla lo curioso de eso, es que aquellas mujeres tenían playeras de Steve y Tony besándose. En verdad que tenía una imaginación muy activa, pero no podía negar que pagaría lo que fuera por ver algo así.

Era hora de Sharon Carter se preparara para las consecuencias.


Un Novio para PapáDonde viven las historias. Descúbrelo ahora