Un Novio para Papá

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Steve llevaba días de mal humor, todos sus amigos lo habían notado, pero ninguno se atrevía a preguntar, la mirada que el rubio les daba eran demasiado escalofriantes.

-¿Bucky sabes que le pasa a Steve? – Sam estaba en la cafetería con Barnes mientras esperaban a los demás.

-Ni idea, hace rato intente preguntarle pero solo me gruño.- respondio mientras comía un sándwich.

En ese momento llegaron Natasha y Clint, quienes se sentaron para tratar de averiguar lo que había sucedido.

-Algo pasa.- Hablo Natasha. – Pepper me ha dicho que Tony le cuenta que su relación con Steve va muy bien.

-¿Entonces porque ha estado de mal humor?

James nunca había sido bueno leyendo a la gente, pero debía admitir que las expresiones de Clint le hacían dudar.

-¿Algo que quieras decir Clint? – cuestiono el castaño, logrando que los demás miraran con duda al rubio.

-No, n-ada q-ue decir.- El arquero se maldijo por tartamudear, sabiendo que su amiga lo miraba seriamente.

-Clint Barton es mejor que me digas, sabes lo que te pasara si me mientes.

Este maldijo a Barnes por prestarle atención. Es que acaso alguien de arriba lo odiaba, por lo que de manera discreta, empezó a prepararse, porque estaba seguro que su amiga lo torturaría.

-Quizás la razón por la que Steve este enojado, es porque cada vez que intenta subir de nivel con Stark, siempre llego con el pequeño Peter.- terminado de explicar salió huyendo.

Sam miro la rápida huida de Barton despues de escuchar su explicación, hasta cierto punto se le hizo infantil el motivo, quiso decirle eso a sus compañeros, pero Natasha y James salieron corriendo con la clara intención de castigarlo.

-Niños... - suspiro al ver las actitudes de todos, decidió comer.

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

Tony estaba en su oficina leyendo unos informes, cuando escucho la puerta de su oficina, levanto la mirada, y se sorprendió de ver a la que se suponía que era la novia de Steve.

-......

-Lamento las molestias.

-Se te ofrece algo.- respondió con cortesía, y un poco de confusión al verla frente a él.

-Aquella vez, no me presente adecuadamente. Me llamo Sharon Carter, mi prima fue esposa de Steve.

-.....

-Vine aquí por 2 razones, la primera es disculparme por aquella mentira. La segunda es que te alejes de Steve.

Tony la miraba silenciosamente, invitándola a que continuara.

-Yo estuve con el, cuándo Peggy falleció, cuide de Peter y de él. Siempre eh procurado el bienestar de ambos. Y no hay nadie en el mundo que lo ame más que yo.- trato de contener sus lágrimas, al principio intento decir otra mentira, pero por primera vez, quiso ser honesta respecto a sus sentimientos. – Quien ha estado en los momentos más duros junto a ellos, eh sido yo. Por eso...

-Eres alguien asombrosa.- contesto, sorprendiendo a la mujer. – Estuviste para ellos, en los momentos más difíciles, y sé que Steve debe estar demasiado agradecido.- sonrió con nostalgia recordando a sus amigos quienes estuvieron para él, en aquellos momentos donde solo quería hundirse en el dolor y sufrimiento. – Pero no me alejare de Steve.

-¿Por qué?

-Porque al igual que tú lo amo.

-Pero...

-Si un día llegara y me dijera que ya no siente nada por mí, sino que siente algo por otra persona. Primero lo mataría por hacerme esto.- comento con cierto tono de burla. – Pero dejaría que el fuera feliz con quien escoja. Sé que sonara tonto, en vez de intentar luchar por su amor. Pero precisamente porque lo amo. Lo dejaría ser feliz con quien quiera.

-Cómo puedes ser tan amable.

-¿Amable? No me considero amable, es todo lo contrario soy muy egoísta con lo que quiero.

Negó con la cabeza, y por primera vez descubrió una de las tantas cualidades por la que Steve se sintió atraído ante el castaño.

-Lamento todas las molestias que pude haberle causado Sr. Stark.- se dio la vuelta para marcharse.

-Oye...

-Fue un placer hablar con usted, espero que cuide bien de Steve y Peter.- sin decir más, salió del lugar.

Tony no dijo nada más, solo se quedó en silencio cuando la vio salir.

-Vaya me sorprende que te hayas comportado de una forma tan madura.- entro después de ver que Sharon había salido de la oficina.

-¿Cuánto tiempo has estado ahí? – lo miro con el ceño fruncido.

-Desde que la chica llego, pero debo decir que estoy feliz de saber que ya tienes a alguien en tu vida.- contesto con tranquilidad, mientras le sonreía enormemente.

-Si estás aquí, es porque vienes a llevarte a la diva.

-No...

-¿Enserio?

-Veras eh venido para que firmes el contrato que nos hará socios.- entregándole un folder con documentos.

-mmm... -empieza a leerlo antes de firmar.

-También quería que me ayudaras con lo del compromiso.- contesto, mientras un pequeño sonrojo aparecía en sus mejillas.

-¿Eh? – salió de su trance al escuchar la palabra compromiso, dirigiendo su mirada a su amigo. – ¿Estás diciendo que lo harás?

-¿Me ayudaras sí o no?

-No creí que vería el día en el que estarías lo suficientemente enamorado para ser algo así, menos con tu fama de mujeriego Thor.- comento con burla.

-Pues piensa lo que quieras, pero estoy seguro que quiero pasar el resto de mi vida con Loki.

-Debo decir que no veo a alguien mejor que tú para eso, y menos cuando eh visto los cambios que has logrado, desde que tienen su extraña relación.

-No es extraña.

-Lo que digas.- firmando el contrato. – Pero con gusto acepto que seamos socios, y ayudarte para realizar todos los preparativos.

-Te debo una Tony.- sonrió alegremente.

-Sí, sí, sí. Mejor hablemos a Pepper, estará encantada de ayudar.

-Estos días serán geniales, amigo.

-Siento que me arrepentiré.- murmuro el castaño.

-¿Qué dijiste?

-Nada.