Misiones, Guerras, Paraísos, Amores, Alegrias, Tristezas, Encantos, Magia, todo en una noche, o quizás en un temporal...
La joven Rosalinda estará en más de mil lugares al mismo tiempo, o en tan solo uno, todo es un misterio, nada es casualidad, la...
No estoy segura de si hacer una reverencia o no... Mmmm mejor no.
Me acerco lentamente, con sigilo, que no sirvió de nada, ya que todos los unicornios blancos me vieron, y la Reina también. (sí, olvidé decir que era una reina) Pero no me dijeron nada malo, por suerte.
- Acércate Rosalinda.-dice la reina, asiento con la cabeza, y me acerco.
- He enviado a Unicornios Blancos a que fueran a buscarte para traerte hasta aquí, porque necesito que me ayudes con una misión: en unos días se desatará la guerra de dos reinados, el nuestro, y el reinado galleta.-Me dice la Reina, con un aire de temor.
- ¿El reinado galleta?- pregunto intrigada.
- Sí, son los más peligrosos, sus armas son las más tecnológicas y las mejores, por eso, Rosalinda, te llamo a ti, por tu gran poder, tú y Unicornio Azul, junto con mis soldados reales- señala a los Unicornios Blancos- serán invencibles, y así triunfaremos la guerra y el peligro que traen las galletas a nuestro reino, se irá para siempre, de una vez por todas.
-¿Unicornio Azul?- Pregunté.
- Por supuesto- Responde la Reina completamente convencida de lo que estaba diciendo.
Se abre una puerta, al costado del trono, y de ahí sale... ¡Unicornio Azul!
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Era hermoso, mucho mas que los unicornios blancos.
Pero... sigo sin entender... ¿lucharemos con galletas? es algo que siempre jugaba con mi hermanita Melissa, pero... ¡es imposible que suceda en la realidad! o no... mejor me concentro.
- Unicornio Azul es mi mejor soldado, por lo tanto, tu acompañante.- replica la Reina.
- No quiero pelear con galletas- le digo a la reina, la cual se enfureció, y comenzó a asustarme.
- El reinado está en tus manos, Rosalinda, debes pelear con el ejercito de galletas azules.-me desconcentro. ¿galletas azules? cuesta imaginármelo, pero...si es por proteger este hermoso lugar...creo que aceptaré.
- Sí, lo haré- interrumpo a la Reina
- Muy bien- dice ella con un aire orgulloso, y manda a un unicornio blanco, (el cual me cayó muy bien) a guiarme a mi habitación. ¡dormiré en un castillo! ¡parece todo un sueño! estoy que estallo de emoción y a la vez nerviosa por la guerra, espero no tener que matar a ninguna persona....sólo galletas....ya no sé ni lo que digo, mejor me concentro y sigo a unicornio blanco, que por un segundo, casi lo pierdo de vista.
-Mi nombre es Sam- Rompe el silencio.
- Yo soy Rosalinda.
- Lo sé.
-Oh, claro...- ¡cómo pude ser tan tonta! La reina dijo mi nombre frente a todos, cómo no lo va a saber.
Luego de unos minutos caminando por los fascinantes pasillos del inmenso castillo, llegamos a la habitación (debo mencionar que Sam fue muy atento conmigo, y que los caramelos que <<HABÍA>> en la mesa de luz, eran muy deliciosos) qué hermosa habitación, tenia una cama de dos plazas, es muy grande, las paredes pintadas de un rosa fantástico, y todo está muy prolijamente acomodado. Estos Unicornios saben lo que me gusta, ja ja.
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Ahora a estrenar la cama nueva, (obviamente después de curiosear todo, je je)
Ya curioseé, y me dieron de cenar muy rico, ahora sí, a dormir, en dos días será la guerra contra las tales "galletas azules" espero que nos vaya bien...y para eso... debo dormir ya, ja ja.
