El segundo período de clases termina y debo apresurarme a despedirme de Wolfgang para no volver a llegar a mi próxima clase. Corro lo más rápido posible hacia el salón de bioestadística. Hace un momento estaba riendo como loca junto con Wolf, pero hay una gran diferencia entre la Helga de hace 20 minutos con la de ahora. Estoy totalmente muerta de aburrimiento, no puedo creer que el Sr. Parrish sea tan aburrido, a penas llevamos 15 minutos de clase, sin embargo, la mitad de mis compañeros ya están babeando sus escritorios y yo estoy a punto de unirme.
El profesor habla en un tono tan bajo y calmado que te hace querer traer una manta y dormir escuchando un cuento contado por él, en la pizarra va escribiendo y resolviendo ejercicios que voy escribiéndolos por inercia, pero mis ojos se van cerrando, las voces se pierden en el fondo y en un instante estoy dormida.De repente una voz risueña se adentra a mi inconsciente y estoy parada en un lugar que me cuesta reconocer por unos instantes hasta que esta voz habla y comienza a adquirir forma.
-¡Que día tan loco!-Dice detrás de mi, en cuanto regreso a verlo no puedo creerlo, el terror de ese instante me embarga al reconocer al dueño de esa voz. Es Arnold, pero no el petulante de 18 años que vive en mi edificio sino el tierno y dulce niño de 9 años que conocí hace tanto.
-Ah, dijimos muchas locuras allí atrás.... -Digo titubeante. Un momento, espera un momento, esa voz... ¿es mía?. Miro mis manos y las reconozco más pequeñas de lo que recordaba, a mi alrededor esta Hillwood en destrozos hace 9 años.
-Si- dice el frotándose brazo. La escena se va desarrollando en automático, la vivo en primera persona, pero no soy dueña de mis acciones, soy un simple títere.
-am... em... Arnold... sobre todo lo que dije...Mira. -Digo alzando las manos.- Yo... estábamos nerviosos.- Lo regreso a ver pero él evita mi mirada -Y...
-¡Si! con todas esas emociones...- Se frota el cuello como siempre hace cuando está nervioso- Nos dejamos...
-¡Nos dejamos llevar! -Digo completando la oración viendo una salida rápida para cubrir mi desliz de hace un momento, sin embargo, al decirlo se me oprime el corazón.-
Él levanta su cabeza por fin y me mira.- No hablabas enserio, ¿verdad?, en realidad no me...amas, ¿verdad?-Al escucharlo yo me arrepiento de haber tratado de cubrir mi desliz, ¡él debe saberlo!
-¡Sí!- Trato de explicarme, pero él me corta enseguida.
-Solo te dejaste llevar por el momento ¿no?- Y al verlo sonreír con esperanza de que yo me retractara me doy cuenta de que esa tranquilidad y frescura característica de él se perdería si siente su habitual mundo de cabeza, después de todo se suponía que yo lo odiaba, así que me coloco la máscara de nuevo y continuó con esta pantomima.
-¡Sí!-digo volviendo a mi antiguo yo.
-En realidad me odias, ¿cierto?- Dice con más naturalidad, por lo que aprovecho eso para que de esta forma regrese la brabucona del barrio Helga G. Pataki, el acto continúa y continuará por algunos años.
-¡Claro que te odio torpe cabeza de balón!- grito como suelo hacerlo- Y nunca lo olvides ¡nunca!-pero esta vez a diferencia de las otras veces el sonríe y me alegro de haber tomado esta decisión.
-Genial Helga.- al terminar me voy aliviada de tener de nuevo mi secreto a salvo, aun puedo tenerlo a mi lado como siempre, pero si es así entonces ¿Por qué me siento tan arrepentida?
El espacio a mí alrededor se desvanece cuando una voz me despierta de mi pequeña siesta
-¡Señorita Pataki le pido que mientras esté en mi clase no tome una siesta tan descaradamente! – Me grita el Sr. Parrish al que veo con ceño fruncido y la vena en la sien a punto de estallar. Me incorporo rápidamente y apenada le respondo.

ESTÁS LEYENDO
Reencontrandome con mi viejo amor
FanfictionSoy Helga G.Pataki ex-bravucona de P.S 118, aunque ya son muchos años desde aquello. Hoy soy una simple chica que vuelve a su ciudad natal buscando lo que un día fue. Sí lo sé, suena muy melodramático, pero es una forma de explicarlo. Pasé 4 años le...