♣Cap 4♣

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Todo el camino Carolina durmió, ya eran las 11:20 pm yo iba en el asiento de adelante con la mamá de caro y ella iba atrás ocupando todo el sillón en posición fetal, en ocasiones miraba atrás, observaba su hermoso rostro, detallando cada parte de su cara, esos ojos marrón que me volvían loco, las cejas arqueadas y sus carnosos y rojos labios que cada que los besaba algo dentro de mi se estremecía, ese cuerpo que en las noches me imaginaba y me hacia llegar a fantasías increíbles, por un momento mi mente se fue sólo pensando en ella, éramos almas gemelas, no había nada que ella no conociera de mi, ni yo nada que no supiera de ella, una relación de casi seis años, lo digo porque faltan unos meses para cumplirlos, regresé a mi y susurré

--no crees que es tiempo de detenernos y alojarnos en un hotel?--Levante mis cejas en señal de "sólo es una idea"

Ella respondió con su voz algo aguda y ronca

--tienes razón! --sonrió mientras se estacionaba en la orilla, se quedó quieta mirando al frente y susurro tan bajo que apenas entendí que decía--me encantas Sam! Me encantas!

--Que?--dije de inmediato-- soy tu yerno, christine!

-- Y que?-- dijo despreocupada-- ella no se va a enterar-- miro a Carolina sutilmente y se acerco a mi

--Alejese! --dije con la voz entre cortada y baja-- usted no puede hacer esto! No le daría vergüenza ver todas las mañanas a Carolina sabiendo que se metió con su novio?

***

*CARO*

Durante todo el trayecto del viaje, tenía muchísimo sueño. Tengo que confesar que sospecho que tengo anemia *rie* estaba disfrutando de un plácido sueño cuando siento las voces de mamá y sam... Hablaban sobre algo que me afectaría, pero la verdad no entendí que era ese algo, en fin, me levanté y dejaron de hablar de inmediato

--que pasa?--dije algo confundida y con la cara roja de un lado

--Nada-- aseguro mamá, levantando un poco el vidrio de la ventana-- Vamos a hospedarnos en este hotel

Bajamos del auto y entramos al hermoso y lujoso hotel, las habitaciones eran gigantes, creo que ahí podía estar yo multiplicada por 20, la cama era de agua y ni hablar del baño, era cómodo y acogedor

--esta hermoso esto!-- exclamé dejando mi valija sobre un almohadón--

¡Solo Yo!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora