Capitulo 2. ¿Alguien entiende lo que sucede?

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Ashley acababa de dejar el aeropuerto tomando un taxi, el cual la dejaría en casa de Jill, ya que había preferido que nadie la fuera a buscar.

Ashley estaba ansiosa, lucia nerviosa ya que a pesar de conocer el lugar, hacía dos años que no venia. Esta pregunto _ ¿Falta mucho?

Taxista _ No, es solo la carretera y llegamos, serán solo unos quince minutos.

Ashley _ ¡genial! Estoy nerviosa.

Taxista _ ¿Vas a algún lugar?

Ashley _ Si, tuve que mudarme aquí, por suerte se con quien viviré, les conozco, son amigas, pero me costara adaptarme. Siempre eh venido en los años anteriores, pero hace dos que no visitaba este lugar.

Taxista _ Entiendo, en mi vida me eh mudado unas veinticinco veces al menos.

Ashley _ Esta es la primera vez que voy lejos de casa.

Taxista _ Lo más difícil es comenzar las clases, en un lugar donde tienes que hacer nuevos amigos.

Ashley _ Lo sé, porque no soy muy amigable, soy un poco tímida.

Taxista _ Si, yo lo era a tu edad, pero luego de un tiempo supongo te acostumbras. Yo lo hice.

Ashley _ Espero poder hacerlo también.

Taxista _ ¡Oh! Lo harás.

De pronto Ashley miro hacia el parabrisas y abriendo sus ojos, con cara de asombro, exclamo _ ¡Cuidado!

Taxista _ ¡Diablos!

El taxista piso el pedal del freno rápidamente, quedando atravesado en la gran carretera vacía, tras ver que dos personas se habían cruzado saliendo de la nada, frente al vehículo, a una increíble velocidad.

Ashley _ ¡Dios!

Taxista _ ¡Malditos animales!

La joven lucia asustada, esta iba al lado del mismo. _ No parecían animales.

Taxista _ Claro que lo eran. ¿Sino que más? Eran demasiado veloces.

Ashley _ Eran dos personas, estoy casi segura. Una de ellos parecía una mujer.

Taxista _ ¿Qué? ¿Una mujer?

Ashley _ Si, la vi claramente, creo...

Taxista _ Pero eso es imposible. ¿De dónde sacaría una persona esa velocidad?

Ashley _ No lo sé, tienes razón.

Taxista _ Quizás sean los nervios, debes tranquilizarte, a veces te hacen ver cosas que no hay.

La joven respiro profundo y agrego. _ Es verdad, estoy muy nerviosa.

Minutos más tarde Ashley llegaba a casa, tenía un par de grandes bolsos en su mano. Esta se detuvo frente a la puerta, y toco el timbre.

Rápidamente Emma y Alice, le recibieron con una sonrisa. Esta otra lucia nerviosa, pero alegre.

Emma _ ¡Ashley! Al fin llegas.

Ashley _ Digamos que si, aquí estoy.

Alice _ ¿Cómo has estado? Has cambiado, esta más alta.

Ashley _ Si, y vieja. Es increíble, tú sigues igual, es como si nunca envejecieras.

Al pronunciar esto, Emma clavo fijamente por unos segundos su mirada en Alice, quien hizo lo mismo.

Esta ultima le miro, y sonriendo contesto. _ Ah, ya sabes, si te cuidas te conservas.

Sueños de un vampiro...Where stories live. Discover now