-El viento revolvía salvajemente mi cabello haciendolo pegarse a mi brillo labial de vez en cuando, Jiyong no hablaba, se mantenia concentrado en el camino y parecía no molestarle nuestro incómodo silencio, pero a mí me estaba volviendo loca.-
-"¿a donde vamos?".-dije gritando un poco para hacerme oír.-
-"Tú con esa ropa...a ningúna parte, me vas a esperar en el coche".-me miro de reojo antes de acelerar y seguir ignorandome, ¡no puedo creer que sea tan imbecil!. me recargue en mi puerta y saqué el brazo del coche sintiendo como el aire se colaba entre mis dedos enfriandome la piel. La vista nocturna de Seúl es increible ¿como es que nunca le había puesto más atención?, de pronto detuvo el coche cerca de un estruendoso lugar, la gente atiborrandoze en la entrada, paparazzis por todos lados, luces de millones de tamaños y colores.-
-"¿pero que estas haciendo?"-dije entre dientes agachandome en el asiento, el simplemente subio el descapotable y los vidrios.-
-"voy a reunirme con unas personas y tu me vas a esperar aquí, a menos que quieras bajarte en esta ropa, enfrente de esta gente".-dijo señalando el aglomerado de personas fuera de aquel lúgar y el estomago se me torció.-
-"¿y que se supone que voy a hacer encerrada aqui?".-estaba empezando a molestarme realmente su forma de solucionar lo de el celular, me miro y sonrio burlonamente.-
-"puedes leer el instructivo de el carro, y luego me lo cuentas por que como es nuevo la verdad no se como funciona todo. te veo en un rato...diviertete".-dijo y sin más cerro la puerta, puso la alarma al carro y se fue. Estaba frita, no había forma de salir y no traia mi telefono conmigo estaba junto al de Jiyong, en mi bolsa, en el V.I.P.-
-"¡¡AAARRRGH!!".-grité y patalee frustrada.-"¡kwon jiyong, te odio y te acabo de conocer!".-estaba furiosa, más que eso ¿quién se cree que es para dejarme aquí?. Ese insoportable y malcriado hijo de la fama, lo único bueno que saldrá de todo esto es el hecho de saber que despúes de las fotos de mañana no nos volveremos a ver. El tiempo pasaba infinitamente lento, la gente iba y venia, las luces cambiaban de colores hasta que se repetian una y otra vez; comenzó a bajar la temperatura, la piel se me puso de gallina pero por más que me frotara los brazos y las piernas no conseguia el calor suficiente. No hay nada con lo que mantenerme entretenida y el cansancio comienza a apoderarse de mí, siento como mis parpados luchan por mantenerse abiertos ¿cuanto tiempo ha pasado?, ¿dos horas?, ¿tres?, al final no aguanto lo suficiente y caigo en ese estado de levedad entre la consiencia y el sueño. Es ahí cuando sus manos aparecen en mi mente,unas manos fuertes, nudosas y un punzante dolor en mi mejilla, debajo de el ojo; me punzan los labios, risas, mis padres, una boda, sangre en los talones, mi cara contra el suelo, y cuando levanto la vista él esta siempre viendome...Retomo un poco la consiencia y estoy lista para despertarme, pero mis ojos no se abren y la pesadilla continúa, desesperada se que la única manera de despertar es pelliscandome pero por más que lo intento no siento el dolor suficiente como para abrir los ojos y de pronto un terremoto me pasa por encima. Cuando abro los ojos Jiyong me esta tomando por los hombros escaneandome con su mirada.-
-"¿estas bien?"-yo tengo la boca seca, no puedo hablar pero intento hacerme la fuerte y asiento un poco, jiyong dirige su mirada a mi mano que esta practicamente encajada en mi muslo derecho, me he hecho daño y esta sangrando un poco.-
-"no es nada, estare bien".-digo con la voz algo rasposa, pero el no dice nada solo enciende el coche y acelera. son las tres de la mañana. Porfin me he tranqulizado, aunque mi cabello esta pegado a mi nuca por el sudor y me punza la pierna, de pronto me doy cuenta que no se para donde vamos pero antes de poderle preguntar el se detiene en unos departamentos que lucen bastante caros, apaga el carro y baja.-
-"¿te quieres quedar otra vez aqui?".-dijo serio.-
-"¿bajarme es una opción?".-el hizo una mueca.-
