El amor es algo que me gusta sentir, es una sensación agradable.
Enamorarme de ti, estar enamorado de ti; es algo precioso.
Mi corazón se acelera, mi vista se nubla, mis manos sudan y mi cuerpo tiembla... Todo eso por tu presencia.
Cambiaste mi vida, ese día que te vi pasar frente a mí durante la noche.
Ahora no recuerdo qué hacía a esas horas por la calle.
Ah, sí... Olvidar.
Ese día huía de mi corazón roto.
Un corazón roto por una chica. Un corazón que arreglaste con una alegre mirada.
Me dan ganas de abrazarte, de nunca te soltarte.
Fuiste mi amigo sin dudarlo, me apoyaste en mi estúpidos romances que me lastimaban, me diste consejos al sentirme mal, me comprendiste cuando nadie lo hacía, me hiciste reír, me hiciste quedarme despierto hasta las 4 de la madrugada para hablarte, me acompañaste cuando ya todos se habían ido, lograste hacerme llorar de alegría, conseguiste que me preocupase por ti cuando no te veía un día... Obtuviste mi frágil corazón con facilidad.
No pretendía enamorarme de ti.
No pretendías enamorarte de mí.
Y aquí estamos.
