¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ACTO UNO💫 CAPÍTULONUEVE NEVILLE Y EL PLAN
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Neville no supo en qué momento empezó a ver con otros ojos a Alhena, sólo supo que un día despertó y que ella se veía más bonita de lo normal; que estar cerca de ella lo ponía más nervioso; y que lo único que él quería hacer era abrazarla y besarla (aunque no lo supiera hacer).
Sin embargo, no hacía nada al respecto. Todavía podía sobrevivir ocultando aquellas emociones. Y no fue hasta que Dean le hizo aquella pregunta que se percató que algo iba mal...
«¿Soy muy evidente?» Le había dicho, y Dean negó con la cabeza. No obstante, él se esmeró aún más en ocultar cualquier sospecha. Por lo mismo, ya no sostenía la mano de Alhena cuando se estaba enfadando porque sólo le haría pensar lo suave que era su piel. También evitaba estar demasiado cerca de ella porque los ojos son un libro abierto para quien los sabe leer, y ella lo conocía mejor que nadie.
Y no fue hasta las vacaciones de Navidad, que Neville decidió hablar con su tío Algie sobre lo que le estaba pasando. Y para su sorpresa tío Algie dijo:
—Me recuerdas a tu padre...
Neville sonrió y por primera vez se sintió orgulloso de sí mismo. ¡Le habían dicho que era como su padre!
—Tu padre y Alice no fueron mejores amigos como lo son tú y Alhena —inició—, pero recuerdo un día durante las vacaciones de invierno, él me dijo que le gustaba una bella chica...
Neville mantuvo su sonrisa porque era la primera vez que alguien le hablaba de sus padres con tanto anhelo de por medio.
—Yo solo reí cuando me lo dijo. Pero tu abuelo, tu abuelo le dijo: «Si tanto te gusta esa chica, conquístala». Y al parecer eso funcionó porque cuando estaban en... no recuerdo qué año... Frank apareció con una linda muchacha aquí. La presentó como su novia y todos estábamos muy felices por él.
El tío Algie sonreía mientras observaba la fotografía en donde aparecían Frank y Alice Longbottom casándose. De pronto, lágrimas aparecieron en sus ojos.