-¿Debería tratar?Tal vez estaba siendo tonto al intentar bajar sus nervios en medio de su caminar, el día ya casi agababa y él se dirigía a pie a su hogar. Sus pies casi trotaban bajo el velo seminocturno de las horas. En todo el transcurso se preguntó así mismo en voz alta si de verdad tendría el semejante valor para actuar, en esto dejaba un poco confundidos a las personas que cruzaban su camino.
Su cabeza ejercía ideas o suposiones del mañana, a pesar de que faltaban horas para que el martes se marcara en el calendario. Desde primeras horas su mente nadó en una oleada de pensamientos que venían en acumulación desde semanas atrás. Baekhyun no podía evitar sentirse con la piel de gallina desde que abrió sus ojos por la mañana, un poco medio dormido había encontrado en su teléfono un nuevo mensaje y, él aseguraba que tal mensajillo cambiaría sus rumbos.
Pasó todo el día en su trabajo con la idea golpeando su mente, sin embargo se mantuvó en orden conociendo la importancia en su labor, no sería bueno andar con la cabeza en otro sitio en medio del trabajo. Cada vez que veía el reloj marcar un nuevo número, su cuerpo se llenaba de emoción. Baekhyun deseaba que ese día volara, se esfumara, se perdiera en el viento frente a sus ojos, pues, necesita llegar pronto al siguiente.
Cuando faltaba pocas cuadras para llegar, el sonido de las calles lo sacó de su ensimismamiento, levantó su vista del camino y usó su mano como visera, para así, poder apreciar las luces llamativas de la ciudad, los edificios eran adornabados con estas, la mayoría en cotidiana publicidad. Baekhyun sonrió mientras bajaba su vista prosiguiendo con su andar, la vida en la ciudad se basaba en estos detalles, donde todo se volvía demasiado degastante. Además, había mucho frío para quedarse ahí, solo viendo. El clima era violento esa temporada, los copos de nieve comenzaron asomarse cayendo y repartiéndose alrededor de toda su extensión, dejando el enigma de conocer el paradero final de estos pequeños cristales. En aquella época era casi imposible salir a las calles sin estar bien abrigado, el frío se esparcía por todo las calles provocando el titirar en cualquiera.
Baekhyun no fue distinto a los demás mientras caminaba, la nieve caía sobre su oscuro cabello y cogelaba su pequeña nariz, sin embargo hizo caso omiso al detalle, mirando como cruzaban de allí a allá las transeúntes. Podía contar con sus dedos los años que había comenzado a vivir en la ciudad, al principio había sido difícil acostumbrarse a la vida urbana, ya que antes su forma de vivir era un tanto diferente. Residía en un pequeño pueblo apartado de todo, donde no había edificios, no había tantos autos, en general había pocas cosas allí. La palabra que podía utilizar Baekhyun para describir su lugar de procedencia sería: tranquilo.
O tal vez se atrevería a utilizar más sinónimos, aquel lugar fue donde aprendió a vivir, a ser él, junto a sus padres Baekhyun creció feliz. En el camino de su pequeño pueblito había creado milllas de gloriosos recuerdos. Seguro, estaba seguro que jamás cambiaría su humilde pasado.
Sin embargo, no podía quejarse de su nueva forma de vivir, desde que entró en la universidad gracias a sus excelentes calificaciones, no tardó nada en graduarse como un prestigioso abogado, consiguió empleo rápido, y se integró mejor de lo que esperaba a la nueva forma de vida, con años de esfuerzo y arduo trabajo, llegó a estar en lo cima de su carrera. El dinero dejó de faltar y sus cuentas bancarias cada día se volvían más exquisitas, se sentía orgulloso y por supuesto que sus progenitores también, y más cuando su hijo los llenó de lujos, ahora vivían viajando alrededor del mundo enviado cada semana una foto y postal de su nuevo destino. Su pecho se inchaba de felicidad, al saber que lo había hecho bien, siempre había sido su meta darle lo que siempre quisieran a ellos, su familia era feliz.
Por su parte, no era tan igual a sus padres, a pesar de su buen puesto, mantenía una vida tranquila sin llamar la atención, con un pequeño apartamento que llamaba "hogar" le era suficiente. Tenía a sus amistades fieles, que término creando en los últimos años, especialmente en su trabajo. Incluso, muchas veces tomaba el bus, él poseía un vehículo ¿cómo no tenerlo? Si era una de sus primeras metas? El hecho era que deseaba sentirse como antes, se subía al bus viendo a las personas a sus lados, recordando el camino que había pasado, volviendo a pasar por el sentimiento de su pasado. Baekhyun se sentía como otro del millón y a veces era mejor ser un otro que el exitoso hombre en su vida, el que ya había llegado y no tenía que más hacer. O ese pensó hasta cierto día.
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Déjame conquistarte [Baekhun/Sebaek]
RandomDespués de la muerte de su ser más querido -su esposa-, Sehun se siente completamente abatido, entristeciéndose. Su mejor amigo Baekhyun ha guardado sus sentimientos por él por demasiado tiempo, y piensa, que es momento de darlos a notar, así sea po...