Entender

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Si alguien le preguntara si fue difícil para él irse diría:

"Claro que lo fue. Pero es algo que debía hacer."

No le dijo a nadie a donde iría porque ni siquiera él mismo sabía adonde iba. Cuando entró en el aeropuerto con maletas en manos y un pequeño bolso en su espalda, apretó el asa del bolso y no le importó mirar atrás, él sólo compró el primer vuelo que saldría inmediatamente y simplemente se fue. Por lo menos se mantenía comunicado con su ex Kris, pero ello era mayormente por el trabajo que compartían, incluso si su adolorido corazón gritaba a todo pulmor por saber cómo se encontraba su amigo Sehun tuvo que contenerce para no preguntar por él. Él debía permanacer fuerte, pues, por algo se había marchado, necesitaba tiempo.

Hundido en su largo viaje que no había sido planeado no se dio cuenta lo rápido que corrió el tiempo y cuando se fijó que ya era hora de retornar a su hogar, su corazón se encogió del temor, así que desesperado llamó a su jefe para solicitarle un mes más de vacaciones. Y cómo este podía negárselo, si Byun Baekhyun era su mejor abogado, él nunca antes solicitó vacaciones, nunca exigió nada en en trabajo por ello, su jefe se vio obligado a dárselas.

Y así, fue un mes más sin él, sin mirarle, sin escucharle, si hablarle, si nada de él.

Baekhyun pensaba que tal vez de esa manera podía superarlo, tal vez entendería que no era amado y, nunca sería amado por su amor platónico. A veces las cosas eran simplemente así, no existía algo que él pudiese hacer, los sentimientos de Sehun no podían ser obligados a amar.

Su teléfono comenzó a sonar como todo los días, siempre sonaba exactamente a la misma hora, Baekhyun yacía tumbado boca arriba en la cama del hotel, era una habitación espaciosa para una sola persona, abundante luz natural entraba atra vez de los vidriales de la amplía ventana, la vista al mar en ese punto era asombrosa, un barco de carga pasaba poco a poco y desde ahí podía ser visto con claridad. A Baekhyun no le importaba ver por la ventana, tampoco le importaba contestar el teléfono, sus ojos mirando hacia el techo, sus manos extendidas a los dados y sus labios entre abiertos, de esa forma se encontraba él. De vez en cuando sus parpados se cerraban en un movimiento mecánico y volvían a abrirse nuevamente,ahí mismo como estaba con su cuerpo laxo sobre la cama, su mente se encontraba en otro lugar.

¿Qué debía hacer?

De algún modo el asunto le causaba gracia, porque era irónico, siempre que llegaba a pensar; él es, me casaré con él, él me ama y yo lo amo" alguna mierda ocurría, en serio ya eran tres veces que le pasaba. La primera fue en su adolescencia justamente cuando abrió su corazón después de entender que entre Sehun y él nunca habría nada, se enamoró como un idiota de su primer novio pero parece que se enamoró solo, porque al otro no le importó Baekhyun cuando dijo: "El amor a distancia no funciona, lo siento me mudaré" y ese mismo día Baekhyun fue quien se marchó sin decir nada, él siempre se iba cada vez que no se sentía amado, sin dar explicaciones se iba. Lo había hecho ya tres veces, lo entendía, sabía que era él quien se iba porque quería olvidarse, quería borrar, quería eliminarlo todo, y así estaba haciendo en estos momentos, se fue apenas sintió que el amor de Sehun no era como lo esperaba. Y puede que tal vez no todos están destinados amar.

Esa noche Baekhyun lloró en soledad, agarró su teléfono escuchando como sonaba y sonaba. Sehun siempre lo llamaba a la misma hora, siempre insistía, no importaba cuanto días pasaran, Sehun llamaba y llamaba, le mandaba mensajes de texto, mensajes de voz, pero Baekhyun nunca contestaba. Él lloraba viendo su teléfono, murieron por contestar pero igual no contestaba.


****

Sehun abrió la puerta con suma pereza, no fue complicado convencer al conserje de prestarle la llave un momento, se había olvidado de aquella caja en la casa de Baekhyun. Al principio no era muy importante, pero cuando recordó que ahí estaban unos pantalones negros que de seguro quedarían perfectos para la reunión del domingo, aprovecho que era viernes para ir a buscarlos.

Cuando apenas puso un pie en el departamento, recuerdos llegaron a su mente, todo eran recuerdos de él y Baekhyun.

Baekhyun enseyándole a cocinar.

Baekhyun dándole la bienvenida a casa.

Baekhyun besándole.

-Ah, Baekhyun... -soltó un suspiro.

El departamento estaba tal y como lo recordaba cuando lo dejo meses atrás, había un poco de polvo pero no importaba. Caminó con melancolía hacia la caja que le pertenecía.

Era lo único que le quedaba en la casa de su Baekhyun.
Si se lo llevaba ahora no tendría otra cosa que lo uniera a Byun, solo tendría lo recuerdos de lo que fue aquello que llamaron relación.

Sin embargo, ya era hora de entender que Baekhyun ya no deseaba nada más de él, Baekhyun y él ya no existía.

Casi un año había pasado y no pudo comunicarse en ningún momento con él. Era triste, pero debía aceptarlo, Baekhyun lo dejo de lado. Baekhyun ya no quería conquistarlo.

Agarró la caja en sus manos y se volvió hacia la puerta. Pues era hora de decir adiós.

-Es todo Baekhyun, esto ha sido todo. Espero que consigas a alguien que te ame de verdad, aunque yo si lo hice... -recorrió con su vista todo el lugar, sonrió y giró la perilla de la puerta para irse.

-¿Baekhyun? -entonces lo vio, había abierto la puerta para irse, para despedirse, pero al abrirla se había encontrado con él, con Baekhyun.

Baekhyun lo miraba asombrado, tenía unos anteojos negros puestos, en su mano derecha mantenía la llave del departamento, sus maletas a los lados y Sehun sintió su corazón bombear.

No era hora de decir adiós.





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NA: Y bueno el siguiente si es el final o tal vez no... puede que sean dos partes. Todo depende.

Déjame conquistarte [Baekhun/Sebaek]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora