128: THE ROOM WHERE IT HAPPENS 2/2 (:'v) (SENPAI ME HA NOTADO)

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Capítulo dedicado a todos los que me han apoyado en esta historia y sufrido conmigo por culpa de HAMILTON.

Nota: Personas, estoy a punto de echarme un choro, un choro muy, muy largo. Me tomo la molestia de hablar de todo el cast y apreciarlos de formas exageradas y ciertos números musicales. Estás  advertido/a cariño.


*suspira*
El Richard Rodgers Theatre...

Ese lugar donde la mitad de la gente (PEPPINE incluida) está llorando de principio al final

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Ese lugar donde la mitad de la gente (PEPPINE incluida) está llorando de principio al final.

Y bueeeeeno, les quiero contar mi maravillosa, perfecta, irreal experiencia en HAMILTON (pa' que se mueran de envidia!! Okno, broma, espero que todos ustedes consigan sus boletos, porque es muy bello).

*inserte música del principio de "Alexander Hamilton"*

⬆️Foto que tomé en la fila para entrar (se puede notar que casi moría de la emoción por lo mal que se ve)

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⬆️Foto que tomé en la fila para entrar (se puede notar que casi moría de la emoción por lo mal que se ve).

Bueno, comenzaré con esto.

Primero les contaré lo que pasó antes de entrar al teatro:
Después de haber tomado un avión y tener el peor aterrizaje de mi corta vida (el avión se movía demasiado), llegamos al hotel. Ahí un tipín nos preguntó si íbamos a ver un show de Broadway y pues le dije que íbamos a ver HAMILTON y casi se cae (no se si por el hecho de haber conseguido boletos o porque es muy costoso).
Y aquí comienza lo feo: Llegamos al teatro a recoger los boletos... Y QUE NO TENÍAMOS EL PAPEL CORRECTO Y NO LOS PODÍAMOS RECOGER . Así que, como era de esperarse, entré en pánico, di vueltas, me estresé y terminé como una bola de pánico. Luego ya se resolvió y conseguimos los boletos. Se me pasó el colapso nervioso, me limpié los mocos y fuimos a comer (yo ahora tenía un colapso de emoción).
Comimos, hicimos otras cosas.
Dieron las 7:45.
Volvimos al teatro y esperamos en la fila. Y comencé a llorar de la emoción. Personas, al entrar al teatro sé sintió tan bello, fue tan precioso y muy mágico (SÍ, fue mágico). Aunque la salita de espera era un mar de gente.
Como era de esperarse, corrí a comprar souvenirs (La forma en la que comienza la biografía de Alexander Hamilton es demasiado perfecta). Luego, arrastré a mi papá (te quiero papi 😚) y a mi prima (también te quiero niña) hasta los asientos, no sin antes recibir las Playbills (casi muero de felicidad).

COSAS QUE SOLO LOS HAMILFANS ENTIENDEN         [EN PAUSA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora