Prólogo

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Taemin estaba corriendo por toda la habitación buscando quien sabe qué en todo el relajo que ya había hecho, pero lo que Kibum si sabía era que si no paraba el mismo se encargaría de correrlo del cuarto y por fin recuperar su preciada paz que hace un rato su compañero de habitación le había quitado al empezar a prepararse para una de esas molestas fiestas universitarias.

—¡Lo encontré!—Taemin alzó en modo de victoria el pequeño piercing, se lo puso y fue directo a su espejo para asegurarse de su apariencia—Ya estoy listo, Kibum ¿Piensas ir así?

—¿Disculpa? Yo no voy a ir.

—¡¿Qué!? ¡¿Me vas a dejar sólo!?

-Si, eso era justamente lo que tenía planeado.

—¡No! Por favor, no me puedes dejar sólo.

—Si puedo y lo haré.

Taemin puso una mueca de resignación, que no duró mucho, ya que casi enseguida una sonrisa maliciosa empezó a adornar su rostro.

—No me puedes dejar sólo, ¿qué tal si alguien me droga y luego me viola y tú no estás para impedirlo?

Kibum se exaltó, cuanto le enojaba que Taemin le dijera eso, y es que no era una broma, estuvo a punto de pasar y si no hubiera sido por el amigo de Jonghyun Taemin hubiera perdido su inocencia de la manera más cruel y vil, lo peor es que Taemin lo chantajeaba mucho con él tema ya que ese día se había negado a acompañarlo.

Kibum miró mal a Taemin y se levantó de la cama con resignación, una parte de el quería que le valiera la seguridad de su amigo y quedarse en su cama leyendo hasta tarde, la otra le decía constantemente que si le pasaba algo a Taemin sería su culpa, y la verdad no quería graduarse con la carga de conciencia, así que decidió hacerle caso a su conciencia e ir con Taemin.

—Ok, vamos.

—¡Genial! Pero no piensas ir así ¿verdad?—miró de forma despectiva su ropa—Así no conseguirás a ningún chico Kibumie.

—Voy a cuidarte, no a ligar.

—Si, pero-...

—Decídelo tú, ó me voy así ó no voy, porque bien te puedo dejar al cuidado de Jonghyun y quedarme aquí.

Taemin no parecía muy convencido pero lo dejo pasar. Gracias al cielo el lugar donde estaba la fiesta no era muy lejano y bien podían ir caminando, lo que era bueno ya que si se aburría podía salirse e irse a su habitación.

La casa estaba llena de luces y música, había jóvenes por todo lados y el lugar apestaba a cigarro, alcohol y drogas. No tardo mucho el momento en el que Taemin se le perdió entre tantas personas, no importaba, ya lo encontraría.

—¡Hey Kibum! Viniste.

Kibum volteo y encontró a Jonghyun, un chico de una estatua relativamente baja, cabello castaño, piel ligeramente bronceada y cara de perro, aún así Jonghyun era un tipo guapo y agradable, además de ser talentoso y era de las pocas personas que logró agradarle  a Kibum.

—Si, Taemin me chantajeó.

Jonghyun se carcajeó y le entrego una bebida, que el suponía que era alcohólica, que el la rechazó, no le gustaba y nunca le gustó el alcohol, en realidad el no sabía que hacía en esa fiesta, es que simplemente no encajaba ahí.

—Supongo que te vas a quedar hasta que Taemin decida irse ¿no?—comentó Jonghyun.

—Supongo que me voy a quedar sentado en ese sillón—señalo el sillón que estaba a la esquina de la estancia— hasta que Taemin decida irse.

10 Pasos de cómo Enamorar a un Príncipe [MinKey]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora