Todo por ti ( Fanfic CDM ) #PremiosCDM/#AmorisAwards2017

Epilogo Sucrette (final alternativo)

Al principio casarse parecía fácil, después de todo ya lo había intentado una vez; pero cuando me tocó con Castiel estaba más nerviosa de lo normal. Recuerdo que incluso Castiel bromeó diciendo que seguramente alguien más detendria la boda, me moleste un poco, pero en fin.

Fue una bonita celebración de noche, sin vestidos, ni trajes de gala. Me sentí cómoda con un vestido corto y Castiel estaba feliz de no llevar zapatos. Bailamos durante casi toda la noche, realmente estaba feliz de que dieramos ese paso, me costó mucho trabajo convencer a Castiel, después de haber vivido juntos por tres años, dijo que sólo sería una firma sobre un papel.
Aún así fue divertido verlo con la mano temblorosa firmando sobre el papel.

Ya han pasado 5 años desde que nos casamos, tengo que admitir que no ha sido fácil, pero en general Castiel NO es alguien fácil. Hemos tenido algunas crisis, no solo emocionales, también económicas, pero hemos logrado salir adelante y aún estamos juntos. Muchas personas dicen que es increíble que aún estemos juntos. Yo pienso que es porque nos amamos y creemos que vale la pena seguir juntos.

No le quedan ya muchas opciones a Castiel, estoy embarazada de su primer hijo y no lo dejare escapar más, después de todo él se me declaró y volvió un desastre mis ideas y mis planes a futuro. Tendré una niña, o por lo menos eso le dijeron. Al principio, Castiel estaba decepcionado, cuando lo dijo llore por cerca de 3 horas, pero ahora el parece emocionado con la idea de tener una preciosa hija. Yo bromeó diciéndole que ella tendrá el cabello negro de él, espero y sea así. Solo quiero tenerla entre mis brazos y sentirme completamente realizada.

— ¿Ya empacaste todo lo que necesitamos? — pregunta Castiel mientras carga una caja. Estábamos mudandonos, el apartamento donde vivíamos quedaría pequeño con la llegada de la bebé. Pedimos un crédito hipotecario, aunque Castiel no quería y compramos un apartamento donde cabriamos nosotros dos y dos niños. No era que planeamos tener más, pero los accidentes ocurren y más cuando se vive con Castiel.

— si, ya está todo... — sobe mi vientre que se movía cada vez que Castiel hablaba — mira — jale su manga para que soltara la caja y tocará mi vientre. — se mueve cuando hablas —

— ¿Ah si? ¿Te gusta que papá se quejé? — dijo con una voz dulce que ni siquiera usaba conmigo. Mi vientre recibió una patada y apreté los labios.

— ouch... — murmure por el pequeño dolor de la patada. Ya casi no cabía adentro de mi. Cumpli 8 meses y el caminar es cada vez más difícil. — me está destrozando por dentro — me reí

Castiel se rió — crei que eso solo lo hacía yo —

— no digas esas cosas — le di un pequeño golpe en el antebrazo y me rei sintiendo mis mejillas calientes.

— te amo — murmuró y se acercó a besar mis labios con cuidado, al separarse rozo mi nariz con la suya — subiré las cajas que faltan y podemos irnos —

Asentí y camine con dificultad hasta la puerta para salir del apartamento.
El último mes de embarazo lo pasé acomodando las cosas en el nuevo apartamento, ya no podía ir a mi trabajo y aunque Castiel se preocupaba de dejarme sola, él tenía que ir a trabajar.

Finalmente, un día a media noche sentí que mi fuente se rompió y empapaba las sabanas. Me senté sobresaltada y moví a Castiel — Castiel! Mi fuente se rompió! Trae la maleta —

Lo mire salir de la cama a prisa, ponerse los zapatos adormilado y cargar la maleta para después ayudarte a salir de la cama. — vamos, con cuidado — dijo con la voz temblorosa y yo me concentre en respirar como me habían indicado en el curso pre-natal.

En el viaje al hospital le insulte y apreté la mano tanto como pude. — todo esto es tu culpa — llore mientras apretaba su mano — yo era tan feliz sin este dolor — chille al sentir la contracción.

Castiel estuvo presente en el parto, se desmayo en cuanto me miro coronar. Así que cuando Annette nació, Castiel estaba tirado en el suelo desmayado.
Minutos después cuando ya habían atendido a la bebé y a mí, una enfermera despertó a Castiel. — su bebé nació, es hermosa — le felicito y Castiel corrió hasta donde reposaba la bebé en mis brazos.

— te salió bien... — murmuró Castiel con sarcasmo

— si, es muy bonita, tiene tus ojos grises — señale y sonreí apenas perceptible.

— Sabes...  Cuando te mire hace 8 años en el altar con Nathaniel, crei que jamás pasaría esto.  — dijo con su voz apagada.

— no pienses en eso, piensa en que ahora estamos juntos y tenemos una bebé que cuidar — le sonríe y bese a la bebé.

— tienes razón — metió las manos entre las mías y tomo a la bebé para verla de cerca, estaba totalmente embelesado con la pequeña.

Alguna relación debe de tener esta temporada en particular, porque no puedo evitar tener en mi mente el momento en que por primera vez lo mire. Él siempre se miraba igual desde que tenía memoria. Con esa actitud despreocupada, esa piel blanca, sus ojos de un tono gris y su singular cabello rojo que parecía aparentemente lacio, pero el 90% del tiempo lucia algo enmarañado y descuidado. Siendo honesta a primera vista no note nada interesante.

Ahora él es mi vida entera.