ii.

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—¡Hoy es día de película! Estoy tan feliz, hace noches que no teníamos un tiempo como este para dedicarle al grupo. ¿No estás feliz también, Yoongi hyung?

—Taehyung, calla, por favor —farfulló Yoongi.

—Sí, hyung.

Ignorando los comentarios de sus compañeros, Jin abrió los brazos e hizo un sonido de shh con su boca para que hicieran silencio. Todos le miraron atentamente.

—Muy bien, ¿ya todos tienen sus palomitas?

Jungkook alzó la mano, escondiendo rápidamente el recipiente que, cinco minutos atrás, se encontraba repleto de palomitas con sabor a mantequilla. Ahora estaba vacío.

—Yo no, hyung —dijo, poniendo su voz más suave de lo normal.

Namjoon le miró con una ceja hacia arriba.

—Te las comiste antes de que empezara la película.

—No es verdad —insistió él, mirando otra vez a Jin con insistencia—. Jin hyung, ¿no quedaron palomitas?

El nombrado asintió, y le dio una sonrisa. Jungkook podía ser una dulzura cuando se lo proponía. Jin le hizo una seña con el dedo gordo señalando tras su espalda, diciendo:

—En el microondas todavía hay.

Yoongi se levantó de su asiento y se pegó una mano al pecho, luciendo un gesto de horror.

—¡No puedo creerlo! ¡¿Por qué a él si le permites agarrar más palomitas?! —exclamó—. Esto no tiene sentido.

Jin le dirigió una mirada en puro desdén, encogiéndose de hombros.

—Simple. Él merece esas palomitas.

—¿Qué? —La expresión de Yoongi era indignante, su boca abierta—. ¿Y acaso yo no?

—No —sentenció, y agarró su propio tazón con palomitas bajo el brazo, girándose hacia Namjoon e ignorando al más bajo—. ¿Y bien? ¿Qué película veremos?

Yoongi siguió farfullando molestias, pero nadie más le prestó atención. Jungkook consiguió sus palomitas en el microondas y se metió un puñado en la boca cuando volvió.

—¡Veamos una película de terror! —sugirió Tae, intentando robarle unas pocas de palomitas a Jungkook y fallando en el intento. Solo recibiendo un manotazo en el cuello de parte del menor por intentar robarle.

—Tengo que dormir con Yoongi, y eso de por sí ya es una película de terror.

Namjoon comenzó a reír y chocó palmas en alto con Jin.

—Buen chiste, baby.

—Lo sé, ese estuvo bueno. —Se sacudió el hombro con la mano y siguió riéndose con su característica risa, acompañado de Namjoon.

Jungkook se tiró otro puñado de palomitas a la boca rodando los ojos, y dijo:

—Pongamos una película de terror, es divertido ver a Jin y Hoseok hyung asustados.

Yoongi soltó una carcajada y dijo, señalando —: Sí, es divertido ver como Jin hyung se orina la cama después del susto de la película durante la noche.

—No eres gracioso, Yoongi.

—Tú tampoco lo eres.

—¿En donde están Jimin y Hoseok? —preguntó Nam, cada vez como contendiente para siempre interrumpir las peleas de Jin y Yoongi antes de que estás llegaran a más.

mind feels | hopeminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora