El demonio de mi cielo

Capítulo 42:

Narra Lara:

Estaba algo nerviosa, hoy Marcos conocería a mis padres,y yo a los suyos. Quería dar buena impresión, aunque anteriormente su madre me conocía,pero solo por hacer el trabajo.

Temprano comencé a prepararme,un look natural pero arreglado. Estaba dándole un retoque al pelo cuando sonó el timbre,seguro que era Marcos.
Bajé mas escaleras corriendo y fui a abrirle. Nos saludamos con un beso y entramos.

Mis padres aparecieron y decidí presentarlo. Luego fuimos al comedor a tomar algo.

Mamá: Entonces,¿vas con mi hija a clase?

Marcos: Sí.

Papá: ¿Pero no eres mayor?

Marcos: Debería estar ya casi en la Universidad. Pero estoy poniéndome las pilas ya que antes tuve problemas.

Se referiría al tema de su ex novia. Le apreté la mano fuerte y él me miró.

Al rato nos fuimos en su moto. De camino a ella decidí preguntarle qué les parecía a mis padres.

Yo: ¿Qué te parecen?

Marcos: Están bien. Ahora te toca a ti.

Yo: Sí, qué nervios.

Montamos en su moto y llegamos a su casa. Abrió la puerta y preguntó que dónde estaban: su madre en la cocina y su padre viendo la tele en el salón. Fuimos a ver primero a su madre.

Narra Marcos:

Mi madre sonrió, le echó un vistazo y abrazó. Me guiñó un ojo en señal de aprobación, sé que le caía bien y la veía como un apoyo que me sacó del túnel.

Mamá: Estás preciosa encanto, vamos al salón a conocer a mi marido.

La condujo hacia allí, si supiera que ha estado más veces que las que se piensa... de nuevo comenzaron a presentarse. Al acabar mi madre alertaba de que la comida estaba lista así que Lara y yo pusimos la mesa. Luego mi madre apareció con la comida.

Pasamos la noche conociéndonos. Mi madre estaba encantada,tal vez le gustaba la idea de que su hijo había cambiado a bien.

Al acabar fui con mi madre a lavar los platos.

Mamá: No la recordaba tan guapa.

Yo: Es preciosa.

Mamá: Lo importante es que sea también bonita en el interior. ¿Te trata bien? ¿y tú a ella?

Yo: Pues claro mamá.

Mamá : Eso espero,tengo una buena sensación con ella.

Acabé y nos preparamos. Decidimos ir en plan algo tranquilo. Fuimos a Sol y allí iríamos a echar unos tragos.

Eva: Me tengo que ir pronto.

Lara: ¿Ya estamos con ese chico misterioso?

Eva: Sí, quedé con él.

Ambas tiraron hacia adelante y hablaban de sus cosas.

Dani: ¿Sabes algo de Carlos?

Yo: No,solo sé que se vició a las carreras ilegales y veía una forma rápida de ganar dinero.

Dani: Espero que al menos siga yendo a clase.

Yo: No sé qué decirte,está muy perdido.

Dani: Y tú con las carreras qué.

Encendí un cigarro.

Yo: Me alejé de ellas. Un día vino Javier, uno que era amigo de Carlos y quería que corriese en una competición que daba nuen dinero al ganador, pero rechacé.

Dani: Es lo mejor. Es un mundillo peligroso.

Entramos en un bar discoteca y pedimos algo.

Narra Lara:

Eva y yo nos quedamos solas. Los chicos fueron a por copas.

Yo: tía cuándo vas a presèntamelo.

Eva: No sé,aún llevamos poco.

Yo: Jo, quiero verlo. Enséñame una foto.

Eva: No,no.

Los chicos vinieron y alguien familiar detrás de Marcos.
Era Mel,hacía meses que no la veíamos. Ella se echó a los brazos de Marcos.

Mel: Te veo genial -dijo saludando. Nos contó que veía a Carlos en las carreras,unas veces le pillaban y multaban,pero con el dinero que pagaban no tenía ni por qué preocuparse por esas multas. Estuvimos bastante rato con ella,luego le dijo a Marcos que tenía qu hablar con él. Ella tenía cara preocupada y no me gustaba nada.

Narra Marcos :

No nos alejamos mucho de mis amigos,lo suficiente para que no escucharan.

Mel: Me encontré a Javier.

Yo: Vino a mi casa, que ni sabía cómo demonios tenía mi dirección y me pidió que competiera.

Mel: Javier siempre ganaba, antes de que llegaras tú. Se ganaba la vida en las carreras,le diste un buen palo.

Yo: Hace mucho que ya no corro.

Mel: Pero ya no hay tanta gente que corre.

Yo:Ves al grano.

Mel: Se trata de Lara.

Yo:¿Ella? No tiene nada que ver en las carreras.

Mel: Cuídala. Javier la vio cuando fue a tu casa y va a querer a toda costa que corras en esa carrera,incluso amenazándote con ella.

Me quedé en blanco. Si tocaran a Lara no me lo perdonaría. Pero era necesario saber esto.

Yo: La protegeré.

Mel: No me cabe ni la menor duda. Cuídate tú también.

Nos abrazamos y se fue,yo volví con mis amigos,tenía que hacer como si nada pasara.

Lara: ¿Qué te pasa?¿qué te ha dicho?

Yo: nada cielo.

Besé su cabeza. No quería preocuparla y menos contarle esto en fiesta. Debía tener cuidado y protegerla.