El demonio de mi cielo

Capítulo 40:

Narra Lara:

De nuevo en clase teníamos que hacer un trabajo, iba a ponerme con Eva pero decidió que era mejor ponerme con Marcos,al fin y al cabo fue así cómo realmente se enamoró de mí.

A la salida de clase esperé a Marcos, quedamos en hacerlo el viernes así acabaríamos para el fin de semana estar libres. Esperamos al resto pero de lejos vimos a Eva con un chico en moto.

Yo: Ey,mirad a Eva, ese chico me suena -no alcanzaba a verle la cara,estaba demasiado lejos. Marcos miró con mala cara. Eso me extrañaba.

Dani: El chico con el que hablaba,¿vamos?

Yo: No,mejor dejémoslo así, ya mañana le intentamos sacar algo del chico,al fin y al cabo ya están pillados.

Dani: Cierto. Bueno chicos me voy,el sábado de fiesta.

Cuando se fue nos montamos en la moto y me llevó a casa. Al llegar nos despedimos entre besos.

Marcos: Ah, y ¿lo de la fiesta?

Yo: No pensamos nada aún, pero ya vamos viendo qué tal se da la noche.

Marcos: Perfecto.

Yo:Oye y ¿Quién era el novio de Eva?

Narra Marcos:

No sabía quién era,solo me sonaba y no sé de qué.  Al igual que Eva,no veía bien de lejos.

Yo: Me sonaba mucho,pero no le conseguí ver la cara.

Lara: Mañana le presionaré a ver si saca prenda.

Yo: Vale. Tengo que irme. El viernes hacemos el trabajo.

Lara: Sí. -me besó mientras me abrazaba. Sus besos dulces que me volvía loco.

Entró en casa y yo fui a la mía, hoy llegarían tarde mis padres así que haría algo de comer.

Narra Lara:

Mamá: Hola cielo.

Yo: Hola mamá, pongo a mesa.

Mamá: Sí, tu padre tarda poco en llegar. Hija, ¿cuándo nos presentarás a Marcos?

Yo: Mamá no empieces. -dije poniendo los ojos en blanco.

Mamá: No sé hija,tú vas a conocer a tus suegros.

Yo: Bueno,pueden conocerlo el sábado cuando me busque. Pero no le presioneis ni nada

Mamá: Está bien hija,qué alegría.

Subí a mi cuarto y decidí contarle lo que hablé con mi madre a Marcos,así iba preparando.

Marcos: Bueno, no me importa conocerlos,sobretodo cuando no tengo malas intenciones contigo y realmente quiero estar a tu lado una eternidad.

Yo: Ojalá fuera verdad...tengo que irme a comer,ya ha llegado mi padre.

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Narra Lara:

Ya era viernes así que iríamos a casa de Marcos,me invitó a comer a casa,estaríamos ambos solos. Fuimos en metro porque hacía mal tiempo.

Marcos: Vamos a mi casa,mis padres no están.

Yo: Perfecto. -estaba tiritando del frío así que me dio su chaqueta. Me encantaba ponerme su ropa.

Llegamos a casa y él decidió cocinar. Fui a ayudarle.

Marcos: Ah no señorita, está invitada.

Yo: No sabía que cocinabas.

Marcos: Algunas cosas.

Yo: Y qué me harás. -puso una pose sexy mordiéndose el labio.

Marcos: Ya lo sabrás. -vino a mí y me besó,entonces me cogió como una princesa y me llevó al comedor.- ahora te traigo los platos y pones la mesa.

Yo: Claro.- al cabo de un rato olía muy rico,estaba intrigada por ver qué se escondía detrás de ese buen olor, y también estaba hambrienta.

Marcos:¡Ya voy!-dijo desde la cocina . Apareció con unos solomillos a la pimienta,con patatas y ensalada de verduras.

Yo:Mmm qué rico.- me sonaban las tripas del hambre,así que me sirvió y nos pusimos a comer.

Marcos:¿Te gusta?

Yo: Me encanta. Espero que me hagas de cocinar más veces.

Acabamos y fregó los platos, yo subí a su habitación a cambiarme y ponerme alguna ropa suya más cómoda.

Marcos: Echemos una siesta y nos ponemos después con el trabajo.

Yo: Será mejor.-estaba realmente cansada así que si hacía el trabajo descansada,rendiría mejor.