capítulo 4

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Liu

No dejaba de imaginarme las mil maneras de matar a Jeff y justamente tenia varias sorpresas para él-Entonces hermanito,juguemos- Repetí sus palabras mientras limpiaba la sangre de mi rostro con la manga de mi polerón.

-Haré que te arrepientas- Corría hacia Jeff mientras mis dedos apretaban con fuerza el cuchillo con el cual acabaría con su vida. Con un rápido movimiento, intenté encajarle la hoja filosa en su pierna pero, Jeff lo esquivó. Por pura suerte, logré mantenerme en pie y luego, con frustración escrita en mi rostro, bruscamente mi cuchillo fue directo a su cabeza. Jeff lo esquivó pero no del todo; ahora su "perfecta" sonrisa tallada en sus mejillas pálidas tenía un rasguño.

- Upss...! Tu sonrisa, ahora sí es perfecta- Me burlé mientras veía la cara de Jeff llena de odio por haberle, digamos que... "Re-decorado" su sonrisa - Dime Jeff, seguirás ahí parado o piensas atacarme?

Jeff

Mi sonrisa... mi hermosa sonrisa está arruinada. Sentía mi sangre hirviendo y corriendo freneticamente por mis venas, una estampida furiosa corría salvajemente dentro de mi estómago tratando de salir y mostrar mi furia y mi mano sostenía con fuerza mi cuchillo, el único amigo fiel que tenía.*

*Mi ojo temblaba incontrolablemente, mis pies permanecían estancados en el pavimento, mi cabello oscureció más de lo que estaba, mis ojos azules se tornaron poco a poco en un negro igual que la noche.*

*Mis cinco sentidos se apagaban lentamente, mi vista se nublaba y mi mente quebrada se desvanecía; Él quería salir.*

*Cada paso rápido que mis pies daban no eran parte de mí, era del Otro. Esa sensación que inundó mi ser, imposible de explicar, controlaba cada acuchillada que intentaba tocar a Liu. Cada segundo que pasaba, la poca cordura que me quedaba se desvanecía lentamente hasta dejar este monstruo sin corazón, sin embargo, no me importaba ya que lo único que quedaba en mi cabeza, era el deseo de matar a Liu.*

*Un grito detuvo mis pensamientos, era Liu, con mi cuchillo enterrado en su hombro. Una sensación de gozo y felicidad invadió mi ser, ya no importaba si esta persona a la que llamaba hermano muere, despues de todo sería un gran alivio deshacerme de todo lo que me une a mi antiguo yo.*

-Bien, Liu, parece que estoy ganando... es tiempo que vayas a dormir, no crees? Asi que se un niño bueno.- *retorcí mas la hoja del cuchillo en el hombro de Liu, mas sangre salía como una cascada roja. Sus gritos desesperados, llenos de dolor, hacían que mi corazón palpitara de emoción a una velocidad capaz de provocar un paro cardiaco, mi mano detuvo el brazo de Liu que intentaba encajarme una cuchilla mientras su otra mano intentaba alejarme de él, mis ojos se abrieron mas para deleitar la hermosa escena ante mí y mis labios formaron una sonrisa escalofriante.*

*saqué el cuchillo del hombro de Liu, el cual, cayó al suelo sosteniendo su hombro herido, agonizando de dolor, y soltó la cuchilla que tenía en su mano. Doble mis rodillas a fin de quedar a la misma estatura que estaba él, agarré un puño de su sudadero y traje su rostro hacia mí, mi cuchillo en mi otra mano listo para cobrar la vida de otra víctima más.*

-Go to sleep... Liu-

*Splash*

-Pero qué... ?- *mi respiración aceleró en un segundo, mis ojos se abrieron como platos, habia mucha sangre regada en todas partes, en mí, en el rostro victorioso de Liu, en el pavimento. Me hubiera sentido la criatura más feliz del mundo de no ser que... esa no era la sangre de Liu... era la mía*

Lazos de sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora