Lazos de sangre

Detrás de unos ojos esmeralda

Caminaba por el oscuro asfalto sin rumbo alguno, acababa de asesinar a una familia que era feliz y como había jurado si yo no sería feliz, nadie lo hará.

Ya habían pasado años desde mi último encuentro con Jeff y todavía sentía ese odio y sed de venganza por él. De repente, se escuchó un ruido a lo lejos.

-Quién está ahí?!- Saqué uno de mis cuchillos y apuntaba a varias direcciones .

Detrás de unos ojos color cielo

La luz de la luna llena y misteriosa bañaba mi figura espectral creando una sombra macabra; sí, la de un asesino.

El silencio de los árboles calmaba mis sentidos. Las hojas marchitas crujían al contacto con mis converse negros mientras caminaba sin rumbo fijo. Mis ojos buscaban señales de vida y mi cuchillo filoso ansiaba sentir correr la sangre de víctimas frescas.

Deseaba tanto impregnar mi sudadero blanco de el líquido rojo vital. Mis labios formaron una línea recta escondida por la sonrisa feroz en mi rostro.

(Tal vez hoy no tenga tanta suerte) Sumido en mis pensamientos, no me di cuenta de que había llegado a una oscura carretera.

Esta vez, las comisuras de mis labios coincidieron con la sonrisa brutal cortada en mis facciones cuando vi a un joven solitario caminar por el húmedo asfalto.

Agudicé mi vista y pude observar manchas rojas en sus ropas. Definitivamente, esto lo hará más interesante... Lentamente traté de no hacer ruido pero una maldita rama se interpone en mi camino delatando mi presencia.

-Quién está ahí?!- Gritó el mismo joven sacando un cuchillo y revelando su identidad.

(Maldición!) Tan rápido como pude, me escondí detrás de un árbol con mi cuchillo en la mano dispuesto a jugar con mi hermano Liu.