—Sa-salta más bebé - gruño Jungguk, mientras se mordía el labio inferior el pelirrubio se detuvo y comenzó a moverse en movimientos circulares provocando que Jungguk se desquiciara de placer.
Ambos estaban desnudos mientras una fina capa de sudor cubría sus cuerpos la noche era perfecta, la luna brillaba en su máximo esplendor, sin ninguna estrella la noche era perfecta para el gusto del rubio.
El mayor apoyo sus pequeñas manos en el pecho de Jungguk al sentir que pronto llegaría al clímax. El castaño con la poca cordura que le quedaba cambio de posición, ahora el estando arriba de aquel hombre fornido aplicándole rapidez en sus embestidas.
El pelirrubio se aferró a la espalda de Jeon mientras que la cama soltaba sonidos eróticos por las embestidas del menor, ambos se terminaron corriendo por segunda vez, al mismo tiempo que el con manos pequeñas arañó la espalda de Jeongguk.
- Ah~ - gimió el pelirrubio cuando Jeongguk saco su miembro del interior del primer nombrado. Ambos se tumbaron en la cama con la respiración agitada - ahora me toca a mi ¿No crees? - se acercó peligrosamente a Jeon.
- No - dijo Gguk jadeante recuperándose de su orgasmo. No es que el rubio no supiera metérsela, al contrario, solo era que cuando el mayor tomaba el poder Jeongguk parecía un animal indefenso y se sometía a todo lo que el contrario quería hacerle y en cierto punto a Jeon eso no le gustaba, pero en el momento se olvidaba de todo se dejaba hacer y deshacer por las caricias y el placer que le otorgaba el mayor.
- Por favor - hizo un pequeño puchero, aunque eso no le serviría ya que el contrario no podía verlo en la oscuridad.
- La vez pasada el culo me dolió durante tres días - escondió su rostro en la almohada, a pesar de que él menor tenía un cuerpo envidiable seguía siendo el mismo niño tierno de siempre y eso al rubio le encantaba - y no, no estoy exagerando - dijo mientras sin poder evitarlo se sonrojaba violentamente, el mayor se tendió a su lado mientras comenzaba a dibujar cosas imaginarias en la espalda de Jeon
- ¿y porque te dolía? - pregunto simulando ingenuidad.
- Lo haces muy fuerte y duro - dijo aun con el rostro escondido en la almohada.
- No me dices lo mismo cuando estas gimiendo de hecho ni te quejas - le susurro en su oído lamiendo el lóbulo de su oreja.
- Idiota - sonrió levemente.
- Me toca a mi la próxima ¿Bueno? - comenzó a besar su hombro provocando que se le erizara cada bello de su piel.
- No - sonrió mientras sentía los labios ajenos en su piel.
- Por favor - siguió repartiendo besos en su hombro continuando por su cuello y llegando hasta su mejilla.
- Ya ya, está bien - el mayor sonrió victorioso, como si hubiera ganado una gran guerra aunque para él eso era de vida o muerte.
- No cambies de opinión - advirtió y se volvió acomodar al lado de Jungguk.
- No no lo hare, pero ¿Cuándo me dirás tu nombre? - el corazón del contrario latía con fuerza - ¿Mi nombre?
- Si ni siquiera sé cómo te llamas - hizo un puchero.
- Jungguk ya lo hemos hablado - dio un suspiro.
- Pero Esta bien - hizo un pequeño puchero, pero sabía que el rubio no cambiaría de opinión. Se levantó de la cama y comenzó a buscar sus prendas de vestir.
- ¿A dónde vas?
- A casa - sonrió.
- Pero siempre te quedas adormir - se sentó en aquella cama que tantas veces habían tenido sexo.
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Tentación Prohibida. [JiKook¦KookMin] PROXIMAMENTE
Fanfiction"JungKook era el tipo de pecado que nadie se podia resistir, y Park Jimin no era la excepción" ⇨Versátil. ⇨Contenido homosexual.