¿Realidad o serie?

Capitulo 7: Problemas en la granja y Lección 2

Max tomo una de mis escopetas que se encontraba en la habitación.

-Quédate aquí- fue lo ultimo que dijo, después corrió al primer piso.

¿Qué me quede aquí? ¿con el trasero pegado en la cama sin ayudar? no, gracias bonitos, yo soy otro tipo de chica. Tome mi metralleta y baje.

Magnus estaba escondida en el baño. Norman , Chandler, Steven, Andrew y Max le disparaban a los infestados a medida que se acercaban, no quedaban tantos.

Empecé a disparar como una maniática, los cinco me miraron asombrados, y después siguieron con lo suyo.

-¡Esperen!- era el ultimo, ¿para que desperdiciar otra bala? Saque mi cuchillo y se lo enterré.

-Lección de fuerza y protección personal eliminadas para ti ___- dijo Norman entre risas.

-Creo que tendremos que poner algo más fuerte- dijo Max entre dientes-.Y no está permitido salir de la granja a menos que tenga permiso- su mirada se concentró en mi y en Chandler, después camino a la casa con desprecio.

-Ya lo escucharon, los caminantes de la vida real son mas rápidos, ágiles y fuertes- confesó Steven.

Mi cabello estaba empapado por la lluvia y mi pollera se apegó a mi cuerpo. Entre a la casa dejando pisadas de agua por detrás, Chandler me siguió hasta mi habitación.

-¿Cómo fue que disparabas tan acertadamente?

No pude evitar sonrojarme al ver que su mirada estaba en mi pollera mojada.

-Me ha tocado disparar en algunas películas de acción, ahora vete que me enfermare y tú también.

-Esta bien- se mordió el labio inferior.

Cerré la puerta y me deslicé en ella como la protagonista de un libro.

Mire por la ventana a la vez que tomaba mi café frío. Todos los hombres arreglaban la cerca agregándole más protección y extensión.

Al siguiente día la lluvia había parado pero estaba nublado. Al despertar recordé la lección de hoy: Caza.

Me puse un pantalón negro, una camisa de mezclilla y una pollera blanca. Baje a desayunar junto con los demás.

-Buenos días- dije sentándome en la mesa. Habían huevos fritos, pan y jugo.

-Buenos días.

-__, enserio quiero felicitarte- dijo Norman llamando la atención de su hija- ayer estuviste increíble respecto a la puntería.

-Gracias, Reedus.

-¿Están listos para la lección de caza?- dijo Max con una sonrisa de oreja a oreja-. Utilizaremos solo silenciadores, arcos y ballestas.

-Ahora podremos cazar, Max, como me lo pediste la primera vez- le sonreí y él a mi.

-Estoy seguro que seremos buenos compañeros de caza, tu Katniss y yo Gale- reí por sus palabras.

Max si leía, en su estante estaba la trilogía los juegos del hambre

-Y yo Peeta, no lo se, él sale ganando- me estaba conteniendo la risa por lo que dijo Chandler. Max lo fulminaba con la mirada y los demás no entendieron, excepto Steven.

-Vi la película para su información- dijo Steven y Magnus rio-. Max queda en la friendzone en esta ocasión.

Me sentía incomoda pero apunto de reír a carcajadas. Peeta y Gale pelean por una chica y ella es Katniss, ¿fueron indirectas? tal vez, tal vez no.

Max, yo, Chandler y Magnus fuimos al bosque. Chandler y Max  tenían un arco mientras que yo y Magnus usábamos una ballesta.

-Chandler, apunta cuidadosamente al ciervo y ya esta- dijo Max.

-¿Que mierda? ¿Hay ciervos?- él asintió.

Cuando el ciervo se dejo ver no logro cazarlo ya que fallo dos veces seguidas.

-___ te toca- me sonrió.

-Yo no cazo animales, cazo infestados, Max.

Él me tomo cuidadosamente del brazo y me llevo hasta lo mas adentro del bosque, allí habían dos infestados.

-Verifica el mecanismo de disparo para estar seguro de que esté tenso y disparas- estaba apunto de hacer las ordenes de Max. Cuando estaba apunto de disparar me tomo por los brazos desde atrás y dispare acertadamente-. Te dije que seriamos buenos compañeros de caza- me sonrió y yo le devolví la sonrisa.

-Podía hacerlo sola- Chandler miraba la situación con desprecio al igual que Magnus. Tomo su arco y me miro fríamente- volveré a la granja- Magnus lo siguió. Estaba apunto de detenerlos pero Max me tomo delicadamente del brazo.

-Déjalo, un hombre celoso de lo que no tiene propiedad no vale nada.

Después de estar una hora practicando fuimos a la granja. Chandler estaba mirando por la ventana mientras se abrazaba a si mismo en el sillón. Me senté a su lado en silencio, él no me miro.

-¿Que sucede?- hable después de dos minutos- ¿Por que te fuiste tan así?- tenia pistas sobre lo que le sucedía, pero podía ser parte de mi imaginación.

Él me miro, no mis ojos, mis labios.

-Últimamente he estado confundido...- hablo entre dientes- mis sentimientos se están expresando aleatoriamente en el momento incorrecto.

-¿De que hablas?

-¿No lo entiendes?- moví mi cabeza.

-Debes saber lo que me esta pasando contigo, solo que no te atreves a decirlo- se levanto y se fue.

Tenia razón, ¿le gusto?, tal vez sea eso u otra cosa. Quería despejar mi mente y aclarar las cosas... ¡Magnus! Le gusta Max.

-Norman, ¿Dónde esta Magnus?

-En su habitación- dijo sin apenas mirarme.

Toque la puerta dos veces y no obtuve respuesta hasta que dije "Soy Max" y ella abrió la puerta.

-¿Como supiste que me gustaba?

-No lo sabia- mentí. Ella se sonrojo-. Es broma, ¿me dejas pasar?

-Esta bien- se hizo a un lado y entre a su habitación.

Nunca había entrado, desde que vinimos a la granja. La tenia decorada a su gusto; Con imágenes de su familia, amigos y viajes.

-Que creativa.

- Quiero mantener mis recuerdos buenos- suspiro de frustración-. Y respecto a lo del bosque... La forma en la que Max te abrazo por detrás me hizo pensar muchas cosas.

-Solo somos amigos desde hace dos semanas, además nunca me gustara, todo tuyo.

-Él no piensa lo mismo, ¿crees que no he visto la forma en la que te mira? Chandler me lo dijo, con cel...- se callo porque sabe que ha dicho algo inapropiado.

-¿Ibas a decir celoso?- ella trago fuertemente saliva.

-Si, solo te contare porque ahora eres mi amiga pero yo creo que tienes vuelto loco a Chandler- aquellas palabras me hicieron sonrojar- Y parece que a ti también te gusta- hizo una sonrisa de medio lado.

-Solo lo encuentro atractivo y a lo mejor el piensa lo mismo de mi, pero llegar a ser algo mas no me lo imagino.

-Si tú dices...

Después de hablar un momento con Magnus regrese a mi habitación. Quede pensando en su dormitorio, ¿por qué no hacer algo que me distraiga y pueda expresarme? ¡Bendita seas Magnus! Es genética.