Capitulo 11

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Esta semana ha pasado tan lenta, he ignorado a Danny lo que mas puedo, mientras tanto no he logrado conseguir un lugar donde vivir, el trabajo en la heladeria del papa de Adam me alcanza apenas para satisfacer mis necesidades basicas; trabajo en las mañanas y estudio en las tardes, sin contar que prefiero mil veces viajar en autobus distinto al del niño rico oculto. 

Durante el instituto, Denise no para de preguntarme sobre como va mi vida, le cuento todo detalladamente ya que me hace muy bien hablar con esta chica, quien considero la amigas mas fiel, leal y firme de todos los poco que he tenido. Por supuesto Denise me ofrece quedarme en su casa, pero no quiero molestar a su madre quien tiene poco cariño por mi porque piensa que yo Provengo de una familia des adaptada y no tengo los principios necesarios para ser una persona de bien. 

-Amiga, no puedo creer de verdad todo lo que ha hecho ese imbécil - Denise frunce el ceño y sus brazos los cruza como lo hace cada vez que esta molesta. 

-Por ahora lo único que me importa es encontrar a mi abuela - digo casi en un susurro. De repente sus brazos rodearon mi cuerpo con un caluroso abrazo que necesitaba desde hace mucho tiempo y nadie me lo dio. 

-Amiga.... - añade Denise -  Que vas a hacer respecto a la demanda del violador ese? - dice con un poco de furor y comprensión en su mirada. 

-por ahora, solo me interesa encontrar a mi abuela - repetí en un suspiro cansado. la verdad es que no quiero realizar la demanda en estos momentos ya que para eso me va a tocar hacer una cantidad de tramites, tengo que pasar por muchos exámenes y esas cosas y en estos momentos lo único que quiero es encontrar a mi abuela. 

- Mientras mas tiempo pase, sera peor encontrar a ese maldito Darlyn - me agarro las manos como gesto de apoyo y sin darme cuenta una lágrima se deslizo por mi mejilla  -pero no te preocupes amiga, yo estoy contigo y te apoyo en lo que sea, ya sabes - me guiño un ojo y me volvió a depositar un caluroso abrazo, Dios si que los necesitaba. 

al salir de clases me despedí de Denise, aborde el autobús directo al trabajo. 

una vez entre a la heladería salude a mis compañeros de trabajo, agarre mi uniforme del locker, me lo puse y comencé a trabajar. estaba lavando el baño cuando escucho que me llaman y me asomo para ver que necesitan.

-Darlyn- me dice mi compañero señalando hacia la entrada en donde habían dos policías que tenían la patrulla aparcada tras de ellos. 

-¿tu eres Darlyn Mendoza? - pregunta el policía mientras me señala con el dedo, a lo que yo asiento y me dirijo hacia el - Mucho gusto, soy Tomas y el mi compañero Enrique, somos agentes de la policía - dice mostrándome sus etiquetas y su licencia 

-Mucho gusto - digo casi en un susurro estirando la mano como gesto de formalidad 

-Necesitamos que venga con nosotros por favor - mi corazón se paralizo apenas dijo estas palabras, en mi cabeza estaban la cantidad de pensamientos que me golpeaban el alma una y otra vez. Asenti suavemente y me fui con ellos entrando a la patrulla y olvidando completamente el despedirme de mis compañeros. 

¿Y si le sucedió algo a mi abuela? ¿y si me llevaran para decirme que ya se cansaron de buscar y se rindieron? ¿y si esta muer..? Mierda, no no no, esto no puede pasar, que clase de pensamientos se cruzan en mi mente, observo el reloj de mano que tengo y este me avisa que son las 3:00 pm. El trayecto a la estación de policía se me hace largo. 

Una vez llegamos los agentes me guían. las paredes son totalmente blancas, solo blancas, tan perfectas, no tienen imperfecciones, el piso es de color blanco igualmente, se ve todo tan limpio, al frente se encuentra la recepción que esta al mando de una mujer de traje policiaco, a los lados hay pequeñas sillas de espera y en las esquinas hay dispensadores de agua, café o jugo. 

entre con los policías mas a fondo, en donde llegamos por fin a un cuarto pequeño u oficina.

en ese momento entro una señora, alta, acuerpada y de cabello largo, muy musculosa por cierto. -Buenos días señorita Darlyn  - saluda con una sonrisa en su rostro a lo que le respondo igual -mucho gusto, la capitana Smith - me extiende la mano la cual la estrecho. 

-¿te preguntarás por que estas aquí? - ¡NO! CLARO QUE NO ME LO PREGUNTO , ¡POR DIOS!. ignoro el sarcasmo de mi mente y asiento.

-Sigue, tome asiento - me señala el pequeño asiento que hay frente a su escritorio y añade -¿Conoce usted a esta mujer? - mi cuerpo se tenso y mi corazón palpitaba a mil cuando la capitana me enseño la foto de mi abuela 

-S..Si, es m...mi a..abuela -dije tartamudeando -¿que le sucedió? por favor digame algo señora - dije desesperada mientras miles de lágrimas recorrían mi piel 

-Tranquila niña, la encontramos, pero necesito que usted este calmada por favor - ¡¿calmada?! vieja loca, como se le ocurre que voy a estar calmada. Reprendi a mi mente por pensar este tipo de cosas y cerré los ojos respirando profundamente. 

-Digame, por favor, ya estoy calmada - dije limpiando bruscamente las lágrimas 

-La hemos encontrado a ella, junto con el resto de delincuentes que la secuestraron, lastimosamente ella.....

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