Capítulo 1

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Era un noche cálida, podía sentir la fuerza del viento chocar contra mi rostro y algunos mechones de mi cabello yéndose para atrás por la brutalidad del aire , observaba atentamente los edificios y como la gente apagaba las luces de sus habitaciones para ir a dormir porque claro ya eran las once de la noche pero yo por lo tanto estaba preparada para ir a una discoteca con mis dos mejores amigas las cuáles estaban animadamente conversando, no sabia de que estaban hablando ya que estaba muy concentrada mirando los lugares por los que pasabamos.

No era de tanto ir a discotecas ni era fiestera pero mis amigas me convencieron para venir ya que estábamos empezando las vacaciones y teníamos dos meses  ya que luego iban a empezar nuevamente las clases de la preparatoria.

Yo no estaba tan alegre porque bueno me siento la peor hija del mundo. Con mi madre teníamos una buena relación entre madre e hija, ella confiaba en mi y yo en ella pero días atrás le pedí permiso para ir a la discoteca a la cual estoy yendo,  pero ella me dijo que era un poco peligroso ir a esta clase de fiestas con desconocidos y peor que era menor de edad, tenia 16 pero dentro de unos meses tendré 17 y pues también me preguntó como iba a entrar a la discoteca si era menor de edad y le dije lo cual era cierto que Clarissa tenia una prima que tenia amigos que eran trabajadores de la tal discoteca y que podían conseguirnos entradas.

Cuando termine de decirle todo a mi mamá, ella me dijo un rotundo no, me moleste un poco pero me fui dando cuenta que tenia razón. Mis amigas me insistieron mucho y no se que me paso y acepte , bueno.. en otras palabras me escape de mi casa.

Ya como las diez y media tuve que salir de mi cuarto y tener cuidado de no hacer ningún ruido para no levantar a mi mamá ni a Sandra, mi hermana menor de diez años, solo con ellas vivía ya que mis padres se divorciaron hace tiempo y mi padre se fue a vivir a otro lugar, nos visitaba de vez en cuando hasta que un día recibimos la horrible noticia de que mi padre sufrió un accidente y que hicieron todo lo posible pero no llego a sobrevivir , nos costó mucho supersarlo pero al final  pudimos o eso intentamos mostrar.

Cuando sali por la puerta de la casa me encontré con el auto de Clarissa y pues aquí estoy sentada en el asiento de la parte de atrás del auto y siento que si mi madre se llega a enterar de todo esto que estoy haciendo se va a decepcionar mucho conmigo.

-Mia.. - pronunció mi nombre Fernanda - en serio , si quieres volver a tu casa daremos media vuelta y nos iremos para allá.

Pude sentir la preocupación de mis amigas pero me di cuenta que ya habíamos llegado y estabamos estacionadas calles atrás de la discoteca.

-No, ya estamos aquí solo hay que divertirnos- dije con una sonrisa un poco forzada.

-Bueno - me dijo Clarissa - entonces que esperamos?- dijo apagando el auto y sacando el seguro de las puertas para abrirlas.

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