Al Límite [Connor Ball] [COMPLETA]

•Capítulo 31 - Harry's Bakery/Parte 1/¿Quién te amaría?

En el capítulo anterior:

Volteé para encontrarme con un sonriente Adam.

Tocó la ventana con desespero hasta que la bajé.

-¿Qué sucede?

-Detrás vienen la vieja Vega,Collin y Connor -corrió hasta el asiento donde estaba Ryan- vámonos.

-¿Te escapaste?

-Tu también,¿Quieres una agradable charla con esos tres? No lo creo.

Sin aviso encendió el auto y pisó el acelerador.

Presente:

-Tenías que atravesar tu gigantesco pie en el acelerador...

-Tenías que cruzar el volante a la derecha...

-Tenías que Atravesarte... -golpeo el árbol

Si, adivinaron, Adam chocó el auto de mi madre.

-¿Estan todos bien? -Vieja Vega llega hasta nosotros con el rostro blanco de preocupación.

-Si, estamos bien -respondió Adam- excepto la camioneta.

Lo miro mal.

-Gracias a Dios -Respira hondo- llamaré a sus padres. Vamos.

Los chicos siguen a la profesora al edificio, los veo hasta que desaparecen el en interior.

Así sigo mi camino hasta casa, sin importar los daños a la camioneta o los futuros problemas con mi madre,las personas me miran,algunos gritan cosas obscenas, pero sin importar lo que los extraños digan sigo mi camino.

-¿A dónde crees que vas? -Connor aparece detrás de mi.

-Creí que te habías ido con la vieja Vega.

-Decidí seguirte.

No dije nada.

-¿Quieres ir a un lugar?

-Un lugar...

Me encogí de hombros y seguí caminando, ahora con Connor a mi lado.
La conversación fue escasa,él me preguntó sobre el incidente de los periódicos,a lo que yo sólo respondía si o no.

Aún seguía distraída pensando ¿Como demonios voy a explicarle a mi madre la destrucción de su amado auto? Y cuantos días me dejará sin comer para poder pagarlo... Ya que,yo lo soy indiferente,supongo que fingirá enojarse y luego le quitará dinero a Peter Cárter, si, ya no siento ganas de llamarlo "papá".

Llegamos a una local de varios pisos de altura,en el primer piso se leía "Harry's Bakery", Connor abrió la puerta, al entrar, nos recibe un hombre joven con sonrisa de comercial, a su lado,una vitrina repleta de panes,panecillos y galletas, el pequeño lugar tiene paredes de madera,con techos blancos y piso de baldosas marrones. Está inundado del delicioso olor de pan recién horneado.

-¿Qué hacemos aquí? -pregunto

-Vamos a nadar -dijo obvio- sólo te traje aquí para conversar y comer algo.

-Esto es estúpido -dije a la defensiva- no tenemos nada de que hablar,adiós.

-Sarah,sólo quiero decirte algo... Algo muy importante.

No dije nada

-vamos -me tomó de la mano,otra vez,mierda.

Saludó al joven,cuyo nombre es Harry,si,el dueño de la panadería. Detrás de él había una escalera de caracol. Harry se hizo a un lado para dejarnos pasar.