Doom!Sans, un Sans creador por el odio, esta interesante historia nace a mediados de 2016, pero la escribo de nuevo para mejorarlo, poniendo más calidad.
¿Quién puede soportar tanto?
Por otro lado Error no dejaba de lamentarse por lo que había provocado antes, pensó que quizás aquella mancha se había secado y no estaría más, pasó un rato por lo menos unas cuantas horas antes de pensar en cómo reconciliarse ya que Ink pensó en ir inmediatamente con él, con la típica mirada de culpa pues creía que era culpable de como Error se sentía en esos momentos, se colocó justo atrás donde estaba la presencia extraña de antes, comenzaron a hablar de cómo solucionar el problema.
—Nunca creí que podría hacerlo, estaba seguro que no volverías a hablarme, siempre seré el mismo ingrato, que solo piensa en sí mismo, nunca cambiaré, sabes. —Este negó con la cabeza sin mirar al otro.
—Sabes que no es lo mismo que yo pienso, los otros universos me lo han demostrado sin importar lo malvado e insolente que seas, solo deberías pensar un poco, aún tienes oportunidad de lograr cambiar.— Solo sonrió de una manera un tanto amigable.
—Sabes que es raro, que un ser que nunca cambió te esté dando consejos, además, ni siquiera sabes lo que he hecho cuando no estabas en si.— Volteo la mirada hacia el ser del pincel, se mostraba algo frustrado.
—Pero al menos sé de qué estoy hablando, se ven como si nunca los hubieras capturado y amenazado, tal vez aprendieron incluso algo más en esos momentos, posiblemente mejoraron sus vidas— Ink le mostró la mano, para ayudar a aquel que solo pensaba en sus problemas, pero quería ayudarle de igual forma.
— Si supieras, yo tomé uno de tus pinceles, realmente no quería destruirlo, solo quería crear algo como tú lo haces varias veces, crear alguna vez un universo nuevo, porque pienso que debes tener varios bajo tu cuidado.— Inclinó la vista, ya dicha la verdad de lo que quería hacer, se sintió aún más decepcionado.
—No debías hacerlo, pudiste haber creado algo que no podremos controlar, mi trabajo no solo consiste en crear si no en protegerlos. — Intentaba hacerle entrar en razón de una manera leve.
—No conseguí nada, no hice nada, destruí cualquier rastro de lo que dejé únicamente existe en mis recuerdos. — Además no veía nada extraño, se levantó sin necesitar la ayuda del otro.
— Pues... tu mundo, tus reglas. —Dijo concluyendo la conversación con calma.
Al momento en que se iban, charlando de cosas cotidianas, solo para hacerse sentir un poco mejor, el otro lado de ese lugar algo empezaba a emerger, era la misma mancha que Error había dejado, más grande y sin duda más notoria dejando consigo una contaminación extraña sobre el lienzo, desde donde se extendía una oscuridad profunda y exagerada, lo blanco intentaba luchar para dominar todo el espacio, más lo sombrío tenía una fuerza superior, la manifestación que se mostraba como un brote totalmente pintado, no se notaba en el centro que se formaba una especie de ser, más y más hostigante, horas de una forzosa transformación se veía por completo esa forma, como de una araña gigante, repleta de tinta goteaba con intensidad, pero no le importaba en lo absoluto, solo pensaba en aquella misión que debía cumplir pronto, pero visto como fue tratado apenas fue creado cambio mucho las cosas.
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