Cosas de machos.

3.

Escuchó la puerta abrirse, Peter no podía ser, ya que estaba en la escuela, el mismo lo había llevado.

Así que, arriesgandose a equivocarse, habló.

— zorra despechada.

— folla objetos — le devolvió el saludo Loki, dejando las llaves en la mesa, junto a su célula.

— el consolador, no es un objeto, es parte de mi — se defendió Tony.

Loki rodó los ojos.

— yo puedo ayudarte con eso, muñeco — habló Logan, quien estaba acostado en el sofá.

— ¿aún mantienes a estos vagos aqui? — cuestionó Loki, ignorando a Logan.

— hey, no son unos vagos — los defendió Tony.

— es cierto, Steve prácticamente es la ama de llaves — acotó Peter Quill, asomado por las escaleras.

Tony asintió.

— no soy el ama de llaves — se quejó Steve sacándose los guantes.

— si lo eres — opinó Stephen, desde el sofá, cruzado de piernas leyendo el periódico.

— En fin, ¿qué haces en mi casa, otra vez?.

—¿y por qué tienes llaves? — cuestionó Logan.

— eso — secundó Tony.

Logan se sentó en el sofá, queriendo escuchar el chisme, Steve llego con dos cervezas, le dio una a Tony.

— gracias corazón — susurró, aún viendo a su amigo.

Steve le dio la otra a Logan y se sentó junto a el.

—¿qué acaso uno no puede visitar a su amigo? — habló Loki, fingiendo ofenderse. Todos levantaron una ceja. — vale, en casa está el padre de Thor y no lo soportó.

—¿y las llaves?.

— por si las dudas.

— que mal yerno eres — provocó Logan.

— ja quiero verte cuando conozcas a Howard — sonrió malicioso.

— si es que lo conoce — habló Steve.

—¿que quiere decir eso? — pregunto Logan de mala gana.

— nadie va a conocer a mi padre.- corto el chorro Tony.

— yo podría conocer a tu padre — insinuó Peter.

—¿quién crees que le agradaría mas? — inquirió Loki.

— como si me guiará por los gustos de mi padre — susurró Tony.

— yo digo que Steve — se respondió, ignorando la respuesta de su amigo y mirando a los Alfas.

Steve sonrió.

—¿por que el? — cuestionó Logan.

—¿quizas por que no es un perro pulgoso? — Loki sonrió.

—¿y yo que? — pregunto Peter, ofendido mientras bajaba las escaleras.

— Tu, maldita arpía — Logan se levanto del sofá, ignorando a Peter.

—¿vez de lo que hablo?, perro callejero, ¡como si permitiría que Anthony terminará con un animal como tu!.

—¿¡quieres ver que tan animal soy!?.

—¡inténtalo pulgoso!.

Sólo los separaba una mesa, Logan en forma de ataque y Loki en forma de defensa.

Entonces sintieron agua.

— malos, malos — hablaba Tony desinteresadamente, mientras los rociaba con agua.

—¡este chaleco es un original! — se quejó Loki.