Cápitulo 1

85 3 0
                                    

La pequeña Ariana Madlow de apenas 5 años, con su falda esponjada como la de una hada y sus botas preferidas de lluvia y rojas; corría lo más rápido que podía por entré sus familiares que conversaban sobre algún tema que a ella no le interesaba ni en lo más mínimo, lo único que le importaba en ese momento, era llegar antes que sus hermanos gemelos, y no ser una tonta por llegar última como dijeron antes de empezar sus carrera por llegar hasta el gran Manzano que había en el patio de sus abuelos paternos.

Su respiración estaba agitada al llegar a la meta, donde ya se encontraban los gemelos sonriendo victoriosamente y riendo al saber que le había ganado a su hermana pequeña.

-Eres una tonta hermanita, nosotras ganamos!-gritó alegremente el gemelo número uno, Louis Madlow.

-Yo no soy tonta!-chilló la pequeña niña mientras reprimía las lágrimas en sus grandes ojos cafés.

-Si lo eres Ariana, las niñas tontas no le ganan a sus hermanos gemelos-dijo el otro gemelo, Finn Madlow, mientras chocaba su mano con la de su hermano.

-Ustedes son unos...-hizo una pausa, ella no debía insultar a sus hermanos mayores, debía comportarse como una señorita, le había dicho su madre en una pelea anterior-son unos...SALMONES-chilló ella la primera palabra que se le ocurrió para insultar a sus hermanos.

Los gemelos sólo rieron fuertemente mientras cogían el balón de fútbol.

Las lágrimas corrieron por las mejillas sonrojadas de Ariana, y corrió a la habitación de sus abuelos, cerrando la puerta tras ella.

Los gemelos dejaron el balón de lado, y corrieron a sentarse junto a su madre que los llamaba para ir a comer; George Madlow al no ver a su pequeña princesa le preguntó a los gemelos por ella y sólo se limitaron a levantar los hombros, el padre de los gemelos los mando a buscarla para comer, ella amaba la comida y se le hacía extraño que no estuviera de las primeras en la mesa.

Los gemelos molestos por tener que buscar a la pequeña Ariana, caminaron pesadamente por los pasillos de la casa gritando el nombre de la niña, un estruendoso ruido se escucho en la habitación de los abuelos, pensando que Ariana había roto los preciados animales de cristales que coleccionaba el abuelo.

Abrieron sigilosamente la puerta, vieron dichos objetos rotos, las joyas de la abuela desordenadas y la ventana abierta, pero ningún rastro de Ariana.

Se escucho un pequeño ruido en el baño y abrieron la puerta lentamente, para luego encontrar a la menor de los Madlow, en el piso, semidesnuda, apoyada contra la pared, con una charco de sangre entre las piernas de ella y los ojos cerrados; los gemelos asustados al ver a la niña en ese traumático estado, gritaron por ayuda, y sus padres llegaron preocupados hasta el lugar, Louis y Finn llorando al ver la imagen, señalaron el lugar.

-Dios mío-gritó ahogadamente la madre de los pequeños mientras las lágrimas corrían por su cara.

El padre tomó el pequeño cuerpo ensangrentado de su princesa, y salió rápidamente de ese lugar para subir al auto familiar junto a su esposa; los gemelos desde la casa junto a todos los familiares lloraban y estaban impactado a por tal hecho.

¿Qué persona tan cruel abusaría de una pequeña niña de sólo 5 años?

Luego de que Ariana estuviera consciente y pudiera recibir visitas, los padres de la pequeña entraron, la abrazaron pero esta solo chillo y lloró fuertemente, ante tal reacción los padres llamaron al doctor y este los hizo salir de la habitación, Ariana estaba en una crisis de pánico y no reconocía a sus progenitores, el golpe en la cabeza había sido muy fuerte y había perdido la memoria de una forma temporal.

-Ariana…-murmuró su padre, ella solo se encogió en la camilla y apretó con fuerza las sábanas con sus pequeñas manos.

-Nosotros no te haremos daño, te cuidaremos, esto no volverá a pasar-susurró la madre cerca de ella.

Lo mismo pasó con sus hermanos, prometieron cuidarla con su propia vida, nadie volvería a tocar a su hermana pequeña, la protegerían, nadie la haría daño.

Poco a poco, Ariana pudo ser abrazada por sus hermanos y padres, pero nadie más podía acercarse a ella, tenía miedo, era tímida y distante con las personas que no eran su familia, si alguien se acercaba, se sentía enferma, pero ¿Habrá alguien capaz de sacarla a ella de esa oscuridad?

¿Qué hay detrás de esa sonrisa?|j.b||slow updates||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora