En una mañana triste y fría en el pueblo de Hatsesu, un hombre joven virtuoso e inteligente llamado Yuuri Katsuki, se encontraba tocando el piano en su habitación un tanto despreocupado con tanta pasión que si cerrabas los ojos dejabas de ver un lugar sombrío para transportarte a una orquesta sintiendo un escalofrío cada que tocaba una tecla y lo convertía en una sinfonía, para llenar tus pulmones y hacer que sacaras un suspiro que te hacia sentir vivo.
O al menos eso era lo que el sentía, PES no le era necesario que lo escucharan cientos de personas con tal de tocar una armoniosa armonía para si mismo, pues esto le ayudaba a olvidar sus problemas y sentirse seguro.
Pero sus padres estaban un poco hartos. Hiroko, su madre tocaba la puerta de su habitación pidiéndole que abriera ya que la tenia con llave.
-Yuri, por favor se hará tarde para el ensayo, necesitas prepárate - la mujer le habló con un tono algo cálido tratando de persuadir a su hijo. -Se que estas asustado, pero queremos lo mejor para ti cariño.
Mientras ella seguía insistiendo sin obtener respuesta de Yuuri, el señor Toshiya llegaba con las llaves en su mano, listo para introducir el metal en la cerradura.
Casi rozándola la puerta se abre dejando ver al joven de los Katsuki portando un fino traje hecho a mano por uno de los mejores sastres del pueblo y unos zapatos relucientes que cualquiera que lo viera diría que tuvieron que sacarse un ojo para obtener ese par tan costoso.
Pero llevando un atuendo tan elegante su cara hacia contraste, ya que se notaba que estaba algo temeroso, pues lo ojos estaban un poco rojizos por sus ganas de llorar y sus labios sus resecos y partidos por tanto morderse los, no es que fuera masoquista pero el hacer eso le ayudaba un poco para seguir caminando y no desmayarse del terror.
Sus padres leyendo las emociones de su hijo por su rostro le dieron un torpe abrazo golpeándole un poco al acercar se los dos, riendo ante eso y dejando se acunar entre los brazos de sus progenitores se sentía un niño pequeño que después de llorar se sentía protegido.
El abrazo duro poco ya que le fue suficiente para que Yuuri agarrara coraje.
Se separo de ellos respirando profundamente mientras cerraba los ojos para volver a fijar su visión en las escaleras, caminado seguros y con la vista determinada hacia su destino.
Sus padres estaba orgulloso de el, era un hombre de 28 años ejemplar, hecho y derecho listo para contraer matrimonio con nadie menos que Yuri Plisetsky, descendiente de una gran familia con gran reputación y económicamente estables, claro eso lo que pensaban los Katsuki de los Plisetsky.
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HEEEEEEEE, MUY BUENAS TODOS, AQUI VEGETTA 777, aveda no.
Hola hermosuras, solamente quería agradecerte por tomarte el tiempo de leer esta pequeña obra de mi inspiración que saque viendo un fanart de Viktor
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Vi la foto en facebook y dije "Hey, Alexa ¿Por que no haces una historia sobre esto?" y aquí esta pequeño pero significativo proyecto para mi.
Por el momento no se si la historia sera Viktuuri o Yuyu (o yuri²). Así que con el lapso del tiempo se decidirá o puedes elegir, el caso es que nos revoltijemos de homosexualidad jsjsjsjsjsjs.
Así que eso es todo, recuerda que cada estrellita y comentario ayuda a salvar a un gatito en el mundo, de acuerdo eso no, pero si me ayudas a seguir y a motivarme a continuar con la historia.
