~RiD~ You can't Love Me ||ChanBaek/BaekYeol

EPILOGO

Sentado sobre la única silla que quedaba en la habitación, Chanyeol observaba como su pequeño esposo se movía de un lado a otro acarreando libros para amontonarlos en una pila y luego guardarlos en una caja. Con las mejillas levemente sonrojadas producto del movimiento, Baekhyun se veía todo menos enfermo. Es más, rebosaba de salud.

Aunque seguía manteniéndose delgado, sus costillas ya no eran evidentes, su pálida piel ya no tenía ese tono deslavado y enfermizo, y sus ojos chispeaban llenos de vida.
El alto no podía creer lo bien que se veía y lo rápido que se había recuperado, teniendo en cuenta por todo lo que había pasado.

Parecía que fue ayer, cuando Chanyeol entró a la sala de urgencias, hecho un lío, con la ropa pegada al cuerpo y el sudor frío recorriendo cada una de sus extremidades mientras cargaba en brazos a un moribundo Baekhyun, pidiendo ayuda desesperado.

Aún podía recordar el dolor que se producía en su pecho cada vez que intentaba llevar aire a sus pulmones sintiendo cómo miles de espinitas se clavaban con un movimiento tan vital cómo ese.

Sin embargo, también recordaba que ese dolor en su cuerpo fue nada para él comparado al instante que separaron de sus brazos el cuerpo de Baekhyun y se lo llevaron tras las puertas.

Una terrible sensación de pérdida lo embargó.

Sus brazos, ahora vacíos del poco calor que irradiaba Baekhyun, pasaron a llenarse lentamente de incertidumbre y angustia. Cargaban con la culpa y la dolorosa duda de saber si lo volvería a ver.

Estático, sin ser capaz de moverse, el tiempo pasó a su alrededor, mientras sus inseguridades y miedos lo carcomían poco a poco, cómo termitas, que arrasaban con su carne. No fue hasta que, amablemente, una enfermera le pidió que se sentara, que él se movió. Sólo para terminar postrado en ese asiento, con ojos vacíos y perdidos a la espera de una noticia.

- Por favor que sobreviva- era la única frase que había repetido una y otra vez en su mente, en esos instantes de profundo malestar.

Cuándo vio al fin una bata blanca frente suyo, sintió el tiempo estancarse. La sombría expresión que tenía el médico hizo que Chanyeol pensara lo peor, haciéndole un nudo tan grande en la garganta, que fue incapaz de pronunciar palabra, mientras el hombre pasaba a explicarle la situación.

El aire volvió a llenar sus pulmones cuando escuchó que Baekhyun había sobrevivido, aunque por poco. Unos minutos más y habría sido fatal. Por lo mismo, se encontraba bajo observación y por su delicado estado tendría que estar internado un par de días más.

Sin embargo, los detalles no importaban. Lo importante en ése momento para Chanyeol es que Baekhyun estaba vivo.

Vivo.

Y aunque su estado era delicado, Chanyeol conocía lo testarudo que podía ser el bajito y lo fuerte que era, así que estaba seguro que se recuperaría. Tenía total esperanza de que así sería.

Tan inmerso estaba con esa pequeño luz de alegría, que no se esperó lo siguiente que diría el doctor, pero que ciertamente no dejaba de ser importante: el motivo de que Baekhyun se desplomara en el piso sin razón aparente.

- Señor Park – lo llamó en un intento de recuperar la atención que había perdido- Me temo que debo ponerle al tanto de un hecho que puede ser altamente inesperado para usted. Por los exámenes que se realizaron y ante los signos que presentó el señor Byun al ser internado, se determinó que consumió una alta dosis de antidepresivos. ¿Sabe usted si él estaba bajo algún tratamiento psiquiátrico?