❝El amor se presenta de mil y un maneras, algunas veces fugaz y otras perseverante, también puede ser agrio y alguna que otra ocasión cursi.
Resulta que las estaciones tienen mucha influencia con el cómo se presente el amor.❞
♥ Categoría: Fanfic...
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✦Título: Summer (verano) ✦Pareja: Sehun + Junmyeon ✦Extensión: 1,54k ✦Género(s): Slash; Romance; Teen!Au; Shortlove!Au; OTP ✦Sinopsis: Todos hemos tenido un amor de verano, dura lo que tiene que durar, se pasa volando y parece que nunca tendrá fin. Pero a fin de cuentas es: un corto amor.
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Verano. Calor, niños sin deberes, charcos de agua, lluvias, viajes a la playa y bebidas heladas. Sehun disfrutaba de sus despreocupadas vacaciones con su actividad favorita: ir a comprar un helado.
—¡Me voy 'má! —gritó y cerró la puerta de su casa.
Se montó en su bicicleta y comenzó a pedalear. Estaba muy animado pensando en los sabores que podría pedir y no ponía mucha atención en todas las personas que pasaban por sus lados gritándole que fuera cuidadoso.
—Ten cuidado Sehunnie —le dijo la señora Song, su vecina, quien estaba fuera de la heladería.
—Sí, perdone —hizo una pequeña reverencia—. Es que son vacaciones y ya sabe.
La señora le devolvió una sonrisa con su dentadura postiza y Sehun intentó no ser mala persona así que no se rió. Se detuvo frente a las puertas de cristal y soltó un suspiro para tranquilizar su emoción. Empujó la puerta y de inmediato sintió el fresco del aire acondicionado, no hay nada como el clima frío de las tiendas cuando fuera hace calor. Se acercó al mostrador y pidió su helado favorito, el de pistacho. Se dio vuelta y al hacerlo su cremosa y deliciosa nieve se deslizó del cono; había chocado contra alguien.
—¡Ay! —se quejó en voz baja—. ¿Por qué...? —se dirigió al joven al frente de él en tono afligido y fingiendo indignación.
—Perdón, yo... yo no quería. Fue un accidente. ¡Espera aquí!
Sehun hizo lo que el chico le pidió pero se desilusionó cuando lo vio marcharse del establecimiento. Iba a irse pero el joven volvió corriendo.
—Ten —le entregó un billete y Sehun lo rechazó—. Compra otra de esas cosas verdes, anda.
—No puedo aceptarlo, es tuyo. Gracias por preocuparte pero no, así está bien.
—Pero... yo quiero ayudar.
—Déjalo hombre, así está bien. Sólo bromeaba, volveré otro día.
Sehun salió del establecimiento de forma orgullosa, lo había engañado; aunque de verdad extrañaba a su helado de pistacho pero ya daba igual. Pasaron algunos días y él sólo paseaba en su bicicleta, o bueno, no sin antes ayudar a su mamá con el quehacer de la casa. Aveces iba a ayudarle a su vecina a sacar la basura o comprarle cosas en el mercadillo pero las veces que fue en ese lapso de tiempo la señora se negaba y decía que ya tenía quién le ayudara; al principio se extrañó pero ¡tenía más tiempo libre! En una ocasión, en la que salió a pasear, se puso muy distraído viendo a las chicas de su vecindario caminar y en su intento de lucir genial derribó a un chico que iba en patines.
