¿¿Te imaginas aceptar un empleo y, al empezar, te das cuenta de que trabajarás para unas estrellas?? Pues eso le pasa a ___. Al ser echada de su a antiguo empleo acepta la propuesta del famoso Ricky Martin para trabajar para los ganadores de La Band...
La persona que me llamaba se acerca y yo, armándome de valor, me volteo a ver a... Ese chico que trató de asesinarme hace unas semanas.
-¡¿Qué quieres, Spencer?!--pregunto a punto de llorar.
-Perdóname, ___. Por favor. Si no lo hacía...-dice. Su hipócrita sonrisa lo delata. Sólo viene a decir más mentiras.
-¡¿Después de lo que trataste de hacerme, quieres que te perdone?!-pregunto incrédula-Te equivocaste de número. ¡¡ALEJATE DE MÍ!!-digo volteando para salir corriendo de allí ignorando totalmente a los chicos.
Corro hasta llegar a la casa, entro y subo a mi cuarto ignorando los reclamos y preguntas de Ricky y Renato. Entro y cierro la puerta detrás de mi, me tiro a la cama y empiezo a llorar.
Después de unos minutos me quedo profundamente dormida.
Despierto en una oscuridad absoluta. A un lado aparece una luz y en ella se ven varias imágenes... No... Son recuerdos.
Estoy... Bueno veo a mi yo de hace unas semanas caminando por un callejón. Otra vez este maldito sueño.
-___-escucha por detrás. No voltees ___.
-Hola Spencer-dice volteando con una sonrisa
-Lo lamento-dice para luego lanzarse sobre mí...
Me estampa contra la pared y empieza a ahorcarme.
-¡Suéltame!-suplica pero el no lo hace. Cada vez que tengo este sueño vuelvo a sentir lo que pasó ese día. No llegaba aire y mi garganta me dolía horrible.
-¡¡Oye ya déjala!!-se oye una voz por detrás.
Despierto.
No se quién pero esa persona golpeó a Spencer y luego se fue sin dejar rastro. Si no hubiera sido mi final ese día.
Son las 2:15. Sí mal no estoy llegue como a las 10:46 a.m. Entonces dormí unas cuantas horas. Pero bueno, al menos así estoy más tranquila.
Entro a mi baño a darme una ducha de quince minutos, salgo, me pongo mi ropa interior y me pongo esto:
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Al bajar encuentro a todos con una cara de preocupación peor que la mía en el parque. Enseguida me ven empiezan a bombardearme con preguntas.
Chris: ¿Estas bien?
Joel: ¿Quién era ese tipo?
Erick: ¿Qué te hizo?
Richard: ¿Te duele algo?
Zabdiel: ¿Necesitas algo?
Ricky: ¿Qué pasó en el parque?
Y hubieran seguido así de no ser por las silenciosas lágrimas que empezaron a salir de mis ojos. Al parecer los recuerdos y el dolor fueron demasiado para mi. Los chicos al notarlo dejan de hacer preguntas y se acercan para abrazarme. Estando con ellos empiezo a sentirme mejor. Dejo de llorar y me empiezo a sentir segura con ellos a mi lado.
