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Te conocí hasta que la última estrella de tus pupilas se hizo cenizas,
Te sigo queriendo aunque el humo de tu ausencia cubra mis lágrimas.

Te escribí un poema cada día hasta que el último anochecer
Ocupo el cielo,
53 insomnios,
y hoy en el primer amanecer sin tu risa de compañía
Ya perdí los primeros rayos de sol,
Ya ignoré los primeros colores del día
Por mirar al suelo.

Sigo esperando oír tu voz de nuevo
Mientras observo como la última chispa de amor se hace cenizas contra el cemento.

Poemas De Una Estrella Perdida #Wattys2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora