Dormía plácidamente en su cama cuando un ruido la levanto, Mariana vivía en un pequeño departamento cuando escucho una voz que provenía de la habitación continua. Camino hacia la cocina donde escuchaba la extraña voz trato de descifrar que es lo que hablaban en el departamento de al lado, <trans dec tic irtacms ,trans dec tic egnastee> lo repitió en su mente varias veces pensó que quizás era una broma de alguno de los hijos de su vecina, así que volvió a la cama. A la mañana siguiente Mariana se levanto temprano para ir a la universidad. Tendría que ponerse al día pues había sufrido una operación por un dolor en la parte baja del vientre una apendicitis que luego se convirtió en una peritonitis grave que casi le cuesta la vida. Todavía lo recordaba como ayer, el dolor, la mirada asombrada del doctor.- (hay que operar ahora o esta chica se muere).
Gabriela su mejor amiga estuvo junto a ella, llamo a los padres de Mariana que llegaron rápidamente-¿van a operar a su hija? tiene fuertes cólicos creen que es una peritonitis.-esta en el quirófano, dicen que puede morir y en verdad los médicos le dieron por muerta, se podría decir que estuvo muerta por al menos 30 minutos y después regreso a la vida, fue como un milagro.
Al llegar a la universidad todos los amigos de Mariana estaban muy contentos las horas pasaron rápidamente, Gabriela y sus demás compañeros le organizaron una reunión en el salón de computación a la hora de salida para festejar su regreso, cuando termino la fiesta Gabriela y Mariana quedaron solas.
-sabes Gabriela estoy muy feliz, te cuento que se me hizo extraño volver al departamento y estar hay yo sola.
– jajá...Lo que pasa es que estuviste ese tiempo con tus papás que ya no te puedes alejarte del nido.
-¿Qué? ¿Estás loca?..Sin embargo podría ser verdad respondió mariana con una sonrisa, ambas se miraron y volvieron a reír
– y que tal si me quedo hoy contigo en el departamento y así estudiamos juntas para el examen y te pones al corriente en todas las materias.
-claro no hay problema...
La mirada de mariana se fijo en un monitor, parecía claramente que había alguien detrás de ella una pequeña sombra. Mariana se quedo pasmada miro hacia atrás pero no había nadie, estaba tan asustada que no se fijo que Gabriela la estuvo llamando varias veces.
Mariana se encontraba en la cocina lavando los platos mientras Gabriela se había quedado dormida en el mueble de la sala. El departamento en la que vivía, era reducido que solo una cortina con lentejuelas hacia la separación entre ambos cuartos. Recogió unos huesos de pollo la sobra de lo que habían cenado y los lanzo al tacho de la basura, cuando de repente volvió a escuchar la voz parecía que repetían las mismas frases de la noche anterior <trans dec tic irtacms ,trans dec tic egnastee> mariana se asusto al escucharlo de nuevo, esta vez la voz sonaba más gruesa no parecía la voz de un niño sino a otra cosa.
Trato de levantar a Gabriela sacudiéndola varias veces hasta que esta se cayó del sofá y se levanto tras el fuerte golpe.
-Gabriela ven escucha..-Gabriela se estada reponiéndose del fuerte golpe cuando mariana la jalo hasta la cocina
-vamos.-escucha atentamente Gabriela... Por favor dime que escuchas
-Gabriela no escucho nada....-¿ Porque me levantaste? me duele mi espalda, quizás lo que escuchaste es una rata.
-Gabriela por favor escucha bien, algo pasa en la habitación de alado.
-Mariana recordó que su vecina se había mudado días antes de su operación.- yo no escucho nada continuo Gabriela..... -en un tono burlón Gabriela abrió un cajón de la cocina .-espera, creo que mis oídos se agudizan me están llamando-
Mariana se enojo por la broma de Gabriela cuando ambas escucharon un ruido. Mariana temerosa y asustada corrió hacia Gabriela ambas se abrazaron mientras una de las tazas que se encontraban encima de la mesa de la cocina se acercaba hacia ellas, parecía que la taza empezara a temblar, a tener vida propia cuando una gran cucaracha voló sobre ellas y la taza cayó al suelo. La desesperación de Mariana fue tanta que abrió la puerta del departamento y salió corriendo hasta el pasillo.
Gabriela que se había quedado dormida con los zapatos puestos se saco el zapato del pie izquierdo y trato de matar a la cucaracha, el insecto se movía de un lado al otro hasta que Gabriela logro aplastarla.
Mariana volvió a escuchar nuevamente en el pasillo la voz del niño Gabriela también logro escucharla mientras tratada de despegar de su zapato aquel bicho todo aplastado y blanquecino.
La voz del niño empezó hacerme más aguda y repetía aquella frase una y otra vez <trans dec tic irtacms ,trans dec tic egnastee> la oración empezó a tener sentido," tras de ti iremos, tras de estaremos" la puerta de la habitación se abrió y un pequeño niño, se asomo – el rostro de mariana palideció.
el pequeño parecía disgustado y con una voz gruesa casi diabólica pregunto ¿No habrás olvidado tu pacto?
Mariana recordó su pacto mientras agonizaba en aquella camilla de hospital, "haría cualquier cosa, no quiero morir vendería mi alma con tal de no " sabia lo que tenía que hacer y que no podría huir
-¿Qué sucede? Pregunto Gabriela asustada y confundida ¿de diablos habla este niño?
Mariana empujo gabriela hacia la habitación donde estaba el niño. El pequeño dejo ver unos grandes ojos brillantes y su piel parecía reseca, no parecía humano cerrando la puerta detrás de si..
-Gabriela forcejeaba y gritaba suplicante la ayuda de su amiga ¡ayúdame!¡Por favor¡ Mariana
El pequeño abrió la puerta nuevamente y fijo su mirada en mariana
-el maestro te ha salvado la vida, no olvides tu pacto : tras de iremos, tras de ti estaremos hasta que el pago se haya completado diez almas es lo que prometiste, aquella noche que tu moriste..
