[MarkHyuck] Touch

Capítulo 1: Haechan, el demonio

Hola, hola

Kang's here ~(‾⌣‾~)

Traté de enfocarme en la escuela, lo juro (?) pero mi amor por la escritura es mucho más grande.

Esta vez es el turno de Mark y Donghyuck. Sigo sin entender cómo fue que terminé enamorándome de estos dos y de los Dreamies; lo único que quería era ver y descargar Fire Truck (;'Д')

Nota importante:

No soy experta en el tema de "ángeles y demonios"; sólo sé lo básico. Para propósitos de este fanfic, inventé y -creo- modifiqué algunas cosas, así que por favor, no se me vayan a ofender. ES SÓLO UNA HISTORIA.

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Capítulo 1:
Haechan, el demonio

-Felicidades, Mark. Al fin podrás cuidar de un humano - dijo su guía y maestro, Johnny mientras le palmeaba la espalda.

-Gracias - sonrió el aludido -No puedo esperar a conocerlo.

-Sígueme - indicó Johnny.

Ambos caminaron hacia la fuente en la que se veía a todos los seres vivos de la Tierra. Mark nunca pensó llegar hasta ahí; sólo los indicados podían acercarse a ella.

Johnny murmuró algunas cosas en un idioma que Mark apenas estaba aprendiendo, por lo que lo único que pudo identificar fue su nombre.

-Acércate - ordenó su maestro.

Mark obedeció y aquella agua tan cristalina comenzó a brillar y poco a poco este brillo fue desvaneciéndose hasta mostrar a un chiquillo de cabello rubio corriendo por un enorme jardín.

-Es él, su nombre es Jisung.

-¿Cuántos años tiene?

-Catorce - respondió Johnny.

-Espera, ¿no se supone que debería tener ya un ángel?

-Tenía. Nuestro hermano tuvo que ir a descansar, estaba muy grande para cuidar de alguien tan joven.

-Oh, lo siento - murmuró.

-Bueno, mañana mismo irás a la Tierra a vigilarlo, ¿quedó claro?

Mark asintió.

-No puedo creer que seas un ángel guardián - le revolvió el cabello -Vamos a comer algo, ¿te parece?

El ángel menor sonrió y siguió a su maestro.

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[ Al día siguiente ]

-Sólo tienes que hacer lo que se te enseñó. No te pongas nervioso, él no te puede ver - explicó Johnny.

-Entendido - asintió repetidas veces.

-Cuando se duerma, regresas a la Casa.

-Sí - juntos ambas manos e hizo una reverencia.