Depresión Post Parto
A menudo hemos escuchado que tras dar a luz muchas mujeres sufren depresión, la conocida depresión post parto, veamos exactamente en qué consiste y cuáles son los cambios emocionales que pueden sufrir los padres, pero en especial la madre.
Poco después de dar a luz, muchas madres, cerca del 50%, sienten un bajón emocional en lugar de alegría, con episodios de llanto. Además debido al gran esfuerzo físico, o de intervenciones durante el parto como una cesárea la mujer se siente muy débil y con falta de energía. Este estado de debilidad y cansancio conjuntamente con los episodios de llanto, normalmente se supera en unos días pero en ocasiones hacen falta un par de semanas. Este estado de ánimo bajo con el desgaste físico no se puede considerar depresión post parto debido a su corta duración.
En el caso de la depresión post parto (que en España afecta al 10,1% de madres, según un estudio de la Unidad de Psiquiatría y Psicología de la Mujer del Hospital Clínic, de Barcelona) ésta no se manifiesta al poco de dar a luz, sino que se suele presentar un poco más tarde. Los post parto son síntomas más intensos, frecuentes y duraderos generando una sensación de incapacidad y alterando la rutina diaria de la madre. Este tipo de depresión debe tratarse lo antes posible para impedir que se agrave o cronifique. Hemos de intentar en todo momento que el estado de ánimo de los progenitores no afecte a su hijo.
Síntomas más comunes de la depresión post parto:
Problemas para dormir
Ansiedad o nerviosismo
Llanto o tristeza
Cambios de humor
Elevada irritabilidad
Dificultades para concentrarse
Preocupaciones constantes
Dificultad para tomar decisiones
Cansancio y fatiga
Sentimientos de desesperanza o incomprensión
Pérdida de interés en actividades antes placenteras
Causantes de la depresión post parto
Cansancio físico
Es evidente que tras un parto, la mujer se siente físicamente sin fuerza alguna. Si añadimos que en los últimos años las cesáreas se han multiplicado y por lo tanto, tras el parto la madre está físicamente limitada. Pues durante un par de semanas ha de llevar los puntos de la intervención, y estar en reposo. Y hasta pasadas unas seis semanas no podemos considerar que la madre pueda estar recuperada físicamente de la intervención, y en algunos casos requiere más tiempo. Por otro lado los cambios hormonales y orgánicos que sufre el cuerpo antes durante y después del parto, explican claramente el motivo del cansancio físico que sufren las madres. Este cansancio o decaimiento no hay que confundirlo con depresión. Ya que suele ser pasajero.
Cambio de rol con la pareja y con uno mismo
Dentro de la pareja existen numerosos cambios tras el parto ya no es mi pareja, es papá y yo soy mamá, ahora somos tres y por lo tanto las dinámicas han de cambiar. Mi pareja dedica el 80% de su atención al recién nacido igual que hago yo, pero eso en qué lugar de la relación me sitúa?. ¿Mi pareja me quiere menos?. ¿Me quiere, pero de otra manera?. Por mucho que me he preparado he pasado de un día al otro en ser madre, hoy tengo un bebé a mi cargo y ayer no...Dejarme un poco de tiempo que lo tengo que asimilar.
Responsabilidad adquirida y temor a ser una buena madre
Por muchos libros que uno se lea, ninguno me explica por qué mi bebé ahora está llorando, ha comido, ha dormido... qué le falta? Qué le duele? Por qué a mí me cuesta dormirlo, y mi madre lo hace tan fácil? Cuando salgamos del hospital y volvamos a casa estaremos solos, pero y si pasa algo? Todos estos miedos son muy comunes y frecuentes, pero hay mujeres con una mayor propensión a padecerlos y a angustiarse antes que nada malo le ocurra a su bebé, pero " y si pasa?".
Cambios hormonales
A todos nos da la sensación que tras el parto el embarazo ya ha acabado y con él todo lo que conlleva. Lo que ocurre es que no es del todo cierto. Hormonalmente han habido unos cambios en la mujer muy importantes, y tras el parto siguen habiendo cambios, un claro ejemplo son dos hormonas que nos han proporcionado energía durante el embarazo, la progesterona y los estrógenos, y que tras el parto sufren un descenso brusco, que puede afectar al estado de ánimo igual que ocurre en los días previos a la menstruación. Por otro lado este descenso de progesterona es el desencadenante de que la prolactina (otra hormona) aumente sus niveles debido a que es la hormona encargada de poner al cuerpo a producir leche. Como vemos los cambios hormonales no se detienen tras el parto tienen su propia evolución que naturalmente afecta al estado de ánimo de la madre.
Antes del embarazo la mujer tiene un cuerpo físico que tras el parto para nada es el mismo. Ha sufrido una transformación muy importante, y muy complicada de revertir. Muchas mujeres se ven gordas, fofas y lo peor de todo sin tiempo ni ganas de volver al gimnasio a recuperar el cuerpo que han perdido. Ahora tienen otra obligación más inmediata que ocupa toda su atención y tiempo: la maternidad. Pero eso no hace que cuando se miren al espejo les guste el cambio físico que han sufrido. Este cambio suele afectar mucho a la de la madre.
Me siento desplazada
"Mi mundo ha cambiado, así como mis preocupaciones y prioridades, también mi cuerpo por dentro y por fuera ha cambiado, y para colmo todas las miradas y atenciones van hacia mi bebé. Es como si yo fuera invisible, pero me sabe mal pensar esto, porque quiero con toda mi alma a mi bebé. Pero la realidad es que ya no me ven, ni mi pareja, ni mi madre, amistades..." Muchas madres pueden sentir esto a diario, conjuntamente con el sentimiento de "sólo se dirigen hacia mí para corregirme y decirme que lo hago mal. Que debería cuidar a mi bebé de esta manera o de esta otra, pero y yo?.
Si te has sentido identificada, te encuentras abatida, desanimada, triste y han pasado más de dos o tres semanas del parto y ves que todo se te hace cuesta arriba, no lo dudes y contacta con un especialista para que te dé una primera valoración.
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By:Shaniitoon.....
