Little Sweety Kitty Boy [KookGi +18]

F*ck ♠ Me

Jung Kook retrocedió, tomó la silla sobre la que se sentó anteriormente y la puso frente a la cama. Se acomodó, cruzándose de piernas y apoyó su mentón en su mano, mirando expectante las acciones que realizaría Yoon Gi, quien tenía el rostro rojo. Le daba vergüenza tocarse y que el otro disfrutara de verlo e hiciera extrañas expresiones. Pero intentó dejar todo lo retraído de lado y se sentó al borde de la cama, abriendo un poco sus piernas. No quitó la mirada de su amo y con una de sus manos recorrió sus propios muslos de forma lenta y sensual hasta tocar su erecto miembro. Jugó un poco con sus dedos alrededor de la punta y empezó a bajar mientras toda su mano se tomaba. Apretó un poco y luego bajó y subió.

—Mmm...—gimió al sentir la excitación subir. Quería cerrar sus ojos y disfrutar, pero prefería ver a Jung Kook.

—Me encanta como lo haces—Kook lamió sus labios repetidas veces, sin dejar de verse tranquilo a pesar de que su miembro volvía a reaccionar.

Yoon Gi sonrió con la boca medio abierta al mismo tiempo que jadeaba. Su mano subía y bajaba constantemente, cada vez más rápido; volvió a salir aquel liquido de él cuando sintió estar a punto de llegar.

—Amo...

—Hazlo más rápido.

Aceleró sus movimientos, acatando órdenes y apretó más fuerte, sacando unos sonidos realmente eróticos que volvieron loco a Kook y no pudieron detenerlo de querer tocarse con lo que presenciaba. Pero no lo hizo, dejó que Yoon Gi se corriera y se dejara caer hacia atrás. Su abdomen quedó manchado, al igual que su mano.

Jung Kook se levantó del asiento y agarró los muslos del peligris para abrir sus piernas. Metió un dedo en la boca de Yoon Gi y éste lo chupó; seguido fue introducido en su entrada muy lentamente. A esas altura la ansiedad le podía. Metió un segundo y los movió en su interior. Se deleitó por un rato con su dulce voz y observando su hermoso rostro angelical.

La actitud sumisa del chico bajo su cuerpo le daba esa sensación que siempre buscaba. Yoon Gi era suyo, siempre lo fue y así sería; quien se atreviera a tocarle un solo pelo o, hasta incluso, tener un simple roce, conocía el peor lado de Jung Kook.

Los dedos del dominante entraban y salían preparando al otro para lo que más necesitaban. Kook se deshizo de todas sus prendas, ansioso. Los ojos llenos de lujuria con los que miraba al peligris eran algo que le daba escalofríos. A veces, el amo se volvía violento y eso a Yoon Gi no le gustaba mucho. Y, aunque hacía mucho mantenían ese tipo de relación y se suponía que Yoon Gi estaba acostumbrado a uno que otro golpe sin la intención de hacerle un gran daño físico, en ocasiones no quería ningún tipo de juego sadomasoquista con el amo Jung Kook.

La fuerza con la que Kook pasó a agarrar los muslos del otro, hicieron que éste soltara un pequeño quejido sin quererlo. Pero las ganas de introducirse en él le ganaron y acabó ignorando el hecho de que aquel rostro detonó por dos segundo una expresión de molestia.

—Gatito—le gruñó Jung Kook en su oído —.Te haré gemir hasta que quedes sin voz.

Una corriente eléctrica recorrió todo el cuerpo de Yoon Gi. Sintió el miembro del otro introducirse en él de forma brusca, aunque agradecía el haber sido preparado, Jung Kook en ocasiones no utilizaba ningún tipo de lubricante. Esta vez, había sido considerado.

Su cadera comenzó a moverse realizando estocadas que, según pasaban los segundos hacían que los jadeos del peligris se intensificaran de modo que Kook sonriera satisfecho por su accionar. Y mientras que sus cuerpos chocaban bajo una tenue luz en aquella habitación, los labios del pelinegro hacían un recorrido de abajo hacia arriba hasta quedar marcando aquella pálida piel con fuertes mordiscos. El pecho, hombro y la zona del cuello de Yoon Gi quedaron marcadas con sus dientes, adornándola con una rojez que quedaba contrastada con la palidez de su piel de porcelana.

Las lindas medias, aun en sus piernas, fueron parte del entretenimiento de Jung Kook; metió sus manos bajo éstas y acarició y arañó la piel de esa zona. No quería quitárselas porque le gustaba cómo se veían en él, pero tenía el impulso de hacerlo.

Yoon Gi, mientras que era invadido por miles de sensaciones, se atrevió a mover sus manos hacia la espalda del pelinegro, apretando allí sus dedos con fuerza debido a la intensidad con la que era penetrado. Jung Kook dejó de morderlo y se alejó a milímetros para mirarlo a los ojos. Esa dulce y tímida mirada solía provocarlo más, pero esa vez, vio algo diferente en él. Siempre que terminaban su acto sexual, él simplemente se iba y dejaba a Yoon Gi sobre su cama como si fuera sólo un objeto de satisfacción, pero lo cierto era que Jung Kook, a pesar de tenerlo como su mascota, sentía algo por él que no quería admitir.

Aquello que sentía no sabía qué era.

Su nombre siendo nombrado en gemidos lo sacó de sus pensamientos. Las ganas que tenía de tomar sus labios y besarlo con dulzura se fueron. Siguió con la fuerza y agresividad que siempre mantuvo, así hasta que logró llegar dentro de él.

Esa fue la primera vez que escuchó a Yoon Gi llamarlo por su nombre y no como "amo".

En cuanto terminó, salió de él, agitado. Se apoyó con ambas manos sobre la cama, quedando con la mirada fija en aquel rostro sonrojado que mantenía sus ojos cerrados. El pecho de Yoon Gi subía y bajaba cansado, su boca entreabierta era la vía más fácil para tomar aire, ya que sentía que no sería suficiente.

El pelinegro luego de observarlo, agitó su cabeza con el ceño levemente fruncido. Tomó el rostro de Yoon Gi con una mano y lo giró hacia él, haciendo que abriera sus ojos lentamente.

—¿Me amas?—le preguntó repentinamente, dejando pasmado al peligris, quien se quedó sin palabras—.Yoon Gi, contesta.

—Yo...—la voz apenas salia con claridad de entre sus labios, aun seguía agitado. Pero debía contestar la verdad —Sí.

🐱

Me tardé unos meses en actualizar, no me maten, ¡no me di cuenta del tiempo!

Pueden pegarme, ahre no.

Me disculpo por la tardanza 😂💔