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Trata de sentarse en la cama, ahora ya puede hacerlo solo, antes necesitaba ayuda porque se lastimaba mucho.
Toma las muletas e intenta moverse hasta la salida.

Va al baño para hacer sus necesidades y lavar sus manos. Nota que hay un olor diferente en el ambiente pero no es desagradable, es un aroma suave y grato que inunda la casa, en ese caso no puede provenir del baño, huele más como a un postre. Camina con cuidado por el pasillo hasta las escaleras donde más se nota el aroma.

Ya es su segunda semana en la mansión; Gina o el señor Payne siempre le ayudan con la silla de ruedas para salir, para ir al baño, para llevarlo a tomar aire fresco, etc. Son muy sobre protectores ya que Zayn no necesita realmente la silla.

Ese día decide hacer las cosas solo. Baja las escaleras hacia el comedor en donde están su nueva familia.

—Buenos días, Zaynie—saluda entusiasmada Natalia, el moreno solo le sonríe.

Geoff se levanta y lo ayuda a sentarse en una silla a su lado.
Gina sirve el desayuno, Geoff lee el periódico y Natalia colorea un dibujo sobre la mesa.

—Buenos días—se escucha una voz ronca y gruesa detrás suyo. Puede percibir más el aroma.
Lo mira y el chico hace lo mismo solo que regalándole una sonrisa, Zayn frunce el ceño.

—Hijo, buenos días, que bueno que despiertas, él es Zayn, vivirá un tiempo con nosotros

—Hola Zayn, soy Liam, estaré encantado de ayudarte—sonríe amable pero el moreno sigue con la mirada fría y pesada.
Geoff y Liam se miran confundidos.

—A comer, que se enfría—agrega Gina y comienzan a desayunar.

Liam habla de como le ha ido en sus clases de verano, está acostumbrado a estudiar en casa por lo que salir a otro lugar fue una gran experiencia para él. La familia habla y preguntan de su viaje a excepción de Zayn quien se mantiene callado.

Cuando termina se levanta y quiere recoger su plato pero Gina se lo impide.
Quiere caminar pero Liam toma la iniciativa para ayudarlo.

—Déjame llevarte—lo toma del brazo suavemente pero el mayor corre el brazo mirándolo con odio. Liam se hace para atrás un poco asustado y Zayn sigue con su camino.

—¿Es así con ustedes?

—Para nada, es un chico muy amable—contesta Gina

—Es muy tímido, quizás es solo porque no te conoce, se le pasará—habla Geoff y Liam asiente.

Cada quien se va a hacer su trabajo.
La profesora de Natalia llega por lo que están estudiando.
Gina hace la limpieza, Geoff sale por las compras y Liam se queda en su habitación mirando algunas fotografías que sacó de su cámara instantánea en sus cursos de verano.
Extraña a sus amigos, fue un largo año pero también extrañaba a su familia.

Tiene un poco de hambre por lo que se levanta de la cama para ir a la cocina y comer alguna fruta o un snack.

Cuando entra a la cocina encuentra al morocho intentando alcanzar la miel, Liam se apresura y la toma por él.

—Ten más cuidado, podrías lastimarte

—No necesito tu ayuda—sus ojos muestran frialdad y enojo

—Trato de ser amable, de ayudarte porque no puedes, estás herido

—Claro que puedo

—Mi padre me pidió cuidarte, ahora eres también mi responsabilidad y si algo te pasa me involucra en eso

—Solo vete, ya dije que no te necesito.

Liam suspira, no quiere discutir asi que se sienta en una silla del comedor y mira como Zayn se estira para tomar ahora el cereal lo cual no lo logra.

—Ajá y dices que puedes solo—habla entre molesto y divertido, molesto porque Zayn es muy gruñón y divertido porque obviamente no puede hacerlo solo.

—Veo que necesitas ayuda

—No la tuya... ¡Gina!—unos segundos más y Gina se encuentra en la cocina bajando el cereal y ayudando a Zayn a lo que necesita.

Liam hace un gesto de tristeza.
Zayn es el único chico de su edad que podría acompañarlo en su casa pues nadie más vive cerca, es horrible que ni siquiera le agrade.

Se levanta y sale a caminar, extrañaba tanto hacerlo, despejar su mente y relajarse.
Camina hacia el bosque, sabe que su padre le ha prohibido adentrarse en él pero nunca le ha pasado nada, no puede pasarle nada ahora.

Ama lo grandes que son los árboles, las hojas son las que impiden que la luz llegué hasta el fondo aunque ahora está muy claro el camino.

A lo lejos nota que algo se mueve de entre los arbustos, no sabe qué es pero sabe que hay algo, entrecierra los ojos tratandonde enfocar su vista y se da cuenta que algo grande se mueve hacia él.

—¡Liam!—voltea asustado y logra ver a su pequeña hermana.

—Vámonos

—¿Ah?

—¡Corre!—ella asiente y corre lo más que puede.
Liam la toma de la mano para que apresure su paso.

Llegaron a su casa, Liam cerró la puerta con seguro y se quedan descansando y tratando de respirar normal.

—¿Qué viste?

—Yo... No lo sé pero era muy grande.

Jamás se había asustado tanto.

Animal Soul - ZiamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora