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Zayn ya lleva dos meses en la mansión de los Payne. Natalia se ha vuelto su amiga y confidente, Gina es amable y tierna por lo que la ve como una figura materna y Geoff como una paterna. En cuanto a Liam, todo anda mal. Liam y Zayn no hablan, Zayn siempre trataba de hacer que el castaño se aleje de él, que ni siquiera lo mire, parece que lo odiaba, aunque realmente no es así.

Zayn ya puede caminar bien, su pierna ya no le duele, incluso puede correr. Geoff lo cuida mucho, como no quiere que vuelva al bosque, siempre le dice y advierte que debe quedarse dentro del área protegida, si sale de ahí estará en peligro. Claro que Zayn no quiere volver a encontrarse con los cazadores, por lo que atiende la orden.

Gina se encuentra arreglando las flores del jardín mientras que Natalia y Zayn juegan con la pelota, Zayn no está en su forma humana, Natalia no lo hace, ella está normal.

Liam los mira desde su habitación ya que esta tiene la vista del patio. No recuerda la última vez que estuvo en su forma animal, ni siquiera intenta recordar, le hace sentirse triste.

En un momento Zayn alza la mirada y conecta sus ojos con los de Liam, ambos se miran unos segundos hasta que Zayn rompe la conexión.

—Liam—voltea a ver a su padre—Estaré fuera, Natalia vendrá conmigo, cuida a Zayn

—Claro—vira los ojos—¿tardarás?

—Algunas horas, iremos al pueblo

—Bien, con cuidado

—Gracias.

Suspira cansado, baja al jardín con Gina y Zayn. El moreno está recostado en el pasto sacando la lengua como si estuviese cansado y sediento. Liam se siente incómodo, necesita fumar, eso le hace sentir mejor.

Gina se levanta del pequeño asiento pero se tambalea mareada, Liam se acerca a socorrerla.

—¿Estás bien?—la sostiene por la espalda y el brazo

—Estoy bien, cariño, no es nada

—Deberías ir a descansar

—Estoy bien—repite amable

—Ve a hacerlo, debes estar agotada

—Bueno pero si necesitas algo no dudes en llamarme

—Lo haré.

Gina va a su habitación y entonces Liam y Zayn se quedan solos, Liam va hasta el patio delantero pero Zayn lo sigue. 

Se sienta en una de las sillas que se encuentran ahí, saca un cigarrillo y su encendedor. Da una calada y Zayn se acerca olfateando, sigue en su forma animal.

—¿Te molesta el olor?—cuestiona Liam mirándolo, dando más caladas. Zayn no responde.

—No te entiendo, siempre me alejas y ahora estás aquí... conmigo—Zayn lo mira y entonces se aleja, Liam bufa divertido y enciende otro cigarrillo. 

...

El cielo está despejado, completamente azul y el sol está en su máximo resplandor, lo cual es raro, esos días casi no se presentan.

Liam aprovecha el maravilloso día para salir a dar una caminata, se asegura de que su padre no lo vea y se adentra al bosque.
Está caluroso, usa una camiseta sin mangas y pantaloncillos cortos que quedan un poco por encima de la rodilla.
Camina mirando a su alrededor, gravando en su mente todo lo que puede, así se le hará más fácil regresar, asimismo, deja algunas marcas  con pintura roja en distintos árboles. Es temprano, sabe que volverá en la tarde a su casa.

A lo lejos escucha el correr del río, corre hasta este y sube a una gran roca para apreciar de mejor manera el paisaje. Su padre no los deja salir tan lejos pero recuerda el río gracias a que su madre los llevaba a ese lugar a acampar y realizar picnics.
Saca su cámara y toma varias fotos en diferentes ángulos.

Sigue caminando aproximadamente una hora por camino montañoso y bastante húmedo, se queda maravillado al ver un precioso manantial de agua completamente cristalina. Deja sus cosas a un lado donde nada ni nadie podrá verlas; inspecciona el lugar, cuando se da cuenta de que no hay ningún animal peligroso quita su ropa y se adentra a la fría pero increíble manta de agua.

Nada libremente y goza de la naturaleza que, gracias a la sobre protección de su padre, no ha podido siquiera ver.

Pasa mucho rato nadando pero su estómago le pide alimento, llega a la orilla y escucha algunos gruñidos y pisadas fuertes muy cerca de donde se encuentra, se escode para lo que sea que esté ahí no lo vea. Podría ser un oso o quizá un lobo.

Los sonidos que emana esa criatura se escuchan cada vez más cerca, causa de esto se sumerge aguantando la respiración, escondiéndose bajo una roca. Pasan unos cuantos segundos que parecen horas para el de ojos marrón. Espera otros segundos más para asomarse y asegurarse de que ya no haya nadie. Sale del agua y avizora el lugar, suspira más tranquilo y se pone su ropa para después volver a su casa.

El regreso es fácil gracias a su buena memoria y las marcas en los árboles.
Teme que su padre se dé cuenta. 

Animal Soul - ZiamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora