Until The End || Camila Cabello & Tú ||

Capítulo 13

Sacanos de aquí.

Camila se sentó en su cama, con las rodillas apoyadas en su pecho, mirando al otro lado hacia la cama vacía que una vez fue ocupada por su hermana Sofía.

Ella tenía 10 años, ella pudo escuchar las voces de sus padres a través de las delgadas paredes de su compartimento.

—Tenía dieciocho años de edad, Alejandro,— dijo su madre. —¿Qué estaba haciendo ahí afuera?—

—No sé,— respondió su padre. Su voz rota.

—¿Cómo vamos a decirle a Camila? ¿Cómo vamos a decirle que su hermana está muerta?— Exclamó su madre.

Camila contuvo un sollozo.

—¡Debiste de haberla detenido!— Su madre gritó. —¡Nunca debiste de haberla dejado firmar eso!—

—¡¿Cómo podría haberla detenido?!— Su padre gritó. —Era una mujer adulta, hizo sus propias decisiones.—

—¡Tenía dieciocho años! ¡Era una niña! Mi niña...—

Camila gritó, mordiendo la manga de su pijama, sofocando cualquier ruido.

Camila abrió los ojos lentamente, y se dio cuenta de dos cosas. Los labios de _____ se movían sin hacer ruido y el intenso dolor que se extendía por su abdomen.

Luego el sonido volvió.

Voces gritando. Armas siendo disparadas. _____ hablando.

—¡Camila! Camila, mírame,— dijo _____, su mano en la mejilla de Camila. Sus manos estaban cubiertas de sangre. La sangre de Camila. —Cami, ¿qué hago?—

Camila era consciente del rojo intermitente procedente de su brazo, su boca estaba llena de sabor metálico. Quería cerrar los ojos de nuevo. Ella quería parar el dolor y el ruido.

—Camila, tienes que decirme qué hacer,— dijo _____, con la voz quebrada por la desesperación.

—No puedes... No hay nada,— dijo Camila, cerrando los ojos mientras soportaba el dolor.

—No, no, no... Vamos, Cami,— dijo _____, tomando delicadamente la cara de Camila con las dos manos. —Vas a estar bien. Estás bien, estás bien.—

—No lo estoy,— dijo Camila. —_____ tienes que irte.—

—No,— dijo _____. Tomó otro rollo de vendas de la bolsa médica de Camila y continuó envolviéndolas alrededor de su cintura. Sintió la mano de Camila apretar alrededor de su muñeca.

—Detente,— dijo. —Es demasiado tarde.—

—No voy a dejarte aquí, Camila. Voy a cubrir la herida y luego voy a llevarte de nuevo a N.T.—

—¿Cubrir?— Camila dijo con una pequeña risa. Trató de levantar la cabeza para ver el daño, pero inmediatamente se sintió mareada y la dejó caer al suelo. —No puedes hacer nada, no voy a sobrevivir el viaje de tres horas.—

Ella estaba cansada. Ella estaba con dolor. Ella estaba muriendo.

—¿Qué quieres que haga?— _____ preguntó, lágrimas bajando a través de la suciedad y sangre seca de sus mejillas. —¿Sólo dejarte morir?—

—Sí,— dijo Camila. Ella empezó a toser, su boca se llenó de sangre de nuevo. Finalmente dejo escapar un pequeño sollozo de dolor. —Me duele.—

—Está bien, bebé,— dijo _____ con dulzura. Acarició el pelo enmarañado de Camila y la besó en la frente fría y húmeda. —Estás bien.—

—Te amo, _____,— dijo.

—Te amo mucho más,— dijo _____ con la voz quebrada. —Y voy a sacarte de aquí, lo prometo.—

—No me puedes prometer eso,— dijo Camila, antes de cerrar su ojos.

—¿Camila?— _____ miró la pequeña computadora, ningún registro de latidos. —¡Camila!—

—_____ tenemos que irnos,— dijo Normani, colocando una mano sobre su hombro. _____ se apartó y comenzó a sacudir a su novia.

—Vamos Camila, no hagas esto,— dijo ella, buscando desesperadamente una señal de que Camila todavía estuviera allí.

Pero no había nada.

No hay pulso. No hay latidos. No respiraba.

Nada.

—_____.— Normani dijo, cuando _____ se echó hacia atrás, derrotada. —_____ tenemos que irnos ya. No podemos luchar contra ellos por más tiempo.—

_____ alzó la vista, viendo como sus amigos y compañeros trataban de contener a estas nuevas criaturas. Con nada más que furia y agonía en sus ojos, cogió su arma y se unió a la lucha.

—¡_____!—

Cuando el resto de los soldados comenzaron a caminar hacia atrás, en dirección a la nave, _____ avanzó. Ella observó como uno de los aliens iba contra Vero, ella corrió hacia el alíen, tirándolo al suelo.

Al chocar contra el suelo su casco se desprendió, revelando su cara, era un humano.

Un disparo se escuchó y lo que fuera eso cayó al suelo, muerto, con un agujero en la cabeza.

—_____, muevete,— dijo Vero, levantándola del suelo. Ella puso su mano en el hombro de _____ y trató de tirar de ella de vuelta a la nave. —Vámonos.—

—No,— dijo _____ de nuevo.

Otros miembros del equipo comenzaron a tirar de ella de nuevo a la nave, ella no hacia nada, hasta que sus ojos se posaron en el cuerpo de Camila. Entonces ella comenzó a luchar.

—No voy a dejarla,— dijo ella, luchando contra las manos que sujetaban sus brazos.

—No podemos llevarla con nosotros,— dijo Normani, luchando por mantener la voz tranquila, mientras miraba las decenas de cadáveres de los soldados caídos que los rodeaban. —No podemos, conoces las reglas.—

Cuando llegaron a la puerta de la nave, _____ se liberó y se dirigió a Camila. Normani accionó un interruptor en su arma, después de presionar el botón donde decía 'no letal', le disparó a _____.

—Ve por ella,— dijo Normani, su voz amenazaba con romperse.

Lucy corrió y recogió a la morena ahora inconsciente. Ella echó un último vistazo al planeta. Y se metió a la nave con _____ en sus brazos.

—¿Lauren puedes volar esta cosa?— Normani preguntó, reprimiendo las ganas de llorar.

—Sí,— dijo Lauren, yéndose hacia la cabina del piloto.

—Sacanos de aquí,— dijo, sentada contra una pared, _____ acostada a su lado. Ella puso su mano en la frente de ella y quitó el cabello de su cara. —Lo siento, _____. Lo siento mucho.—

~.~

Se dirigieron al planeta, recogiendo los cuerpos de los muertos, poniéndolos en dos camiones.

—Disparo en la cabeza,— dijo un hombre, su bota inclinando la cabeza de un soldado muerto.

—No sirve,— dijo el segundo hombre. —Camión dos.—

Llegaron al campamento donde el cuerpo del último muerto se encontraba. Una chica morena.

—Podemos utilizar este,— dijo el segundo hombre. —Camión uno.— un tercer hombre vino y recogió a Camila, colocándola en el primer camión. —Podemos traerla de vuelta.—

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