C A P I T U L O VII : Desencanto, ódiame un poco más de lo que te amé.

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—Viktor yo... -Exclamo mientras las rodillas le temblaban y sentía que el alma se le saldría del pecho- me caso en dos semanas con Phichit...-Soltó la bomba era como si algo en el sintiera alivio pero a la vez como si le destrozara desde dentro quemándole las entrañas como mil puñales-

—Que tú qué? –Cuestiono su rostro palideció, esa venganza por parte del Japonés estaba yendo demasiado lejos ya, acaso no se daba cuenta que lo estaba lastimando- debí escuchar mal.. –Murmuro antes de esbozar una sonrisa retorcida por el dolor, mientras los ojos se le llenaban de lágrimas que intentaba contener- creí haber escuchado que te casaras.. –Exclamo en espera de que esta vez la respuesta de su amado Yuri cambiara- Yuri dime que escuche mal..

—No Viktor.. me caso en dos semanas con Phichit, lo amo, más de lo que te pude haber amado a ti.. –Repitió con cierta frialdad, aun cuando por dentro estaba muriendo de la peor manera, aun cuando sabía que se condenaría a un matrimonio sin amor, aun cuando era consciente de que el amor de su vida estaba hay sufriendo por el- así que por favor de la manera más atenta no vuelvas a buscarme Viktor.. no quiero que sufras pero no te amo mas

—Yuri... -Murmuro antes de que las lágrimas comenzaran a salir una tras otra sin siquiera poderlo controlar- yo se que me amas tu... me amas Yuri, lo se tiemblas cuando te toco, cuando te beso puedo sentirlo yo...

—No te equivoques,.. –Soltó en un tono frio- siempre podrías hacerme sentir tan vulnerable, pero dios eres un ruso muy sensual con una sexy voz pero mi corazón, Viktor ese ya no es tuyo.. si bien podrías calentarme igual que antes no te amo.. –Dijo con la frente en alto mientras le observaba a los ojos- lo siento si no es lo que deseas escuchar, y si en verdad es todo puedes irte Phichit no tarda en llegar y vamos a salir...

—Estas siendo demasiado cruel y lo sabes.. –Defendió el peliplata mientras las lágrimas seguían desbordándose sin permiso alguno, mientras su corazón era desgarrado sin piedad alguna y mientras lo poco de esperanza que, había en el moría con cada una de las palabras de su amado Yuri-

—Lo lamento Viktor, pero el que estés vivo... no va a cambiar nada.. no eres el centro del universo.. –Dijo alzando los hombros para caminar a la puerta y abrirla- vete por favor ya no quiero verte así.. das pena.. –Solto cual veneno , uno que estaba lastimando a ambos-

—Ya... comprendo.. –Murmuro solo para bajar la mirada y tratar de no llorar mas aun cuando le era imposible- disfruta tu matrimonio.. –Agrego para salir de hay cojeando, no sabia cual dolor era mas grande el que habitaba en su pecho y le estaba quemando el alma entera, o su pierna que le estaba matando, pero cualquiera de las dos era simplemente insoportable, Viktor Nikiforov ya no valía absolutamente nada , no era ni siquiera la sombra de lo que fue-

Yuri cerro la puerta tras Viktor y solo se dejo caer sobre la puerta hasta topar con el frio suelo cubriendo su boca para por fin liberar ese llanto que le estaba matando ese dolor que le oprimia el pecho y esa desesperación que simplemente no le permitía siquiera respirar, se pasó las manos sobre el cabello, maldita la hora en que decidió volver, lo había dejado atrás, se había hecho a la idea de que no estaría mas en su vida y así solo por arte de magia decidía volver solo para recordarle que había sido un juego en su vida.

La pierna, esa maldita pierna lo estaba matando, un trago tras otra venia solucionando su dolor de alma, y el vicodin el de su pierna, pronto el vaso se volvió un estorbo y bebía directamente de la botella de Vodka que, quemaba su garganta al descender por esta —Salud Yuri! Cásate y déjame atrás.. –Exclamo entre su llanto mientras ahogaba las penas en el alcohol, se limpiaba las lágrimas con rabia e intentaba seguir- PUDRETE YURI! –Gritaba mientras sentía que le faltaba el aire cada vez mas- púdrete... porque, yo te amo te amo como un idiota.. –Decía una y otra vez mientras recargaba la cabeza contra la pared del mini-bar donde se encontraba tirado, entre la obscuridad- te amo...

Mi única EsperanzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora